Un tío de Alberto Garzón, en la lista de jueces que maneja Podemos para renovar el CGPJ
Ignacio Espinosa presidió durante 15 años el Tribunal Superior de Justicia de La Rioja. PP y PSOE lo desvinculan de la formación morada
Los partidos políticos ultiman el acuerdo para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), pero el baile de nombres ya ha comenzado. El PSOE elegirá 10 vocales, la mitad de los que conforman el órgano de gobierno de los jueces. No obstante, los socialistas se han comprometido a ceder dos asientos a Unidas Podemos. La formación morada guarda un celoso secretismo sobre los aspirantes, más allá de la aireada candidatura de Victoria Rosell. Fuentes cercanas a la negociación afirman que en la lista hay otros dos nombres marcados, uno de ellos el de Ignacio Espinosa, tío del actual ministro de Consumo, Alberto Garzón.
No es la primera vez que Espinosa suena para formar parte del CGPJ. Este juez nacido en Cenicero (La Rioja) hace 70 años fue uno de los 51 candidatos que el dimitido presidente del CGPJ Carlos Lesmes remitió a las Cortes en septiembre de 2018. La mayoría de quienes formaban esa relación, 27 profesionales, estaban avalados por las asociaciones, entre ellos el tío por vía materna de Garzón. El Congreso y el Senado eligen, por mayoría de tres quintos, a 12 vocales de origen judicial y a otros ocho entre juristas de reconocido prestigio para un mandato de cinco años.
El acuerdo finalmente no se produjo. Su filtración a través de un WhatsApp hizo saltar las conversaciones por los aires, ya que Manuel Marchena renunció a la presidencia un día después de publicarse el mensaje. El CGPJ sigue sin renovarse cuatro años después. Los partidos estuvieron cerca de hacerlo el año pasado, pero la crisis interna de los populares y la reforma del Ley Orgánica del Poder Judicial que impulsó el Gobierno para evitar que el Consejo pudiera hacer nombramientos discrecionales mientras estuviese en funciones dio al traste con el pacto.
El ministro Garzón
Espinosa, propuesto por la organización progresista Juezas y Jueces para la Democracia, había conseguido esquivar el veto del PP, que desvinculó su nombre de Podemos. Su inclusión entre los aspirantes a vocal es anterior a que Garzón fuese nombrado ministro en 2020. De hecho, su nombre ya figuró en la relación de candidatos que se envió a las Cortes en 2013, aunque la propuesta no fructificó. «Siempre ha sonado para las más altas instancias. Es el candidato eterno de La Rioja, pero siempre termina cayéndose por equilibrios de mayor peso», reconoce un importante cargo en la región.
«En 2017 formó parte de la dupla a propuesta de PSOE y Podemos que el Parlamento de La Rioja envió al Senado como candidatos al Constitucional. El otro fue Alfredo Montoya, que resultó elegido, aunque ha causado baja por enfermedad», insiste la misma fuente. Socialistas y populares consideran a Espinosa un reputado profesional. Presidió durante 15 años el Tribunal Superior de Justicia de La Rioja (2002-2017). Tres mandatos consecutivos. También ha sido candidato al Tribunal Supremo y a presidir la Audiencia Nacional en dos ocasiones.
El tío de Garzón tiene buena reputación en la carrera judicial. Las fuentes consultadas aseguran a THE OBJECTIVE que el suyo no es «un nombre de Podemos», que ya sabe que Espinosa integrará el nuevo CGPJ a propuesta del PSOE. La única duda de los socialistas es su inminente jubilación, prevista para dentro de dos años. La formación morada tiene otro candidato a vocal, el magistrado de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña Carlos Hugo Preciado.
«Incluir a Espinosa puede ser una forma de presionar para tener más fuerza en la negociación que lleva el ministro de Presidencia, Félix Bolaños. Su objetivo es promocionar la candidatura de Rosell». La elección de la actual Delegada del Gobierno contra la Violencia de Género es una línea roja para los de Ione Belarra. Ya la quisieron colocar hace años, pero el PP se negó con el argumento de que pretendía excluir perfiles políticos del órgano de gobierno de los jueces.
Sin vinculación política
Espinosa no entraría en esa categoría, ya que no se le conoce más vinculación con la política que tener un sobrino ministro. Además, le avala su dilatada experiencia profesional. Ingresó en la carrera judicial en 1978. Es miembro de la asociación progresista Juezas y Jueces para la Democracia, de la que fue portavoz nacional entre 2007 y 2010. Sus primeros destinos fueron en Zarauz (Guipúzcoa), Sanxenxo (Pontevedra), Santo Domingo de la Calzada (La Rioja), Málaga, Santoña (Cantabria), Reus (Tarragona) y Logroño.
En 1989, tras crearse los Tribunales Superiores, fue nombrado presidente de la Sala de lo Social en el Tribunal Superior de Justicia de La Rioja. Ocupó ese cargo hasta 2002, cuando fue nombrado presidente del órgano judicial. El CGPJ renovó su nombramiento en marzo de 2007. Cinco años más tarde volvió a hacerlo, así que asumió esa responsabilidad hasta 2017. Es especialista en Menores por designación del Consejo en 1999. Espinosa también se ha dedicado a la docencia.
El ministro de Justicia José María Michavilla, del PP, le nombró presidente de la Comisión Nacional de Asistencia a las Víctimas de Delitos Violentos y contra la Libertad Sexual en 2003 a propuesta del CGPJ. En agosto de 2017, Espinosa ofició la boda de su sobrino Alberto Garzón en Cenicero, el municipio de la que procede la familia y con el que tienen un importante vínculo. De hecho, Eduardo Garzón, hermano del ministro, ha llegado a cerrar la lista de IU para las elecciones municipales en la localidad.
El tiempo apremia. La lista que remitió Lesmes a las Cortes en 2018 ha tenido nueve bajas, por lo que solo quedan 42 aspirantes al Consejo en liza. Supone el 82% de los nombres que se acordaron en un principio. Durante estos años se han producido renuncias, jubilaciones, promociones y hasta un fallecimiento que han reducido la nómina de candidatos, lo que complica la elección de los partidos para renovar a los vocales del CGPJ.