Desconcierto en el sector de la vivienda: los extranjeros no tienen la culpa de su precio
Feijóo coincide con Sánchez en que parte del problema son los residentes no comunitarios
La vivienda se ha situado desde hace meses en el centro del debate y de las propuestas tanto del Gobierno como del principal partido de la oposición. El domingo, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, detalló las propuestas de su partido para mejorar la crisis de vivienda que atraviesa España. Este lunes hacía lo propio el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. A pesar de las diferencias entre ambos, los dos se han alineado al señalar a los extranjeros no comunitarios como causantes del incremento en el precio de la vivienda que se ha producido en algunos lugares. Un análisis que tachan de «inconsistente y erróneo» varias fuentes del sector inmobiliario consultadas por THE OBJECTIVE.
A primera hora de la mañana de este lunes, Feijóo, al ser preguntado por Carlos Alsina en una entrevista en Onda Cero por la subida del precio de la vivienda en Madrid, respondía lo siguiente: «El número de gente que ha venido a Madrid con rentas altas es muchísimo. Todos los hispanos procedentes de Venezuela, de México, de Perú, de Colombia, han venido a Madrid básicamente y han comprado vivienda y eso ha encarecido el precio de la vivienda».
Por su parte, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha acusado a los no comunitarios y no residentes de «especular» con la vivienda en España. Durante la clausura del foro denominado Vivienda, quinto pilar del Estado del bienestar, organizado por el ministerio del ramo, ha anunciado la limitación de la compra de vivienda para extranjeros extracomunitarios no residentes. Una medida para la que ha pedido el apoyo del resto de grupos parlamentarios cuando pase por el Congreso. La intención del Gobierno es incrementar la carga fiscal para estos compradores. No obstante, Sánchez ha comparado la medida con la que aplican otros países como Dinamarca o Canadá -que mantienen limitaciones en la compra a ciudadanos no residentes- y la ha descrito como «adecuada y necesaria en la coyuntura actual de emergencia habitacional».
¿Relación con la crisis de vivienda?
Las fuentes del sector consultadas destacan que las medidas centradas en los no residentes que compran vivienda en España no tendrán ningún efecto en la reducción de precios de la vivienda asequible, donde está el verdadero problema. «Es importante destacar que el tipo de vivienda que demanda el comprador nacional no es el mismo que el que busca el comprador extranjero», explican. Por ejemplo, estos ciudadanos, de elevado poder adquisitivo, optan más por obra nueva que el español gracias al mayor nivel de renta, que le permite invertir más en casas nuevas, modernas y construidas con materiales de las mejores calidades. «Son análisis erróneos e inconsistentes y demuestran no saber cómo funciona el mercado inmobiliario», apuntan otras fuentes.
«Lo que estamos detectando últimamente son mexicanos que compran viviendas de uno o dos millones de euros en Madrid para que sus hijos estudien en las escuelas de negocio de aquí», aseguran fuentes de una importante inmobiliaria a THE OBJECTIVE. Un tipo de vivienda e inversión que no compite con la que buscan, de media, las familias jóvenes que se encuentran en el entorno de 200.000 o 300.000 euros, donde se encuentra la escasez y la problemática actualmente. «Son medidas populistas, como la retirada de la golden visa, pero sin efecto en la situación real de falta de oferta», señalan otras fuentes.
Críticas del sindicato de inquilinos
Una medida que tampoco cuenta con el visto bueno del Sindicato de Inquilinos, que lleva varios meses promoviendo manifestaciones en favor de la vivienda. Destacan que esta medida, tal como se presenta, tiene vacíos legales, ya que está vinculada al pago del 100% del ITP, pero este impuesto es competencia de las comunidades autónomas, destacan. En segundo lugar, afecta únicamente a ciudadanos extracomunitarios, mientras que en Cataluña los principales compradores extranjeros provienen de Francia y Alemania.
Dificultar la compra de vivienda por parte de extranjeros es una cuestión que estudia desde hace meses el Gobierno de Canarias, tal y como contamos en THE OBJECTIVE. El ejecutivo isleño analiza la viabilidad jurídica de esta medida. En concreto, Presidencia del Gobierno canario es la encargada de estudiar esa propuesta, avanzada en el mes de mayo por el presidente Fernando Clavijo (Coalición Canaria) y si la misma es compatible con la normativa europea.
Una propuesta que se enmarca en la tensión del mercado de la vivienda que vive desde hace años el archipiélago. Esta medida sólo podría aplicarse a los ciudadanos no comunitarios. El Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea (TFUE), en su artículo 63, establece la prohibición de cualquier tipo de restricción a los movimientos de capitales entre Estados miembros y terceros países, incluyendo la compra de propiedades inmobiliarias, lo que significa que cualquier ciudadano de la UE tiene derecho a adquirir viviendas en cualquier país miembro sin restricciones.