Interior prohibió a los agentes ir al minuto de silencio en Barbate y luego rectificó
La Dirección Operativa de la Guardia civil mandó el mensaje por un canal interno. Mandos apuntan a una «orden política»
Clima de máxima tensión en el Instituto Armado. Una comunicación interna de la Dirección Adjunta Operativa (DAO) de la Guardia Civil a última hora del pasado domingo ha desatado el enfado de miles de agentes. En la misma, este órgano, dependiente del Ministerio del Interior, prohibía expresamente a los guardias civiles acudir a los minutos de silencio que se habían convocado este lunes en distintos ayuntamientos para condenar la muerte de los dos agentes en Barbate, tras la embestida mortal de una narcolancha, por la que han sido detenidas ocho personas, entre ellas el autor material, Francisco Javier Martín Pérez, alias Kiko El Cabra.
Según fuentes de la Benemérita consultadas por THE OBJECTIVE, el revuelo causado tras la recepción del mensaje por el canal interno de la Guardia Civil fue de tal calibre que la Dirección Operativa rectificó horas después y matizó que «cada agente podía hacer lo que considerase» en el homenaje, convocado por la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP). El problema, señalan las mismas fuentes, es que la rectificación «creo aún más dudas entre los agentes». «Lo que ha pasado este lunes es que cada comandancia ha hecho una cosa distinta. En algunas ha ido solo el jefe, en otras han designado a un representante…».
En Madrid y Burgos sí han acudido agentes uniformados al minuto de silencio. En Andalucía, por contra, apenas han asistido representantes. «Al final, pese a que rectificaron, los guardias civiles no han sabido qué hacer, no sabes si te puedes enfrentar a un expediente disciplinario…», advierten. Esta decisión también ha causado sorpresa entre los mandos del Instituto Armado, quienes, señalan distintas fuentes, dudan de que la orden saliese de la cúpula del Cuerpo y apuntan más a un «mandato político». «A nadie se le ocurre que alguien ‘de verde’ diese esa orden, después de todo lo que hemos vivido en los últimos años…», denuncian.
Denuncia del PP
Esta polémica orden también ha llegado al conocimiento del Partido Popular a través de sus alcaldes. El secretario general del PP de Málaga, José Ramón Carmona, también ha criticado este lunes que el Ministerio del Interior «ha cursado una orden a la Guardia Civil de no participar en el minuto de silencio que ayuntamientos y diferentes instituciones han convocado este mediodía en memoria de los dos agentes asesinados en Barbate (Cádiz)».
El dirigente ha censurado este «intento de coacción» por parte del Ministerio y su titular, Fernando Grande-Marlaska, «en un momento especialmente doloroso para la Benemérita y para el conjunto de la sociedad». A través de un comunicado, Carmona ha trasladado a la Guardia Civil su «solidaridad y su pésame por esta tragedia« y ha lamentado que «numerosos ayuntamientos de la provincia han recibido las excusas de los agentes ante la orden expresa del Ministerio de que no acudiesen», pudiendo hacerlo solo a título personal y no uniformados».
Piden la dimisión de Marlaska
En un comunicado interno este lunes, las asociaciones representativas de los guardias civiles han exigido al ministro del Interior que tome medidas inmediatas y contundentes para evitar más muertes de agentes que luchan contra el narcotráfico en el Campo de Gibraltar. «Si no es capaz de gestionar eficazmente sus responsabilidades y proteger a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad debe dimitir», exigen las siete organizaciones, todas ellas con representación en el Consejo de la Guardia Civil.
Por otro lado, desde la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) lamentan que el área de Grande-Marlaska no haya dado instrucciones todavía para que las banderas de España de todos los cuarteles de la Guardia Civil ondeen a media hasta, tal como pidió esta organización el pasado viernes, 9 de febrero, cuando la narcolancha impactó contra la pequeña zociac de la Guardia Civil en el puerto de Barbate y causó la muerte de los dos agentes, Miguel Ángel González Gómez, de 39 años, y David Pérez Carracedo, de 43.