Arranca el juicio por el asesinato de un hombre en una compra de drogas en Pinoso (Murcia)
El cuerpo de la víctima, que tenía 35 años, no fue encontrado hasta noviembre de 2020
La Audiencia Provincial de Murcia se convierte este lunes en el escenario de un juicio de gran envergadura, donde seis individuos se enfrentan a serias acusaciones por su relación con el asesinato de un hombre en Cartagena en 2019. El suceso, que tuvo lugar durante una transacción de drogas, terminó con la vida de la víctima, quien fue engañada con el objetivo de robarle 34.000 euros.
El fiscal ha imputado a tres de los acusados por un delito de asesinato y robo con violencia. Los otros tres enfrentan cargos por encubrimiento. Según la acusación, uno de ellos había establecido una relación comercial con la víctima desde principios de 2019, facilitando la compraventa de sustancias estupefacientes en Pinoso, Alicante.
La relación de confianza entre la víctima y el acusado se fortaleció a lo largo del año, con la víctima visitando en múltiples ocasiones el domicilio del acusado para adquirir cocaína. Sin embargo, el 20 de junio de 2019, esta confianza se rompió trágicamente cuando, bajo la promesa de una nueva transacción, la víctima fue emboscada en su domicilio.
Transacción fatal
En un acto premeditado, los tres principales acusados planearon acabar con la vida del hombre para apropiarse del dinero que llevaba. Al llegar, fue inmediatamente atacado y estrangulado por dos de los acusados, mientras el tercero se encargaba de sustraer el dinero. Posteriormente, los acusados envolvieron el cuerpo y lo trasladaron a una finca en las afueras de Pinoso.
El cadáver fue ocultado inicialmente en una piscina vacía y más tarde enterrado en la Sierra del Carche, en Yecla. Dos de los involucrados, conscientes de los delitos, participaron en ocultar el vehículo de la víctima, un Audi, el cual fue desmantelado y ocultado para evitar su descubrimiento.
Un sexto acusado, también está implicado en el encubrimiento, habiendo realizado acciones para evitar la detección de los crímenes por parte de la policía. El cuerpo de José Alonso Marín Fernández, que tenía 35 años al momento de su muerte, no fue encontrado hasta noviembre de 2020.
Por estos actos, el ministerio fiscal solicita penas severas. Para los acusados de asesinato y robo, se piden 30 años de cárcel para cada uno, sumando un total de 90 años. Los acusados de encubrimiento podrían enfrentar hasta tres años de prisión cada uno. Además, se exige una compensación económica significativa para la familia del fallecido, incluyendo 50.000 euros para la hermana y 150.000 euros para la madre por daños morales, además de la restitución de los 34.000 euros robados.