Telefónica acelera para aumentar su cobertura móvil gracias a la fusión de Orange y MásMóvil
La operadora es la favorita para quedarse el espectro sobrante de la integración de la ‘joint venture’ que no se cede a Digi
Oficina de Telefónica en Madrid. | Agencias.
Telefónica es la operadora favorita para quedarse con parte del espectro sobrante de la fusión de Orange y MásMóvil que no se traspase a Digi, según ha podido confirmar THE OBJECTIVE con fuentes del sector conocedoras de estos movimientos. Esto supone que la compañía podrá aumentar la cobertura de su red de telefonía móvil en España y tendría mejores herramientas para desplegar su infraestructura de 5G.
Esta semana el Consejo de Ministros aprobó la joint venture de Orange y MásMóvil con lo que, además de la unión societaria de las dos compañías, comenzará oficialmente el ajuste de sus frecuencias para cumplir con los límites impuestos en la legislación. Un proceso que tiene un plazo máximo de cinco meses, aunque podrían producirse prórrogas.
La suma de Orange y MásMóvil supera los límites de frecuencias a utilizar por un mismo operador o grupo empresarial, los denominados spectrum caps, por lo que tendrán hasta agosto para revertir esta situación y definir el espectro sobrante que necesariamente debe salir al mercado. Un movimiento supervisado por el Ministerio de Transformación Digital que deberá autorizar cualquier traspaso de este bien público a otro operador.
Espectro para Digi
En este sentido, las fuentes consultadas por este diario indican que tras esta operación sobrarán 90 Mhz, de los que 60 Mhz deberán necesariamente ir a Digi, fruto de los acuerdos alcanzados entre las partes con la Comisión Europea para autorizar la fusión –para restablecer la competitividad en el mercado español– y que fueron ratificados por el Gobierno español sujeto a determinados compromisos de inversión.
El pacto de cesión de espectro –mayoritariamente el de Yoigo, que es el que más se solapa con la red de Orange– se acordó en 120 millones de euros, calculado en base a los pagos que los miembros de la joint venture ya han adelantado al Estado en concepto de uso de frecuencias. Las fuentes consultadas coinciden en señalar que estamos ante un precio muy por debajo del mercado, pero que los oferentes tuvieron que aceptar para facilitar el plácet definitivo de la integración.
Respecto de los otros 30 Mhz, Orange y MásMóvil empezarán un proceso de venta formal (para recuperar su inversión) atendiendo a motivos económicos, pero también a la sugerencia del ministerio de Escrivá, que prefiere que este espectro siga en el mercado, que no se desaproveche y así pueda seguir cobrando su alquiler.
Espectro para Telefónica
Es aquí donde el principal candidato es Telefónica. La compañía española tiene un porcentaje de espectro sin ocupar de más de 30 Mhz tras la última actualización del Gobierno, que en verano del año pasado amplió el límite para cada operadora. Atendiendo a las demandas del sector, el entonces Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital elevó el máximo de spectrum cap permitido a cada compañía con frecuencias adjudicadas.
Esto permitió que, por ejemplo, Orange y MásMóvil tengan que ceder mucho menos espectro que antes de comenzar la fusión (cuando los franceses, Telefónica y Vodafone estaban en su máximo permitido) y que parte de estas frecuencias sobrantes se puedan repartir entre las grandes compañías.
Originalmente se pensó que esta normativa intentaba bloquear la entrada de un nuevo operador móvil porque el espectro se podía seguir repartiendo entre los operadores históricos, aunque finalmente tras el fallo de la Comisión Europea, se pudo confirmar que este movimiento permitió que Digi terminará recibiendo menos frecuencias y solo para construir una red propia muy limitada.
Otras operadoras
¿Y cómo se repartirá este espectro sobrante? Las fuentes consultadas apuntan a que Telefónica se quedaría con gran parte, en una horquilla que va desde 20 Mhz a los 30 Mhz que saldrán a la venta. Entre otras cosas, porque tiene mayor capacidad financiera y las frecuencias encajan mucho mejor en su actual infraestructura, lo que permitiría reforzar y aumentar su cobertura y consolidar sus despliegues de 5G.
Si es que no comprase todo el espectro disponible, las fuentes consultadas indican que el sobrante podría irse a otra compañía como Vodafone, Avatel o incluso alguna otra que actualmente no tiene desarrollos móviles. Respecto del precio de la operación, el único antecedente es la venta de los 60 Mhz a Digi por 120 millones de euros, un valor que estuvo muy por debajo del precio de mercado.
Esto supone que el coste efectivo por cada Mhz sea superior, aunque en cifras que no deberían superar los 100 millones de euros en total. Este espectro va asociado a pagos futuros al Estado por su uso, por lo que estamos hablando de un activo que tiene costes asociados de despliegue, lo que puede rebajar el precio de la operación. Si no hay acuerdo, el espectro sobrante deberá devolverse al Ministerio de Transformación Digital.
