Todos los negocios de José Bono y sus hijos: una hípica, inmobiliarias y redes sociales
Tanto Amelia como Ana, José y Sofía están muy unidos a sus padres y forman parte de sus entramados empresariales
Los negocios de José Bono y sus hijos. | Ilustración de Alejandra Svriz
Fue a principios de marzo cuando la revista ¡Hola! confirmó que Amelia Bono y su marido, Manuel Martos, ponían fin a su matrimonio. Lo hacían después de unos últimos años de idas y venidas, en los que se habían dado una segunda oportunidad. Era la propia hija del exministro José Bono la que daba las explicaciones pertinentes a la prensa y pedía comprensión. Y es que, a pesar de sus pocas ganas de volver al foco público, la empresaria volvía a ser noticia. Al igual que, durante muchos años, también lo han hecho sus hermanos, José, Ana y Sofía, quienes han centrado su carrera laboral, en parte, en torno a su padre y, también, con sus propias aventuras empresariales.
Tanto Ana, Amelia como José y Sofía están muy unidos a sus padres, José Bono y Ana Rodríguez. Aunque el matrimonio ya se disolvió hace años, esto no hizo que su relación se resquebrajara. Es por eso que es normal que los cuatro se reúnan con sus padres en cualquier evento para celebrar las fechas más importantes. Un entramado familiar que no solamente se limita en ese ámbito personal sino que va más allá; poseen negocios en común con el expolítico del Partido Socialista como eje central de sus labores.
José Bono y Ana Rodríguez se divorciaron en 2010
En julio de 2020, el programa Lazos de sangre, de TVE, emitió uno de sus capítulos hablando de la dura infancia de Bono. El hombre, que creció en Albacete, pasó su infancia entre internados, marcada por la muerte de su madre cuando él estaba en la adolescencia. Fue en los años 70 cuando conoció a Ana Rodríguez Mosquera con quien pronto contrajo matrimonio. La primera hija de la pareja vino pronto y le pusieron el nombre de Amelia. Luego, se convirtieron en padres de José, Ana y, más tarde, adoptaron a Sofía, de origen chileno. Ninguno de los cuatro decidió seguir la carrera en política de sus padres, pero sí que se mantuvieron muy al lado de su familia.
José y Ana decidieron terminar con su matrimonio tras más de treinta años juntos. Fue en el año 2010 cuando firmaron su divorcio. En ese momento, no quisieron dar explicaciones de qué les había llevado a tomar esa decisión. Aún así, en el programa de la televisión pública, Rosa Villacastín dio algunos datos de por qué se habían separado. «Cuando deja el Ministerio de Defensa, le promete a Ana que dejará la política, pero no lo hace. Le ofrecen de nuevo el Congreso de los Diputados y él lo acepta, así que creo que es una de las razones por las que el matrimonio se rompió en 2010», confesó la periodista.
Aún así, a pesar de tomar caminos por separado, su relación con sus hijos no se recrudeció. Aunque eso sí, los comienzos no fueron fáciles. Una vez tomada la decisión de separarse, Ana publicó un libro, con tintes autobiográficos, llamado El club de las perfectas divorciadas. En el mismo, parecía que contaba un poco de su historia, algo que no gustó ni al propio exministro ni a su familia. «Mi hermana pequeña tenía 12 años entonces y sí que lo pasó mal», contó José Jr.
Amelia, la hija más conocida, comienza una nueva aventura en las redes sociales
Probablemente la más conocida es Amelia, quien tiene un perfil público en redes sociales de más de medio millón de seguidores. Es más, es ella quien nos muestra un poco cómo son esas rutinas familiares y esos momentos más distendidos junto a su padre, que se ha llegado a hacer viral. Además, su popularidad creció como la espuma cuando se casó con Manuel Martos, hijo de Raphael, con quien contrajo matrimonio en la catedral de Toledo. Una espectacular boda a la que acudieron una infinidad de rostros conocidos; tanto del mundo de la televisión, como de la política y la música. Durante sus primeros años como casada, Amelia se unió, laboralmente, aún más a su madre.
Ambas comenzaron a trabajar juntas en la gestión de las distintas tiendas de la marca de joyería Tous que estaban repartidas por toda Castilla-La Mancha. Lo cierto es que, aunque con alma de empresaria, Amelia estudió Educación Infantil en la Universidad Complutense, aunque nunca llegó a ejercer. Sí que es verdad que, muchos de los conocimientos que aprendió durante su formación superior, pudo aplicarlos en casa, ya que es madre de cuatro pequeños. Ahora, y tras cerrar este capítulo de su vida junto a Manuel Martos, parece ser que Amelia está decidida a volcarse por completo en las redes sociales.
