Aerotermia: así funciona la nueva técnica de calefacción que más ahorra
Una tecnología que utiliza bombas de calor de última generación pensadas para aportar refrigeración en verano y calefacción en invierno
Aerotermia. | Europa Press.
Llegó el invierno a España y una de las preocupaciones de los ciudadanos fue pagar la calefacción. El 32 % de los españoles admitió, según un estudio publicado este jueves por el Banco Europeo de Inversiones (BEI), que no podían permitirse económicamente calentar sus hogares.
El informe también revelaba que entre el resto de encuestados que sí pueden permitirse calentar sus casas, solo un 16% de ellos aceptaría el tope máximo de 19 grados de la calefacción que el Gobierno requiere a edificios públicos, transportes, empresas y tiendas, a fin de fomentar el ahorro energético durante el invierno.
Es por eso que muchos buscan alternativas económicas ante el frío. Una de ellas es la aerotermia, una tecnología que utiliza bombas de calor de última generación pensadas para aportar refrigeración en verano, calefacción en invierno y agua caliente dependiendo del momento del año.
El sistema extrae energía ambiental contenida en la temperatura del aire y la recircula a la habitación. Es mediante el ciclo termodinámico que utiliza un gas refrigerante comprimido a bajísimas temperaturas para extraer calor del aire exterior.
Estas instalaciones están impulsadas por el Plan de Recuperación para Europa Next Generation EU y el Plan de Transformación de España y la mitad de los ciudadanos encuestados (el 50%) por el BEI prefiere que el Gobierno se centre en impulsar la expansión de las renovables. El tratado del clima de París de 2016, adoptado por más de 170 países, afirmó que la aerotermia se seguiría imponiendo como sistema de calefacción y será una de las claves en la descarbonización del planeta.
Entre sus beneficios se encuentran que:
- Consume menos energía (kWh) que los sistemas de calefacción tradicionales lo que se refleja en la factura.
- Según el Código Técnico de la Edificación, es una energía renovable.
- Es sostenible, según lo clasifica la Unión Europea.
- No tiene prácticamente coste de mantenimiento ya que se podría considerar un electrodoméstico más.
- Es más segura.
- Funciona con electricidad, no necesita gas ni otro combustible.
- La instalación de su tecnología es sencilla.
- Se le puede dar salida en radiadores tradicionales suelos radiantes, bombas de calor, entre otras.
«La aerotermia bombea calor, que es energía de transición gratuita, ya que aunque haya 7 grados bajo cero en el exterior, el aire tiene energía suficiente para cambiar el estado del gas refrigerante en el interior de la unidad que absorbe esta energía que transmitimos en forma calorífica desde el exterior al interior de nuestra vivienda. Y esto es renovable, sostenible y barato, gracias a una triple revolución tecnológica en climatización: revolución electrónica en control, mecánica de materiales y química de refrigerantes», contaba Carlos Gómez, director de Toshiba Aire, sobre sus beneficios.
¿Por qué se ahorra con la aerotermia?
Lo que se paga con la aerotermia es solo el consumo eléctrico ya que la energía que crea con el aire es gratuita. Comparado con el gas, el gasoil, fuel-oil, propano o pellets, tiene un bajo consumo energético y es la solución energética preferida para un gran número de edificios de oficinas, aeropuertos, cines y clínicas.
Saunier Duval estudió la capacidad de ahorro de la aerotermia teniendo como ejemplo una vivienda de 100 m2 situada en Madrid de 100 m2 y una temperatura media de 22 °C. Dio como resultado que el ahorro sería de un 41% respecto a una caldera de gas natural, un 61% respecto a una caldera de gasoil y un 77% respecto a una caldera eléctrica. Aunque instalarlo suponga un coste, se estima que permiten amortizarse entre los 5 y 12 años.
Puede que sea también un buen sistema para el hogar, pero no es recomendable para casas pequeñas porque cuando el consumo es bajo, se tarda más tiempo en recuperar la inversión. Además, cuanto más grande es la casa mejores ofertas hay para suelos radiantes (que suele ir entre 60 y 70 euros el m2 con instalación incluida).
