Una nueva directiva europea sobre mercados digitales pone en riesgo a las pymes
En caso de incumplimiento, estas empresas podrían ser multadas con hasta el 20% de su volumen de negocios anual
Pymes. | Europa Press
Las pymes y grandes empresas de España deberán adaptar sus portales web a las exigencias motivadas por la entrada en vigor de la nueva Ley de Mercados Digitales. Esta nueva legislación impone obligaciones específicas a las empresas que operan en el espacio digital, con el objetivo primordial de salvaguardar la privacidad de los usuarios y promover un entorno digital más transparente y justo. Sin embargo, de no cumplirla, las pymes podrían enfrentarse a multas que obligarían a abonar hasta el 20% de su volumen de negocios anual, en los casos más graves.
El pasado 6 de marzo entró en vigor la nueva Ley de Mercados Digitales, promovida por la Comisión Europea y que busca imponer nuevas normas de privacidad, con el fin de proteger a los usuarios de los portales web. En concreto, se centra en los requisitos de privacidad de datos, aplicados a los datos personales que cualquiera consiente cuando accede de manera gratuita a una página en internet (las famosas cookies), y que son recogidos tanto por los administradores de las páginas web, como por terceros que las manipulan.
Así, los autónomos y las pymes están obligados a sustituir en sus portales web los métodos intrusivos por herramientas transparentes, para obtener así: el consentimiento del usuario, el seguimiento sin cookies, el respaldo de bases de origen y la publicidad basada en el contexto. De no realizar estos cambios, y por tanto no cumplir con la Ley de Mercados Digitales, pymes y autónomos podrían enfrentarse a diferentes sanciones, que van desde abonar el 10-20% del volumen anual de negocios de la empresa (en infracciones reiteradas), hasta tener que pagar el 5 % del volumen de negocios medio diario en el caso de multas coercitivas periódicas.
Muchas empresas españolas están recurriendo a la instalación de plugins adaptados a la nueva normativa, pero no todos cumplen la normativa y ello podría llevar la cancelación del uso de todas las herramientas de marketing digital (publicidad online). Además, la Comisión Europea dice que se trata de «asegurar que las grandes empresas tecnológicas supervisen el buen desarrollo de los servicios que ofrecen a los ciudadanos europeos, evitando de esta manera la creación de monopolios y promoviendo una competencia justa en el ámbito digital».
José Montero, CEO y socio fundador de Montero de Cisneros Abogados, explica esta ley: «busca resolver asuntos complejos como el excesivo control y falta protección de los derechos de los consumidores y usuarios de internet, qué en los últimos años se ha visto especialmente afectado», ya que «muchos clientes destacan que al visitar páginas webs han percibido como sus datos son circulados libremente sin su consentimiento, porque han recibido excesiva información comercial de empresas que no son de su interés, viendo su privacidad gravemente afectada»; en una nota de prensa a la que ha tenido acceso THE OBJECTIVE.
Google Analytics, Tag Manager o Google Ads son algunas de las empresas que diferentes entidades contratan con el fin de analizar sus estrategias de marketing digital. Pues bien, éstas ya han adaptado sus medios a la nueva legislación, lo que pone en cabeza de la lista de prioridades de las pymes y de autónomos adaptar sus portales web a esta ley.
Para las empresas, este cambio normativo plantea repercusiones adversas, especialmente en lo que concierne a las métricas y estrategias publicitarias. La ausencia de datos precisos sobre los usuarios dificulta la capacidad para personalizar y dirigir efectivamente la publicidad. No obstante, se considera que es posible conciliar la privacidad del usuario con las necesidades comerciales mediante el uso de cookies específicas y técnicas de aprendizaje automático. Estas herramientas permiten predecir el perfil del usuario mientras se salvaguarda su privacidad, facilitando así la entrega de publicidad relevante al público objetivo.
