España, Francia y Portugal sustituirán el MidCat por una conexión entre Barcelona y Marsella
Sánchez, Macron y Costa se han reunido antes del Consejo Europeo y concretarán el proyecto en nuevos encuentros los próximos 8 y 9 de diciembre
Reunión entre Sánchez, Macron y Costa. | Ludovic Marin (AFP)
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este jueves que España, Portugal y Francia han acordado establecer una nueva interconexión por tubería entre Barcelona y Marsella denominada ‘Corredor de Energía Verde‘ y dar así carpetazo al debate sobre la construcción del MidCat.
«El acuerdo para un corredor de energía verde Barcelona-Marsella es una magnífica decisión que profundiza la solidaridad y compromiso con las renovables», ha subrayado Sánchez a su llegada al Consejo Europeo que se celebra este jueves en Bruselas, en el que los Veintisiete tratarán de superar las diferencias sobre nuevas medidas para intervenir el mercado energético y poner techo a los altos precios del gas.
También ha dicho que esta nueva tubería servirá para transportar gas, pero también hidrógeno verde en el futuro. El nuevo proyecto se concretará en encuentros los próximos 8 y 9 de diciembre bajo el marco de la cumbre de EuroMed de Alicante, en donde esperan concretar cuestiones como los «plazos para la inversión, el reparto de costes y el volumen de recursos económicos» necesarios.
Sánchez ha destacado que el entendimiento llega tras «muchos meses de trabajo» y que permitirá acelerar el proceso de interconexión de la Península ibérica con el conjunto de la Unión Europea, mediante un pacto «europeísta y solidario» y de «transición ecológica».
MidCat, enterrado desde 2018
El jefe del Ejecutivo se ha reunido antes de la cumbre con el presidente francés, Emmanuel Macron, y el primer ministro portugués, Antonio Costa. Fue Macron quien dijo el 7 de octubre, al término del consejo europeo informal en Praga, que se celebraría una reunión a tres para hablar del gasoducto en París. Sin embargo, dado que los tres líderes coincidirían en Bruselas se consideró que era mejor que se celebrara en la capital europea.
España y Portugal han defendido por activa y por pasiva terminar el gasoducto que uniría localidad catalana de Hostalric con la francesa de Barbaira. No obstante, se han encontrando con la negativa férrea del presidente francés. Macron viene diciendo que no hacían falta nuevas interconexiones de gas entre España y Francia porque las actuales están muy lejos de la saturación incluso bajo la actual coyuntura provocada por la invasión de Rusia a Ucrania.
En 2018, un informe elaborado para la Comisión Europea (CE) fue lo que paralizó la obra del Midcat al poner en duda su viabilidad económica por su alto coste, de unos 3.000 millones de euros. Poyry, la consultora contratada por Bruselas para supervisar la primera fase del proyecto, apuntaba que el gasoducto solo sería rentable bajo un escenario con un mercado ajustado de GNLante un hipotético descenso de la exportación de gas desde Argelia a Europa.
El MidCat, que tenía como promotores a Enagás y a la compañía francesa Teréga, lleva así años paralizado por su elevado coste y el bajo precio del suministro ruso. Faltan por construir 226 kilómetros de tuberías. En la actualidad, España cuenta con dos conexiones de gas por tubo con Francia a través del País Vasco y Navarra, que permiten entregar unos 8.000 millones de metros cúbicos (bcm) anuales, aproximadamente el 2% de la demanda europea del año pasado. El Midcat podría sumar otros 7.000 bcm al año.
A finales de septiembre, el Ejecutivo anunció que España aumentará la interconexión con Francia para asegurar el suministro de gas a través de Irún. En concreto, la instalación ha pasado las pruebas técnicas para ampliar en 1.500 millones de metros cúbicos adicionales de capacidad al año el suministro de gas natural a Europa. Se trata de un incremento de la capacidad de exportación del 18% sobre la actual, de modo que el Estado podría suministrar a Francia el equivalente al 6% de su consumo de gas natural.
El gasoducto de Euskadour une la planta de regasificación Bahía Bizkaia Gas (BBG), en Bilbao, y el almacenamiento de Gaviota, en Bermeo, con el almacenamiento subterráneo de Lussagnet en Francia. Tras las pruebas, Enagás prevé que este aumento de capacidad esté listo a partir del 1 de noviembre, coincidiendo con el inicio del invierno gasista. Si fuera necesario, se podría empezar a utilizar esta ampliación inmediatamente porque técnicamente ya está disponible.
Interconexión eléctrica
En la actualidad, el sistema eléctrico español está interconectado con el portugués -configurando así el sistema eléctrico ibérico-, con el del norte de África, a través de Marruecos, y con el sistema centroeuropeo, -a través de la frontera con Francia-. A su vez, este último está conectado con el de los países nórdicos, con el de los países del este de Europa y con las islas británicas, lo que conforma el mayor sistema eléctrico del mundo.
Además, se están desarrollando nuevos proyectos, como otro con Francia a través de un cable submarino por el Golfo de Vizcaya, la interconexión norte con Portugal entre Galicia y el Minho luso y los transpirenaicos Navarra-Landes y Aragón-Pirineos Atlánticos. El enlace España-Francia por el Golfo de Vizcaya es la primera interconexión eléctrica submarina con el país vecino. Según consta en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), esta nueva infraestructura permitirá aumentar la capacidad de interconexión con Francia desde los 2.800 MW actuales a los 5.000 MW, y tiene un coste estimado de 1.750 millones de euros.
