La policía turca dispara balas de goma para dispersar la marcha del Orgullo LGTB
La policía turca ha disparado este domingo balas de goma para impedir la realización de la marcha del Orgullo LGTB, que había sido prohibida por las autoridades aduciendo cuestiones de seguridad. Las fuerzas policiales han disparado contra unos 40 manifestantes en las inmediaciones de la plaza Taksim, en Estambul.
La policía turca ha disparado este domingo balas de goma para impedir la realización de la marcha del Orgullo LGTB[contexto id=»383891″], que había sido prohibida por las autoridades aduciendo cuestiones de seguridad. Las fuerzas policiales han disparado contra unos 40 manifestantes en las inmediaciones de la plaza Taksim, en Estambul. Además de balas de goma, también han disparado agua a presión contra los activistas.
Dictator Erdoğan forbids Gay Pride celebrations in Turkey and lets loose his police to repress thempic.twitter.com/zbovXAOVfT
— Alfons López Tena (@alfonslopeztena) 25 de junio de 2017
Pequeños grupos de manifestantes se congregaron en la plaza, pero los agentes de policía eran más numerosos que los activistas, aseguraron testigos. Las fuerzas de seguridad han detenido al menos a cuatro personas. Es el tercer año consecutivo que las autoridades prohíben el desfile.
Sus organizadores denunciaron el veto oficial. «No estamos asustados, estamos aquí, no cambiaremos», ha defendido este domingo el comité encargado de organizar la marcha en un comunicado. «Vosotros estáis asustados, vosotros cambiaréis y os acostumbraréis a ello (…) Estamos aquí una vez más para mostrar que lucharemos de una manera determinada por nuestro orgullo», ha añadido.
En 2014, el desfile del Orgullo en Estambul atrajo a decenas de miles de personas, siendo uno de los mayores eventos LGTB (lesbianas, gais, transexuales y bisexuales) de Oriente Medio.
En 2016, la manifestación se prohibió alegando motivos de seguridad, ya que el país acababa de sufrir varios atentados atribuidos al grupo yihadista Estado Islámico y a los separatistas kurdos. La policía utilizó entonces gases lacrimógenos y balas de goma para dispersar a los manifestantes que no respetaron la prohibición.
Este año, el desfile coincide con el Eid al Fitr, el día que señala el final del Ramadán, el mes de ayuno sagrado musulmán. Antes de que el ayuntamiento de Estambul prohibiera el acto, varios grupos conservadores y de extrema derecha habían lanzado amenazas contra los organizadores.
Algunos ciudadanos críticos acusan al presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, de haber llevado a cabo un proceso de islamización del país desde su llegada al poder en 2003. Sus comentarios conservadores sobre el sexo y la familia han enfurecido a los activistas, aunque siempre ha evitado hablar en público de cuestiones relacionadas con el colectivo LGTB[contexto id=»383891″], informa AFP.
