Sara Sálamo: toda la verdad sobre su belleza (no) natural e impostada en los Goya
La actriz canaria vuelve a estar en el ojo del huracán por su decisión de ir a cara lavada en los Premios Goya, pero ¿realmente no llevaba maquillaje?
Resulta sencillo encontrar a Sára Sálamo allá donde haya una polémica. Desde que saltó a la fama como actriz y después por ser pareja del futbolista Isco Alarcón, no ha tenido reparos en meterse en varios charcos. Es más, se podría decir que hasta ha disfrutado saltando sobre ellos, a veces sin botas de agua, entiéndase la metáfora.
Sara no negocia su opinión y siempre suele darla a través de cada una de sus apariciones, ya sean virtuales o presenciales. Feminismo, body positive o política han sido solo algunos de los temas sobre los que ha tenido algún que otro enganchón en redes sociales, donde suele ser bastante criticada.
El último caso en el que ha tenido un protagonismo muy buscado ha sido en los pasados Premios Goya, donde acudió sin ni una gota de maquillaje, o al menos eso es lo que ella dijo. Y lo explicó así: «Pensé en la posibilidad de hacer algo así, me dio mucho vértigo. Me pareció una buena manera de ser responsable con el altavoz que tenemos de aceptación, aunque nos dé vértigo. En grandes ocasiones también deberíamos sentirnos a gusto sin tanto artificio».
Sara desveló ante la prensa que tomó la decisión a raíz de una charla con su novio: «Fue tal el vértigo que sentí al fantasear con la posibilidad, que entendí que era el momento de hacerlo. Comencé a replantearme qué era el maquillaje para mí y llegué a la conclusión de que no es tan opcional como creía… Quizás sí lo es en el día a día, pero cuando se trata de un evento importante, una boda o una gala, no lo es. Creo que no existe debate sobre si debemos maquillarnos o no».
Hasta ahí todo correcto, sino fuera porque nada más verla en la alfombra azul de los Goya, los ávidos usuarios de Twitter empezaron a cuestionarse sobre sí de verdad había renunciado a todos los artificios de los que se jactaba.
Las reacciones a la reivindicación de Sara Sálamo
Hasta el plató de Ana Rosa Quintana ha llegado el debate. La presentadora daba su opinión con una sonrisa picarona: «Sara, hija, tú puedes ir sin maquillar, (…) ahora es una tendencia, mucha gente se muestra sin maquillar para reivindicar que ya está bien». Unas palabras con las que Bibiana Fernández no estaba muy de acuerdo: «También se puede reivindicar lo contrario. La verdadera libertad es que la gente se maquille y no se maquille, que se operen y no se operen…», decía la colaboradora.
Otra de las opiniones más comentadas ha sido la de la actriz Nerea Barros, quien también estuvo en la ceremonia, y que no terminaba de comprar el relato de Sara Sálamo: «Yo creo que sí llevaba maquillaje. Hombre… un poquito. Yo iba a cara lavada también, pero no lo subo a Instagram. Yo iba con el desfile de Chanel, que es cara lavada, simplemente que trabajas mínimamente para que sea efecto ‘cara lavada’».
Finalmente, la actriz gallega daba la razón a la novia de Isco, aunque a regañadientes: «Me parece muy bien, genial, pero vamos… yo creo que Ingrid García eso lo ha hecho un millón de veces. Me parece fantástico, encantada, pero cada uno tiene que ir como le apetezca, (…) hay gente que se siente más segura yendo más maquillada. Yo me siento más segura con la piel al aire, me agobio con mucho maquillaje. Para gustos…».
Erre que erre
La controversia ha seguido en los días posteriores a los Premios Goya y tiene a la propia Sara Sálamo como agitadora. La tinerfeña no ha dudado en cargar contra un seguidor en Twitter de los varios que dejaban entrever cierta «demagogia» por parte de la actriz a la hora de ir a la gala celebrada en Sevilla.
Un usuario escribió lo siguiente: «Yo que soy un tío bastante cenutrio y se supone que no sé nada de esto. Esta mujer lleva maquillaje: base, colorete, sombra de ojos, pintalabios, peluquería, mínimo dos horas de rulos, tenacillas, secador. Vestido de Armani. Joyas de Rabat». Ni corta ni perezosa, Sálamo lo descalificó: «Sí, Marcial. Es usted un cenutrio y definitivamente le confirmo que no sabe usted de esto. Un abrazo y feliz vida».