El recuerdo más triste de Laura Escanes en 2022 es todo un dardo a Risto Mejide
La influencer se ha atrevido a hacer balance de un año de cambio para ella y que le deja un sabor agridulce por varias razones
Laura Escanes se ha liado la manta a la cabeza y se ha sumergido en un balance anual repleto de contrastes. Ha sido doloroso recordar algunos episodios de un 2022 que le ha traído su separación matrimonial de Risto Mejide tras no poder superar una grave crisis. Pero no ha sido todo malo. En lo personal sigue disfrutando de su hija Roma, de sus amigas y de un sinfín de planes a lo largo y ancho del mundo. Mientras que en lo profesional, las cosas también van viento en popa e incluso ha estrenado su podcast particular, Entre el cielo y las nubes.
Siempre que uno echa la vista hacia atrás genera sentimientos encontrados. Pasa en todos los aspectos de la vida. La catalana ha querido hacer una especie de recorrido por lo que le ha deparado este año que está a punto de expirar. Lo ha llevado a cabo a través de varias stories en Instagram -una por mes- en la que recuerda algunos momentos destacados y otros inéditos.
Septiembre fue un mes absolutamente clave. Fue el día 25 cuando Risto Mejide y Laura Escanes anunciaron su adiós después de 7 años juntos y una hija en común. «El amor no se acaba. No muere. Y te seguiré queriendo el resto de mis días. Si tenía que vivir todo esto y conocer lo que es el amor, tenía que ser contigo», escribió ella en su despedida. Hubo mucho dolor y por ello, en la historia que ha subido para septiembre ha escrito: «vamos a pasarlo rapidito».
Lo que en un primer momento fueron todo bonitas palabras, pronto éstas se tornaron en distancia, frialdad e incluso en un unfollow en las redes sociales. Quizá tuviera algo que ver el estallido del romance entre Laura y el cantante Álvaro de Luna, del que te dimos todos los detalles en THE OBJECTIVE. Una nueva ilusión que ella ha preferido no incluir en su balance ya que prefiere llevarla con absoluta discreción.
El zasca de Laura Escanes a Risto
La influencer no esconde la realidad que le ha tocado vivir: «Ha sido un año que personalmente no acompañaba a lo profesional y ha sido muy duro (…) he trabajado mucho en mí, pero el proceso ha sido difícil». Su recuerdo más triste tuvo lugar en abril, cuando cumplió 26 años. Ahí fue cuando se sintió más sola que nunca.
«Aunque lo celebré rodeada de la familia, no recuerdo que fuera un buen día. Me encargué yo misma el pastel (triste pero cierto), y un poco más y me saco yo misma el pastel soplarlo. Pero en Instagram eso no se ve, claro… Me da rabia esa presión de enseñar que estás feliz, porque si te comparas todo son familias felices y momentos increíbles», reflexiona. Unas líneas de las que se destila cierto dolor con que sus seres queridos -encabezados por Risto- no estuvieran a la altura. Por el momento, estas palabras de la creadora de contenido no han obtenido respuesta por parte del comunicador, quien ha decidido no entrar a valorar nada que esté relacionado con su separación.
Baño de lágrimas
En ocasiones, Instagram adultera la realidad porque sólo se muestra lo que los usuarios quieren. Pero para Laura Escanes no hay trampa ni cartón y ha sido valiente al publicar fotos en las que aparece llorando. «El resumen de mi año podría ser este: no paraba de currar, tenía proyectos increíbles que ni en mis mejores sueños… y una parte de mi lo disfrutaba y otra necesitaba que me permitiese estar mal», ha finalizado.