Los sueldos subieron un 2,2% en marzo, y más en el sector público que en el privado
Esta subida tuvo lugar al margen de las infructuosas negociaciones entre patronal y sindicatos y de la sombra del pacto de rentas inconcluso
Los sueldos subieron un 2,2% el pasado marzo respecto al mismo mes del año anterior, según un informe de CaixaBank Research al que ha tenido acceso THE OBJECTIVE. Justo ese mes la inflación anotó el récord del 9,8%, máximo de 37 años, aupada por el alza de precios que ya acumulaban las materias primas y que ha exacerbado la invasión rusa de Ucrania.
Esta subida de los sueldos tuvo lugar al margen de las infructuosas negociaciones entre patronal y sindicatos y de la sombra del pacto de rentas inconcluso con el que el Gobierno pretendía repartir los costes de la guerra entre los distintos agentes económicos. De este modo, los salarios anotan alzas similares a las experimentadas antes de la pandemia (2,1% interanual en promedio en 2028 y 1029).
Las nóminas de los asalariados del sector público subieron un 2,4% en el tercer mes del año, por debajo del avance que experimentaron antes de la pandemia (2,8% de promedio en 2018-2019). Así, los sueldos de los empleados en las Administraciones Públicas escalaron en marzo tres décimas más que los salarios del sector privado, que lo hicieron el 2,1%, situándose este incremento, no obstante, por encima de la media de los ejercicios 2018 y 2019, del 1,7%, según el informe Dinámicas Salariales en España.
Temor por los efectos de segunda ronda
Como adelantó THE OBJECTIVE, ya se están produciendo efectos de segunda ronda en la economía: es decir, que el alza de los precios energéticos y de materias primas ya se está comunicando al resto de rúbricas que conforman el Índice de Precios de Consumo (IPC). De ahí que la tasa subyacente -la inflación calculada eliminándose los elementos más volátiles, como energía y alimentos- lleve meses repuntando con fuerza y que marcase en abril el hito del 4,4%.
Como ya viene alertando el Banco de España, los efectos de segunda ronda pueden conducir a una espiral de salarios y precios que retroalimente las presiones inflacionistas. En este sentido se pronuncia el informe de CaixaBank, elaborado por Josep Mestres Domènech. Desde el Gobierno, la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, niega esa temida espiral salarios-precios y confía en que la inflación pierda fuste en la segunda mitad del ejercicio.
El servicio de estudios de CaixaBank ha elaborado un innovador indicador para calcular las alzas salariales a partir de la media de la variación interanual de la nómina mensual, calculada de forma anonimizada. Se trata de un índice interno de la entidad que corresponde a los ingresos salariales netos percibidos durante el mes.
Los trabajadores pierden poder adquisitivo
El estudio de Caixabank destaca que las nóminas de los trabajadores han experimentado desde el pasado verano una tendencia progresiva de mejora, con crecimientos que dejan atrás las contenciones sufridas durante la pandemia. Sin embargo, lo cierto es que tanto los asalariados del sector público como los del privado pierden poder adquisitivo frente a una inflación que apunta a una media anual del 7,5% en 2022, según el Banco de España, y del 6,5% según otros vaticinios más optimistas.
Por otra parte, destaca CaixaBank que hay un 45,3% de trabajadores cuyos sueldos subieron más del 3% el pasado marzo, y el 59,8% experimentaron subidas de sus ingresos salariales por encima del 0,5% respecto al mismo mes del año anterior.
El turismo, la hostelería y el comercio lideran las subidas
Por sectores productivos, las mayores subidas se anotaron en los servicios turísticos, comercio y hostelería (3,6% interanual) seguidos de los servicios no turísticos (2,4% interanual) y la industria (2,1%), siendo los que menos alzas arrojaron la construcción (0,8%) y la agricultura (0,7%). Estas subidas son la prueba -explica el informe de CaixaBank- de que se está recuperando el sector turístico tras las restricciones de la pandemia.
Las subidas salariales no tienen el mismo reflejo en todas las autonomías. Se observaron avances entre el 1,9% y el 2,4% en la mayoría de las regiones y en todas se produce mayor dinamismo salarial que durante la pandemia. Pero hay grandes brechas entre comunidades. Los mayores avances se dieron en Murcia, Cataluña y la Comunidad Valenciana y los menores en Asturias, Cantabria y Castilla-La Mancha.