Sri Lanka reduce en un centenar el balance de muertos por los atentados
El saldo final es de 253 muertos, después de que algunos cuerpos de víctimas mutiladas fueran contadas varias veces
Las autoridades de Sri Lanka han reducido este jueves en más de un centenar el balance de víctimas fatales de los ataques del domingo de Pascua, y han anunciado que el saldo es de 253 muertos y no de 359 como se había informado anteriormente, debido a que algunos cuerpos de víctimas mutiladas habían sido contados varias veces.
El Ministerio de Salud ha informado que al concluir las autopsias, como «varias de las víctimas estaban muy mutiladas» se produjo en algunos casos por error «un doble recuento».
Las iglesias católicas del país permanecerán cerradas hasta que mejore la situación de seguridad tras los atentados, cuya «responsabilidad» asumió este jueves el máximo dirigente del ministerio de Defensa, Hemasiri Fernando, al presentar su dimisión al presidente Maithripala Sirisena, que es también ministro de Defensa, informa AFP.
Esta dimisión se produce después de que el Estado de Sri Lanka reconociera esta semana «fallos» en su misión de garantizar la seguridad nacional, al haber estado en posesión de informaciones previas sobre el riesgo de atentados suicidas.
La serie de ataques ocurridos el domingo casi simultáneamente en tres hoteles de lujo y tres iglesias en Colombo y otras ciudades del país, fueron cometidos por al menos nueve suicidas cargados de potentes explosivos, la mayoría de ellos personas «bien formadas» pertenecientes a la clase media-alta. Horas después, una séptima detonación tuvo lugar en un pequeño hotel situado a una decena de kilómetros al sur de la capital, y la última en un complejo residencial, también en Colombo, informa Efe.
El Gobierno de Sri Lanka vinculó el ataque, reivindicado por el Estado Islámico (EI) con el poco conocido grupo terrorista local de tintes islamistas National Thowheeth Jamath (NTJ), aunque advirtió sobre posibles vínculos extranjeros.
En Sri Lanka la población cristiana representa el 7,4%, mientras que los budistas son el 70,2%, los hinduistas el 12,6% y los musulmanes el 9,7%, según datos del censo de 2011. Sin embargo, atentados de esta magnitud no habían tenido lugar en Sri Lanka desde la guerra civil entre la guerrilla tamil y el Gobierno, un conflicto que duró 26 años y finalizó en 2009, y que dejó, según datos de la ONU, más de 40.000 civiles muertos