THE OBJECTIVE
Román Cendoya

Israel y su legítima defensa

«A Hamás no le interesa la seguridad o el bienestar de los civiles en la Franja de Gaza. Anteponen la destrucción de Israel incluso a su propia supervivencia»

Opinión
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Israel y su legítima defensa

Ilustración de Alejandra Svriz.

Si alguna vez los palestinos tuvieron alguna razón en sus reivindicaciones, son ellos mismos los que han acabado con ellas. Sus razones han sido asesinadas, violadas, degolladas y vejadas por la horda de salvajes que han demostrado ser. Con la cobardía como bandera, han atacado a la sociedad civil sin respetar género, edad ni condición. Al más puro estilo ISIS.

Mujeres asesinadas y vejadas. Niños, incluidos bebés, y ancianos degollados son el paisaje dantesco que ha dejado la barbarie que representa el islam de los palestinos apoyados por Irán, el Líbano o Siria. Hamás es el peor terrorismo que inició su ataque contra los ciudadanos de Israel mediante la infiltración de terroristas en comunidades del sur y que coordinó los asesinatos masivos con una lluvia de fuego aéreo de miles de cohetes.

Hamás es el ejecutor de la voluntad del exterminio ansiado contra la nación y el pueblo judíos del peor islam. Han asesinado a todo aquello que fuera judío, sin distinción de ideología o posición política respecto a la solución palestina. Lo han hecho después de años de acercamiento de Israel a los países árabes. La posibilidad de que países del entorno reconozcan a Israel ha activado, a través del aniquilamiento programado, la obligatoria contundente respuesta de Israel, que aspiran aleje de la nación judía a sus países aliados. El terrorismo indiscriminado quiere romper con los años de esfuerzo colectivo de estabilidad en la zona.

Es evidente que a Hamás no le interesa la seguridad o el bienestar de los civiles en la Franja de Gaza. Anteponen la destrucción de Israel incluso a su propia supervivencia. Hamás provoca la legítima defensa israelí utilizando a niños y civiles como escudos humanos. Nada vale más que la destrucción de Israel. El exceso es tan grande que ha llevado a Biden a posicionarse con contundencia: «Estamos con Israel».

«Israel tiene que volcar todos sus recursos militares para eliminar a los atacantes»

Detener, juzgar y condenar a los autores de las atrocidades es imposible. No se puede simplificar la gravedad del terrorismo de Hamás. Han asesinado a franceses, argentinos, rusos, españoles… ciudadanos con pasaportes de muchos países del mundo, aniquilados por la presunta condición de «judíos».

Israel tiene que volcar todos sus recursos militares para eliminar a los atacantes. Y no es sólo Hamás.  El Estado de Israel lucha contra el gobierno terrorista. Contra el islam aniquilador.

Es repugnante ver a esa izquierda alineada con el terrorismo asesino. Ni ética, ni estética, ni decencia, ni solidaridad. La izquierda sumatoria española está tan manchada de sangre como vacía de dignidad. La deshumanización del otro es ideológicamente inadmisible.

Israel es la isla occidental entre el islam medieval. Israel representa todos los principios y valores que defendemos en la UE. Un país de kibutz donde se ha conseguido el mayor desarrollo vital de la gestión socialdemócrata. El asalto a los kibutz es el peor terrorismo. Los militares han visto bebés decapitados y familias enteras asesinadas a tiros en sus camas. No uno ni dos. Han aniquilado kibutz que defendían la convivencia palestina. Han asesinado a esas personas de la izquierda israelí que defendían la solución conjunta. Y la izquierda española junto a los asesinos. 

Israel tiene la dificultad de ejercer el derecho a defenderse con los límites que impone la normativa internacional. Tiene la dificultad de imponer la legalidad frente a la barbarie. Es imprescindible que ante la intolerancia asesina se implante la intolerancia legal. 

«El peligro viene de la obsesión de los ayatolás por la desaparición del Estado de Israel»

A algunos les parece que no se puede asediar Gaza con el bloqueo de suministros. Sólo faltaría. Tienen una frontera de salida hacia Egipto. En el país de las pirámides está la decisión de abrir o cerrar la frontera.

El peligro viene de la obsesión de los ayatolás por la desaparición del Estado de Israel. La extensión de la responsabilidad llega hasta el presidente iraní Raisi y sus relaciones con Ismail Haniyeh, jefe del Buró Político de Hamás, y con el secretario general de la Jihad Islámica palestina, Ziyad Nakhaleh, expresando el apoyo de Irán a las criminales acciones de la organización terrorista.

Hamás nunca podría hacer todo lo que ha hecho sin la ayuda logística y económica de Irán. Por eso, el resto de las fronteras están en máxima emergencia por lo que pueda venir del Líbano o de Siria. 

Es un horror saber que los familiares de los desaparecidos o muertos prefieran el asesinato de sus seres queridos, para evitar la crueldad evidente a la que puedan ser sometidos por los salvajes e inhumanos terroristas palestinos.

Hoy el pañuelo palestino que hace a la izquierda progre tan progre y comprometida es una toalla bañada en sangre de inocentes. Es repulsivo aguantar la indecente equidistancia, incluso la justificación, de actos terroristas salvajes e indiscriminados.

EEUU es Israel. Yo también.

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