El PSOE abre la puerta a transferir el MIR a Cataluña y País Vasco tras su 'sí' al BNG
La comunidad médica muestra su rechazo: «Supondría dinamitar un modelo de éxito con nefastas consecuencias»
Se atisban cambios sustanciales en el paradigma del MIR. A raíz del acuerdo de investidura alcanzado entre el PSOE y el BNG, donde se abre la posibilidad de renegociar la transferencia de la gestión del MIR a Galicia, todo apunta a que ocurrirá lo mismo en Cataluña y País Vasco, donde ERC y EH Bildu han luchado históricamente por arrebatar esta competencia al Ministerio de Sanidad.
El pasado febrero, Carolina Darias, por entonces al timón de Sanidad, mantenía una posición «firme» sobre el modelo actual de competencias estatales. «La Formación Sanitaria Especializada tiene su razón de ser en todo el territorio nacional», decía después de que EH Bildu anunciase su intención de trasladar esta reivindicación con una proposición en el Congreso de los Diputados.
Pero ahora todo ha cambiado. El acuerdo del PSOE con los diferentes grupos nacionalistas para alzar de nuevo a Pedro Sánchez como presidente del Gobierno también pasa por una posible transferencia competencial del sistema MIR, EIR y PIR a las comunidades autónomas. El pasado lunes 6 de noviembre el PSOE firmaba un acuerdo con el BNG formado por 22 puntos que recogen, entre otras cuestiones, «la activación de la totalidad de las competencias recogidas en el Estatuto de Autonomía de Galicia» así como las competencias que se hayan expuesto a consenso en el parlamento de la comunidad.
Petición histórica
En este sentido, el BNG, en declaraciones a Redacción Médica, ha señalado que aunque «esta cuestión no está recogida en el Estatuto de Autonomía, reclamamos la transferencia de la gestión del MIR y del resto de Formación Sanitaria Especializada (FSE)». De esta forma, este acuerdo de investidura alcanzado entre PSOE y el partido nacionalista gallego abre la posibilidad de renegociar la transferencia de la gestión del MIR a Galicia si así lo aprueba por unanimidad el Parlamento gallego.
De forma más explícita ha quedado esta posible transferencia en el acuerdo entre PSOE y Junts para investir a Pedro Sánchez. En el pacto, el PSOE asegura que defenderá «el amplio desarrollo, a través de los mecanismos jurídicos oportunos, del Estatut de 2006». En su artículo 162.3.d), el Estatut de Autonomía de Cataluña señala que «corresponde a la Generalitat, en todo caso, la competencia compartida en el ámbito de la formación sanitaria especializada, que incluye la acreditación y evaluación de centros, la planificación de la oferta de plazas; la participación en la elaboración de las convocatorias y la gestión de los programas de formación de las especialidades y las áreas de capacitación específica y la expedición de diplomas de áreas de capacitación específica».
El traspaso también es una de las reivindicaciones de ERC. Pere Aragonés ya incluyó este tema en la Comisión Bilateral de agosto de 2021, aunque finalmente nunca llegó a plasmarse. Tras el ‘no’ rotundo de Carolina Darias en febrero de 2023 este tema quedó en punto muerto. Sin embargo, ahora, tras estos acuerdos, el camino se allana para aquellas comunidades que reclaman la gestión del MIR, EIR y PIR.
Rechazo de la comunidad médica
Diferentes colectivos, sindicatos y asociaciones médicas han mostrado su «absoluto rechazo» a esta posible transferencia competencial del sistema MIR a las comunidades autónomas. Desde Amyts, Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid, apuntan a THE OBJECTIVE que se trata de «una idea muy mala para la calidad del SNS y para los aspirantes».
«Oímos continuamente a políticos tanto a nivel central como autonómico quejarse de que no hay suficientes médicos que acepten las condiciones de ejercicio que ofertan y ahora estamos ante una posibilidad de la fragmentación por motivos partidistas, no técnicos, de lo poco que le quedaba de común al SNS», explica su secretaria general, Ángela Hernández, que agrega que «la carrera de Medicina y el MIR necesitan reformas, no que lo centrifuguen por intereses ajenos al SNS».
Una opinión respaldada por Vicente Matas, coordinador del Centro de Estudios del Sindicato Médico de Granada, que en declaraciones a este medio muestra su ‘no’ rotundo a «trocear el MIR». «Es un grave error, el MIR ahora funciona a nivel nacional permitiendo igualdad de oportunidades y seleccionando a los mejores, independientemente del lugar de origen. Transferirlo a las comunidades autónomas no aporta ninguna mejora y traerá muchos problemas».
«Dinamitar un modelo de éxito»
Desde la Facme, Federación de Asociaciones Científico Médicas Españolas, también han manifestado su oposición como adelantó este medio. En su opinión, esta transferencia competencial «pondría fin a un modelo de éxito que lleva instaurado más de 40 años […] y que permite el acceso a la Formación Sanitaria Especializada «en condiciones de igualdad para todos los aspirantes».
«La posible transferencia competencial a las comunidades autónomas traería consigo desigualdades en la formación y una falta de cohesión en los estándares de calidad a lo largo del país. Además, esta descentralización podría debilitar la movilidad de profesionales sanitarios y dificultar la homologación de títulos», explican en un comunicado.
Desde la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) se han pronunciado «rotundamente» contra el traspaso MIR en varias ocasiones. «Romper el modelo actual, que es único para todos y de éxito tanto en España como fuera de España, es un gesto innecesario», manifestaban en 2020. En 2021 volvía a hacer lo mismo recalcando que un posible traspaso o fragmentación «supondría dinamitar un modelo de éxito con nefastas consecuencias tanto para los especialistas en formación como para los centros docentes, y por extensión para todo el sistema sanitario, lo que terminaría afectando también a los pacientes, destinatarios últimos del mismo».