José tiene negocios con su padre, aunque está enfocado en la hípica
Tal y como confirmó Vanitatis, la influencer estaba segura de que podía sacarle mucho más partido a su perfil de Instagram y, por eso, desde hace unas semanas cuenta con el asesoramiento de una agencia de creadores de contenido. Es más, es la misma que utilizó en su momento María Pombo y que, ahora, lleva las gestiones de Victoria Federica. En esta nueva etapa en su vida, parece ser que Amelia quiere explorar nuevos caminos profesionales.
En el verano de 2023, el mismo medio también publicó que José Bono había empezado a contar con su hijo, José, para un nuevo reto empresarial. En todo este tiempo, habíamos conocido de su vida sentimental gracias a su relación con un joven de nombre Aitor Gómez, con quien llegó a comprometerse. La boda, que se iba a celebrar en junio de 2020, nunca llegó a producirse. Aún así, parece ser que entre ellos quedó muy buena relación, como ha mostrado en más de una ocasión su hermana Amelia. Como cuentan desde Vanitatis, José Bono padre, ya alejado de la política, ha volcado todos sus esfuerzos en esa faceta de empresario.
El político es administrador de dos sociedades. Una de ellas es Joasa 2012 SL, enfocada a la «asesoría técnica, económica, laboral, fiscal, financiera y de gestión a empresas y servicios administrativos y de intermediación con profesionales. La colaboración con radios, televisiones y prensa escrita. Y la adquisición, disposición, enajenación y gravamen y arrendamiento de inmuebles». Por tanto, se trata de una empresa que engloba una infinidad de funciones que se han visto aumentadas según las necesidades del expolítico. En La razón confirman que la empresa facturó, en 2022, más de 1,5 millones de euros.
Como comentan desde el medio, en general, los números de la empresa son positivos, aunque sí que es cierto que, en los últimos años, han sufrido considerables pérdidas. Es por eso que, a comienzos de 2023, José Bono decidió contar con la ayuda de su hijo, quien ostenta el cargo de apoderado. Cabe destacar que esta no es la primera vez que el vástago de Bono se pone al frente de un negocio, ya que ya lo hizo hace unos años cuando cogió las riendas de la hípica que abrieron cuando él era un mero aficionado. Ahora, este negocio se gestiona con éxito.
Ana tiene una empresa junto a su madre y trabaja en Iberdrola
También, desde el año 2013, está al frente de Attack 84 SL que se encarga, según la información que se alberga en el Registro Mercantil, a «explotar y gestionar fincas, la obtención y comercio de sus productos y a organizar eventos sociales, deportivos y de ocio». Como mencionan desde Vanitatis, durante un tiempo, también utilizó esta empresa para gestionar un negocio de bisutería con el que, por aquel entonces, era su prometido, Aitor. Desde 2020, a nombre de José Bono padre, también hay registrada otra empresa enfocada a la «promoción inmobiliaria».
Quien también está muy envuelta en todo lo que tiene que ver con los negocios es Ana. La tercera hija del matrimonio se unió junto a su madre para gestionar la empresa Ahorros Familiares Saja SL, dedicada, también, al mundo del ladrillo. Aunque eso sí, sus estudios han ido mucho más allá. Tal y como podemos comprobar en su perfil de LinkedIn, Ana estudió Derecho en la Universidad Carlos III de Madrid. Luego, hizo un Máster en Política Territorial y Urbanística por la misma entidad. Respecto a su carrera profesional, Ana asegura que ha trabajado como abogada en distintas empresas, de gran alcance, como Dragados.
Sofía, la pequeña y más desconocida
Desde hace más de ocho años trabaja en Iberdrola, donde ha ocupado distintos puestos. Así, ha llevado los Servicios Jurídicos y, ahora, ejerce como Secretaria del Consejo de Administración desde el pasado mes de diciembre. Es ella quien ha decidido llevar una vida más discreta y alejada de los focos, ya que son contadas las ocasiones en las que acude a eventos públicos. Sí que es cierto que es su hermana Amelia la única que da cuenta de todas sus reuniones familiares con la publicación de instantáneas. Siguiendo la estela de Ana, quien tampoco ha querido ser nunca noticia es la pequeña del clan, Sofía.
La joven ha estudiado Diseño de Interiores y Decoración en la Regent’s University de Londres y, en su vida en Madrid, se ha codeado con distintos personajes de la jet set. Es más, hace un tiempo ocupó las portadas de las revistas del corazón al protagonizar un corto idilio con uno de los mejores amigos de Victoria Federica y Froilán. Así, a su lista de conquistas se suman Borja Gómez de Mendoza y Jacobo Navas. Y, a pesar de las idas y venidas que ha vivido la familia, en estos últimos años, siguen mostrando que están más unidos que nunca.
