¿Duermes de lado o boca abajo? Un estudio revela qué significa tu forma de dormir
El director del Servicio de Asesoramiento y Evaluación del Sueño ha analizado seis posiciones con el objetivo de descubrir qué dice de nuestra personalidad
Un hombre durmiendo. | Unsplash.
El sueño es «un proceso fisiológico de vital importancia para la salud integral de los seres humanos, para la supervivencia del individuo y para el correcto funcionamiento del sistema nervioso», determina el Dr. Hernando Pérez Díaz, Coordinador
del Grupo de Estudio de Trastornos de la Vigilia y Sueño de la Sociedad Española de Neurología. El dormir bien es un placer, un descanso. Pero es curioso saber que, incluso durmiendo, no dejamos de ser nosotros mismos.
Un estudio de Chris Idzikowski, director del Servicio de Asesoramiento y Evaluación del Sueño del Reino Unido, ha analizado seis posiciones comunes para dormir con el objetivo de descubrir que cada una está relacionada con un tipo de personalidad particular.
Además, la calidad del sueño va unida a nuestro humor y funcionalidad durante el día. «Si no conseguimos dormir bien se reduce la calidad de vida, aumenta el riesgo de hipertensión y, por tanto, de sufrir un accidente cerebrovascular, y se pueden agravar otras enfermedades que parezcamos. Pero además nuestras funciones cognitivas se ven afectadas: baja la concentración y la capacidad de atención, el tiempo de reacción aumenta, se pueden producir fallos de memoria, cambios bruscos de humor y alteraciones en el proceso de toma de decisiones, problemas de aprendizaje, etc. Por lo tanto, tener una buena calidad de sueño es fundamental», señala el Dr. Hernando Pérez.
Veamos las seis diferentes posturas más comunes y lo que reflejan sobre nosotros:
- El feto. «Aquellos que se acurrucan en posición fetal son descritos como duros por fuera pero sensibles de corazón. Pueden ser tímidos cuando conocen a alguien por primera vez, pero pronto se relajan», explican los investigadores. Si esta es la tuya, estás en el grupo de la posición más común para dormir, adoptada por el 41% de las 1.000 personas que participaron en la encuesta. Más del doble de mujeres que de hombres tienden a adoptar esta posición.
- El registrador. Aquel que se acuesta de lado con ambos brazos hacia abajo muy cerca de su cuerpo. «Estos durmientes son personas tranquilas y sociales a las que les gusta ser parte de la multitud y que confían en los extraños. Sin embargo, pueden ser crédulos», señalan.
- El anhelante. Las personas que duermen de lado con ambos brazos extendidos al frente y la espalda algo curvada «tienen una naturaleza abierta, pero pueden ser sospechosas, cínicas». «Son lentos para decidirse, pero una vez que han tomado una decisión, es poco probable que la cambien», describen.
- El soldado. Básicamente aquellos que duermen boca arriba con los brazos estirados para abajo en los costados. «Las personas que duermen en esta posición son generalmente tranquilas y reservadas. No les gusta el alboroto, pero se imponen a sí mismos y a los demás altos estándares».
- La caída libre. Acostado boca abajo con las manos alrededor de la almohada y la cabeza girada hacia un lado. Suelen ser personas gregarias y temerarias, pero pueden ser nerviosas y de piel fina en el fondo, y no les gustan las críticas ni las situaciones extremas.
- La estrella de mar. Una variante del dormir boca arriba. Son los que se acuestan en esa posición pero con los brazos en alto, rodeando la almohada incluso. «Estos durmientes son buenos amigos porque siempre están listos para escuchar a los demás y ofrecen ayuda cuando es necesario. Por lo general, no les gusta ser el centro de atención», explican.
La salud de cada postura al dormir
Pasamos horas durmiendo, por lo que la postura puede influir en nuestra salud. Idzikowski llegó a la conclusión de que la posición de caída libre era «buena para la digestión, mientras que las posiciones de estrella de mar y soldado tenían más probabilidades de provocar ronquidos y desembocar en una mala noche de sueño».
El profesor Idzikowski dijo: «Acostarse boca abajo hace que el contenido del estómago pueda volver a la boca más fácilmente, mientras que aquellos que se acuestan boca arriba pueden terminar roncando y respirando peor durante la noche». Esta última puede que no despierte a la persona, pero podría causar una noche de sueño menos reparador.
Si cambias de postura cada noche, eres una rara especie. La investigación encontró que es poco probable que las personas cambien su posición para dormir. Solo el 5% dijo que duerme en una posición diferente cada noche.
