La llegada masiva a Ceuta en sólo dos días de unos 8.000 inmigrantes, entre ellos 1.500 menores, ha hecho que el Gobierno ponga «todos los medios necesarios» para devolver «por los cauces establecidos» a quienes han entrado irregularmente. Más de la mitad (5.600) ya han sido devueltos, aunque sin detallar qué protocolo se ha seguido.
Lo más destacado: las devoluciones se están produciendo de forma inmediata, según ha subrayado en el Congreso este miércoles el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y después de que este martes el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, afirmara que se están realizando conforme al acuerdo firmado con Marruecos en 1992.
Aunque no ha precisado claramente cuál es el protocolo que se está siguiendo en cada momento, el ministro ha negado que se estén devolviendo a menores de edad a Marruecos porque, ha afirmado, los niños tienen un «estatus especial» y se tiene en cuenta el interés superior del menor. Sin embargo, varias ONG han puesto en duda estas afirmaciones, ya que entienden que no se está llevando a cabo un proceso con «suficientes garantías», especialmente en la identificación de la edad de posibles menores.
En el caso de Ceuta y Melilla, la ley de Extranjería cuenta con una disposición adicional de la ley de Seguridad Ciudadana -conocida como ley mordaza- que regula las devoluciones en caliente de inmigrantes, avaladas por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) y, posteriormente, por el Tribunal Constitucional. La norma fija que «los extranjeros que sean detectados en la línea fronteriza de la demarcación territorial de Ceuta o Melilla mientras intentan superar los elementos de contención fronterizos para cruzar irregularmente la frontera podrán ser rechazados a fin de impedir su entrada ilegal en España».
En todo caso, añade, el rechazo se realizará «respetando la normativa internacional de derechos humanos y de protección internacional de la que España es parte», lo que, según ha asegurado Francisco Solans, abogado experto en extranjería, no está ocurriendo en Ceuta. «Con las cifras que se están produciendo y dada la imposibilidad de prestar asistencia letrada a 2.700 personas en un sólo día, parece muy evidente que el Ministerio del Interior está aplicando el rechazo en frontera no bajo los requisitos impuestos por el Constitucional, sino de manera totalmente ilegal», ha sentenciado.
Todas las personas que sean devueltas en la frontera, ha añadido el letrado, tienen que pasar por una identificación y un expediente que permita el pleno control judicial. «Yo te he visto entrar, te doy media vuelta, te abro la puerta y te echo, es completamente ilegal», ha recalcado.
Las devoluciones que se están realizando en el paso fronterizo del Tarajal también están amparadas, según argumenta el Gobierno, en un acuerdo firmado con Marruecos en 1992 por el que el país vecino está obligado a readmitir a las personas expulsadas desde España que se pueda demostrar que proceden de territorio marroquí. Un convenio que «obliga» a Marruecos «pero que no exime de ninguna manera a España» de cumplir con los procedimientos internos y con los derechos de esas personas, que tienen que ser identificadas y tienen derecho a asistencia letrada. «Es muy complicado lo que está pasando pero la ley es la ley y tienen que cumplirla», ha aseverado el experto.
No en todos los casos se puede realizar un proceso de devolución. Eso es lo que ocurre, por ejemplo, con las mujeres embarazadas, con los solicitantes de asilo o de protección internacional, con las víctimas de trata, con los menores o con los niños que viajan solos. «Los menores no pueden ser devueltos ni en caliente ni en ningún otro modo en tanto no se localice a sus padres o tutores legales en sus ciudades», ha señalado el abogado Felipe Garoña. En estos supuestos, la tutela la asumen los servicios competentes en materia de protección de menores de la ciudad autónoma de Ceuta.
Si no se puede determinar la minoría de edad por falta de documentación, tienen que practicarse las pruebas médicas necesarias para establecer su edad. Unos estudios que, según ha asegurado Marlaska, comenzarán a hacerse «en los próximos días», cuando la situación esté normalizada.
En las últimas horas se ha incrementado el retorno voluntario de inmigrantes marroquíes que han entrado en Ceuta hasta el punto de que en el mediodía de este miércoles se ha registrado el regreso de dos centenares de personas que entraron a la ciudad. Fuentes policiales han confirmado que muchos de los inmigrantes mayores de edad que accedieron a través del espigón del Tarajal se están presentando en la frontera para regresar a Marruecos.
Estos inmigrantes han explicado que en las últimas horas han estado deambulando por la ciudad sin un destino fijo y que la mayoría han tenido que pasar la noche durmiendo en parques, jardines o en los montes de la ciudad. Han optado por el retorno voluntario, teniendo en cuenta su situación de ilegalidad en la ciudad y la falta de medios para poder subsistir.
Una información de EFE.