Una experta de Harvard indica cuál es la vitamina que más protege el cerebro
Este tipo de micronutrientes son indispensables para el correcto funcionamiento y desarrollo de las células y, por tanto, del organismo
Las vitaminas son un grupo de diferentes sustancias muy importantes para el correcto funcionamiento celular, el crecimiento y el desarrollo normales. A día de hoy, el total de vitaminas esenciales son 13. De todas ellas, es importante priorizar las que pertenecen al grupo B, ya que son las que ayudan a frenar o ralentizar el deterioro cognitivo. Así lo ha asegurado la escritora de This is your brain in food, Uma Naidoo, en una entrevista para la BBC.
Estas sustancias son necesarias para que las células puedan funcionar, crecer y desarrollarse de forma normal. Es más, la doctora destaca que la ausencia de vitaminas está relacionada con la aparición de ciertas enfermedades. Un ejemplo es el escorbuto, que provoca la falta de vitamina C, o el raquitismo, que lo provoca la deficiencia de la vitamina D.
Las vitaminas y las enfermedades crónicas
Debido a todo lo que aportan, las vitaminas pueden ayudar también a prevenir algunas enfermedades crónicas. «Naturalmente, estas se encuentran en los alimentos, por lo que se recomienda que las personas sepan lo que es bueno llevarse a la boca todos los días», ha explicado la autora.
En el caso concreto de la vitamina B, es importante saber que no hay solo una, sino ocho tipos diferentes: cobalamina, ácido fólico, piridoxina, ácido pantoténico, niacina, riboflavina, tiamina y biotina. Es cierto que, para quienes tengan déficit de estas, pueden obtenerlas a través de suplementos nutricionales. Sin embargo, también es importante señalar que su consumo a través de alimentos está relacionado con un riesgo de muerte menor.
Los alimentos pueden ser menos saludables al mezclarlos
Las vitaminas B están presentes de forma natural en los cereales, la carne, las verduras y los productos lácteos. No obstante, son solubles en agua; esto implica que el organismo no puede almacenarlas en gran cantidad, por lo que necesita un aporte constante de estas.
Además, la doctora ha advertido que «cuando se trata de vitaminas, creer que comer o beber algo extra te ayudará más, suele ser un mito». Es más, esta práctica puede incluso llegar a provocar efectos secundarios. Además, ha indicado también que los alimentos pueden ser saludables por separado, pero no tiene por qué ser igual al unirlos.
Dónde encontrar la vitamina B
Un ejemplo de alimentos que son beneficiosos al tomarlos por separados son el yogur y los arándanos. No obstante, los yogures de arándanos y de otras frutas suelen llevar un exceso de azúcar, por lo que son más perjudiciales para la salud. Uno de los alimentos que más destacan por su contenido de vitaminas del grupo B son los huevos, que contienen una buena cantidad de esta tanto en la yema como en la clara.
Otro alimento importante para conseguir estas vitaminas es la carne de ternera. Es rica en vitamina B3, pero también cuenta con B1, B2, B6 y B12. En general, una dieta saludable debe contar con suficientes vitaminas B, ya que sus propiedades ayudan a mantener tanto el cuerpo como la mente en buena forma.
La importancia de la vitamina D
La vitamina D es otra de las más importantes, ya que ayuda al cuerpo a absorber el calcio. Por ello, incluir estos micronutrientes en la dieta es importante: pueden ayudar a mantener la salud ósea y a reducir el riesgo de desarrollar enfermedades. Aunque la exposición al sol es una de las principales formas de conseguir esta vitamina, también es posible adquirirla a través de suplementos. En este último caso lo recomendable es estar asesorado por un profesional.
Además, hay una serie de alimentos que ayudan a obtenerla:
- Los pescados grasos, como la trucha, el salmón, el atún y la caballa, así como los aceites de hígado de pescado.
- El hígado de ganado vacuno, la yema de huevo y el queso.
- Los hongos.