Las eléctricas se movilizan para que la CNMC no pague la nueva retribución de redes a la baja
En 2019 pidieron una retribución por encima del 6%, pero el regulador lo desestimó aprobando un pago de un 5,5%
La presidenta de la CNMC, Cani Fernández. | Europa Press
Las eléctricas se movilizan ya para negociar durante el año 2024 con la CNMC (Comisión Nacional del Mercado de la Competencia) la próxima retribución para las actividades de transporte y distribución de energía eléctrica. El 1 de enero del próximo año se cumplirán cuatro años de la puesta en marcha de la actual retribución, y aunque el periodo regulatorio llega a su fin el próximo 31 de diciembre de 2025, los nuevos parámetros deben estar listos ese mismo año, con el objetivo de que se apliquen en 2026.
Fuentes financieras aseguran a THE OBJECTIVE que «hay margen de tiempo, pero, aun así, el sector ya está pidiendo que se revisen las retribuciones del próximo periodo. Las razones son claras: los tipos de interés han subido mucho y la rentabilidad financiera que se había aprobado en el anterior periodo regulatorio se está quedando muy corta«. Esta la fijó la CNMC, a través de una circular a finales de 2019, en el 5,58%.
Sin embargo, los tipos de interés están hoy en el 3% y, además, la inflación de los costes afecta a todos los equipos que hay que introducir en la red. Una realidad que salpica de lleno a EDP, Endesa, Iberdrola, Naturgy y Viesgo, que realizan una serie de funciones técnicas relativas a las actividades de red, como son la planificación de redes, el desarrollo y la realización de obras y la explotación y el mantenimiento de instalaciones y equipos. Así, y por este capital invertido, reciben una retribución.
«Si la CNMC sigue aplicando su metodología para calcular la rentabilidad financiera, podría incluso salir una retribución incluso más baja del 5,58%, llegando a un 3% o un 4%«, señalan fuentes financieras. De hecho, existen ya hoy estudios internos que diagnostican que si se utiliza la metodología del regulador pueden salir retribuciones financieras por debajo del precio al que se prestan dinero los bancos.
El próximo año y parte del siguiente comenzarán las negociaciones entre las eléctricas y la CNMC. Se prevén que estas sean largas. Para ello, el regulador publicará una circular y abrirá un proceso de consulta pública para ir conociendo las posturas de los agentes. «Durarán meses. Las empresas aportarán informes técnicos justificando sus valoraciones para que la rentabilidad sea más alta frente a la que proponga el regulador».
Sin embargo, fuentes empresariales advierten: «Competencia luego hará lo que quiera, ya que en el periodo anterior las mismas eléctricas pedían una tasa de rentabilidad por encima del 6% y, al final, acabó siendo del 5,58%». Un escenario que las compañías no quieren repetir y, por ello, ya han comenzado con su movilización. La labor para fijar la retribución la comparte tanto la CNMC, que hace el cálculo, como el Ministerio de Transición Ecológica, que marca la guía de la política energética.
La clave está en la fórmula que se utiliza para calcular la nueva retribución. «No se puede proyectar este pago basándose en años donde los tipos de interés han estado en negativo. Igual, en lugar de coger como media los últimos diez años, la CNMC tiene que elegir la media de los últimos cinco años junto con los siguientes cinco y hacer así una análisis de prospección en lugar de uno más en retrospectiva para que salga un valor más ajustado a la realidad«, comentan fuentes del sector. Una discusión, esta última, que será vital en el devenir de las negociaciones entre eléctricas y regulador.
Por otro lado, la CNMC continúa analizando con detalle todas las retribuciones de redes concedidas a las distribuidoras en los pasados años. El objetivo para el regulador es claro: continuar con su estrategia de eficiencia. Un escenario que choca con el estado de las distribuidoras -sumidas por el aumento de los costes- y que no entienden la posición de Competencia. Esta situación ha empujado a estas a preparar una batalla jurídica contra el regulador por unas revisiones que consideran arbitrarias y cuyo desenlace, apuntan fuentes financieras, acabará en los tribunales.
Hace unos días, la CNMC aprobó las retribuciones de las actividades de regasificación, transporte y distribución y los peajes de acceso de gas para 2024. Estas se reducirán en 2024 en 99 millones de euros respecto a 2023 debido, según explican, a «la senda decreciente de la retribución de carácter transitorio» por el impacto de la amortización de activos para las actividades de transporte y regasificación, y a pesar del aumento del precio del gas de operación.
