El videojuego 'A Plague Tale: Requiem' es una maravilla de cuento
En esta nueva entrega que nos sitúa seis meses después del primer juego, continúa la búsqueda de un remedio efectivo ante la extraña enfermedad que sufre Hugo
Una imagen promocional del juego. | Asobo Studio
Se agradece que de vez en cuando salgan títulos como A Plague Tale: Requiem. Porque demuestran que los videojuegos no solo son un método más de entretenimiento, sino que se acercan a un nuevo arte al que muchos todavía no han llegado. Esta maravilla en tercera persona repleta de acción, infiltración y puzzles, nos cuenta la aventura de Amicia, una jovencita de quince años, y de su hermano Hugo, de seis. Los dos pertenecen a una oscura y dura época de la baja edad media en donde las familias se están desestructurando debido a una de las plagas más letales de la humanidad, la peste negra. La trama nos sitúa en un sur de Francia que si no tenía bastante con sus batallas contra los bretones (la guerra de los Cien Años) y la inquisición, se veía azotada por una pandemia que causaría millones de muertes.
A Plague Tale: Requiem, es la segunda parte de las aventuras y desventuras de estos jóvenes hermanos ante el azote de dificultades de la época y la siniestra enfermedad que sufre el pequeño Hugo, la Prima Mácula, una enfermedad en la sangre que le mantuvo aislado en una habitación durante su más tierna infancia.
En esta nueva entrega que nos sitúa seis meses después del primer juego A Plague Tale: Innocence, continúa la búsqueda de un remedio efectivo ante la extraña enfermedad que sufre Hugo. Un mal que además de hacer que pierda fuerzas y termine desmayado, le confiere al pequeño el poder de manejar gigantescos enjambres de ratas como venganza ante el duro mundo que le ha tocado vivir. Por eso, Amicia, Hugo, Beatrice -la madre- y Lucas, un chavalín huérfano que la familia acogió, huyen de las zonas más afectadas por la peste y las guerras hacia el sur, en busca de ayuda para conseguir un remedio efectivo para la Prima Mácula.
Nada más empezar a jugar, nos topamos con un escenario campestre de una exquisitez absoluta en donde los protagonistas juegan al escondite. Poco a poco iremos aprendiendo el manejo de los personajes casi sin darnos cuenta. El joystick para movernos, el gatillo para correr, el botón adecuado para ejecutar acciones como situarnos tras el que la liga para demostrarle que le hemos descubierto o el botón necesario para que nos podamos agachar y no nos descubran. Así, poco a poco, vamos avanzando en la aventura alternando cinemáticas magistralmente insertadas que convierten el juego en una trama digna de la gran pantalla: todo está medido hasta el más mínimo detalle.
Vamos pasando de una escena a otra con la jugabilidad justa como para no echar en falta ese universo abierto tan de moda últimamente. No notamos la linealidad de los trayectos que debemos recorrer porque siempre tendremos un pequeño margen de espacio. Y la verdad es que la historia es tan absorbente, que los momentos para observar y deambular ya nos vienen dados en el desarrollo. Vamos aprendiendo sobre la marcha, en el momento justo. Aprendemos a usar nuestra arma que no es otro que una honda, mientras jugamos con Hugo a derribar piñas que flotan en el río. A agacharnos para entrar en un escondrijo pulsando un botón, en el momento en que estamos en peligro. Poco a poco aumentamos las capacidades de los protagonistas de forma lógica y fluida.
En A Plague Tale: Requiem, Amicia no solo dispondrá de la honda para defenderse de soldados de la Santa Inquisición o de los aldeanos reticentes a tener en sus territorios un personaje tan misterioso como Hugo, capaz de manejar hordas de ratas. También podrá usar cuchillos y una ballesta. Es importante la gestión del armamento, porque mientras la honda que lanza piedras tiene una durabilidad infinita, el cuchillo por ejemplo solo lo podremos usar una vez contra un enemigo. Le eliminaremos rápidamente, pero deberemos encontrar otro para disponer del arma.
Nuevas habilidades a desarrollar
Amicia también dispone de un pequeño árbol de mejoras que se va desarrollando a medida que ésta maneja de una u otra manera la acción en la aventura. Disponemos de tres características para las mejoras. Por un lado está el sigilo, fundamental cuando nos sentimos amenazados. Ya sabemos cómo agacharnos, ahora podemos hacerlo entre las ramas para no ser descubiertos y tirar piedras o jarrones que encontramos en el camino para distraer al enemigo y escabullirnos a sus espaldas.
Por otro lado, el combate y agresividad serán necesarios en momentos en los que nos sorprenda el enemigo cara a cara y tengamos que enfrentarnos respondiendo con golpes, usando el cuchillo si disponemos de él o estrangulándole con las cuerdas de la honda. Y por último, está el oportunismo, gracias al cual iremos mejorando nuestra capacidad de alquimia y combinación de objetos encontrados para convertirlos en otros nuevos. Por ejemplo, encontrar azufre, alcohol y jarrones para fabricar proyectiles incendiarios que nos vendrán muy bien no solo contra enemigos humanos, sino contra las numerosas hordas de ratas que vamos a encontrar a lo largo de la aventura y que se mantendrán alejadas del fuego para así dejarnos el camino libre.
A Plague Tale: Requiem nos ofrece unos escenarios y un tratamiento de la luz, las sombras y el humo, dignos de una superproducción. La llegada a la ciudad roja es una sorpresa visual increíble para ir abriendo boca. Los lugares arruinados por la peste, con cadáveres amontonados por el suelo, rodeados de moscas, y la reacción de los protagonistas ante el tenebroso espectáculo casi nos hacen oler ese hedor nauseabundo. Pero sobre todas las increíbles cosas que iremos descubriendo en el juego, se alzan el amor y el deseo de protección que siente Amicia en su hermano pequeño, la fragilidad de este y el deseo indescriptible de conseguir llegar cuanto antes a ese lugar, a esa isla en donde encontremos el remedio definitivo contra la enfermedad del pequeño Hugo.
Lo sorprendente del título no solo es su redondez y acabado. Sino la conjugación de estos con una jugabilidad y un guion que nos atrapa desde el principio como cualquier buena novela de aventuras. Asobo Studio es la desarrolladora independiente afincada en Burdeos responsable del juego. Han situado esta producción en los primeros puestos de la industria peleando con títulos AAA que cuentan con mayor presupuesto. Ya en su primera parte, A Plague Tale: Innocence, obtuvo una nominación en los Game Awards de 2019 a la mejor narrativa, y un premio Bafta en 2020 al mejor desarrollo tecnológico.
‘A Plague Tale: Requiem’ , está disponible para Xbox series y Gamepass, PlayStation5, PC y la nube de Nintendo Switch
