Cuál es la verdadera relación entre la infanta Elena y Letizia: los dos momentos cruciales
La Infanta cumple 60 años y ha organizado un gran almuerzo en un restaurante exclusivo en Madrid
La infanta Elena está hoy de enhorabuena. La hija mayor del rey Juan Carlos y la reina Sofía cumple, este 20 de diciembre, 60 años. Por ello, como ya contamos en THE OBJECTIVE, la Infanta ha organizado una celebración en el Palacio de La Zarzuela a la que acudirán sus amigos y, sobre todo, sus familiares más allegados.
Aunque eso sí, el invitado de honor será su padre, don Juan Carlos, quien viajará desde Abu Dabi a la capital de España para pasar tiempo con su hija y lo hará en compañía de Froilán, quien también reside con él. Lo cierto es que, parece ser, que esta fiesta no ha sido del todo del agrado del rey Felipe y mucho menos de Letizia, quienes huyen de las polémicas.
La complicada relación entre la infanta Elena, Felipe y Letizia es un secreto a voces. Una infinidad de sucesos, que han pasado en los últimos tiempos, han dinamitado esa sintonía que, en un principio, tenían. Además, el rey no estaría muy de acuerdo con que su padre regresara a España, al fin y al cabo en unos días dará su discurso de Navidad y no espera que se genere algún tipo de controversia. Aún así, ambos han acudido a la celebración del cumpleaños, que se ha celebrado lejos de Zarzuela, en un restaurante en el barrio de Hispanoamérica.
Cómo era la relación entre la reina Letizia y Elena cuando se conocieron
Ha sido este estrecho apoyo entre Elena y su padre lo que ha influido en la relación entre los hermanos. Tanto Elena como Cristina siempre se han posicionado al lado de su padre, una actitud muy distinta a la que ha tenido Felipe en estos últimos tiempos. Además, en cada visita, suelen ser las dos hermanas quienes acudan a ver a su progenitor y a pasar tiempo juntos. Por eso, la vuelta del Emérito a España, sin ningún tipo de justificación, podría haber molestado al Rey y a Letizia, con quien Juan Carlos mantiene una complicada relación desde hace muchos años.
En el libro Elena. La infanta castiza, Nuria Tiburcio hace una radiografía perfecta de la hija mayor de los Reyes Eméritos y, también, habla de las idas y venidas con Letizia. Parece ser que allá por 2004 cuando la periodista fue presentada en sociedad y a su familia, la sintonía era buena. Un extremo que fue evolucionando y cambiando. «Cuando conoció a Letizia fue todo muy cordial, pero Elena ya sabía que eran la noche y el día», apuntan en el libro.
Para la Reina tampoco fue fácil encajar en la familia de su prometido, ya que veía que cada uno seguía sus planes y le parecía que Elena tenia «un carácter retraído, que le costó descifrar».
A pesar de que en un primer momento no tuvieran nada en común parece ser que les unió el mundo de la moda. Así, fue la Infanta quien le recomendó a Letizia sus diseñadores de cabecera, es decir, Lorenzo Caprile y Felipe Varela. También, Elena participó, de forma activa, en los preparativos de la Boda Real, así como en el bautizo de la princesa Leonor.
Además, su nacimiento fue toda una alegría para la Infanta. Elena siempre ha creído en los valores de la Corona y, por eso, cuando Felipe y Letizia tuvieron descendencia, la Infanta vio asegurado el futuro de la monarquía.
Los dos incidentes con el que se dinamitó la sintonía entre las cuñadas
Tal y como confirma en sus líneas Nuria Tiburcio el principio del fin de su buena relación comenzó con Jaime de Marichalar. «La gota que colmó el vaso para Elena fue el claro posicionamiento de Letizia tras su separación. La esposa de don Felipe se convirtió en un baluarte de Jaime, en aquel momento roto por el cese de la convivencia», se plasma en el libro. Parece ser que entre Jaime y la reina Letizia siempre hubo mucha sintonía, probablemente porque encontró en él alguien que podía comprender su punto de vista.
Tanto es así que, durante 2014, cuando falleció la madre de Marichalar, Letizia acudió a darle el pésame y, también, se paseó junto a él cogido del brazo. A partir de ese momento, las relaciones se enfriaron mucho. Y no solamente entre ellas. También en todo lo relacionado con sus hijos. Así, mientras que Victoria Federica suele disfrutar de una infinidad de momentos junto a los hijos de la infanta Cristina, en el caso de Leonor y Sofía es todo muy distinto.
También, otro de los momentos que condicionó su relación para siempre fue el incidente que sucedió en la catedral de Palma de Mallorca, durante el verano de 2018, donde se vio un controvertido gesto de la reina Letizia con su suegra, Sofía. «Tras el rifirrafe real, que Elena no olvida, sus encuentros han sido contados.
No coincide nunca con ella, ni siquiera cuando visita la Zarzuela para ver a su madre o para practicar equitación. Y si coinciden, la conversación es corta: ‘¿Hola, ¿qué tal? ¿Cómo están los niños? Adiós», comentan en el libro.
¿Irán los reyes a la celebración de la infanta Elena?
Lo cierto es que, en todos estos años, la infanta Elena ha tenido que lidiar con las polémicas relacionadas con su padre, al igual que todas aquellas que tienen relación con sus dos hijos. Tanto Victoria Federica como Froilán han protagonizado una infinidad de titulares en la que los dos hijos de Elena y Jaime no quedaban en muy buen lugar.
Por eso, hace unos mes, Froilán decidió mudarse hasta Abu Dabi para encontrar más tranquilidad y, por eso, alejarse de cualquier noticia relacionada con su persona.
Por tanto, Letizia y Felipe han decidido acudir al almuerzo y han llegado a coincidir con el rey Juan Carlos. Hasta el exclusivo restaurante también ha ido la infanta Sofía, quien cogió las vacaciones de Navidad el pasado 8 de diciembre. Por su parte, la princesa Leonor disfrutará de sus días de asueto a partir de este mismo viernes, ya que ahora mismo se encuentra en una formación en Astún.