Voto exterior: el PSOE confía en mantener el escaño que baila en Madrid y ganar otros dos
Fuentes socialistas ven posibilidades de ganar un representante más por Tarragona, Las Palmas e incluso Málaga
El PSOE no se ha tomado aún vacaciones y Ferraz ha llamado a la movilización máxima de sus militantes para el recuento del voto exterior, el llamado voto CERA (Censo Electoral de Residentes Ausentes), que comenzará el viernes 28 de julio por parte de la Junta Electoral Central, tras haber recibido del Ministerio de Exteriores las valijas diplomáticas con los votos del exterior. Las agrupaciones socialistas tendrán que revisar las actas del recuento y el PSOE ha tocado a rebato ante la previsión de arañar hasta tres escaños en el cómputo final. Según fuentes socialistas consultadas por THE OBJECTIVE, Moncloa y Ferraz descartan la posibilidad de perder un escaño por Madrid y contemplan la posibilidad de llegar hasta los 124 escaños gracias a tres territorios: Tarragona, Las Palmas de Gran Canaria y Málaga.
La probabilidad de perder el último escaño del PSOE en Madrid es alta. Sería el número 11, que estaría en disputa con el PP a una distancia de 1.749 votos. Sin embargo, fuentes socialistas consultadas por este periódico rebajan esta posibilidad: «No habrá sorpresas ni grandes cambios para la gobernabilidad», señalan en referencia a la posibilidad de perder un diputado, lo cual obligaría a Junts a votar a favor en lugar de abstenerse. El motivo de esta confianza no reside en los votos, que nadie conoce y custodia la Junta Electoral Central a la espera de abrirlos este viernes, sino en la novedad de la participación.
Fuentes socialistas anticipan a THE OBJECTIVE que apenas se han registrado 240.000 votos CERA, lo cual supone una participación bajísima de apenas el 10% del censo de 2.400.000 votantes en el exterior. Un elemento que ha sorprendido al Gobierno ya que se trata de las primeras elecciones generales celebradas sin voto rogado, el cual se reformó en esta legislatura para que el votante en el extranjero pudiera votar en urna en los consulados y embajadas en lugar de rogar el voto previamente. Una reforma que apenas ha tenido efectos, como ya se comprobó en las municipales y autonómicas en las que votó una minoría del censo, por debajo del 10%.
«No cambiará nada»
El pronóstico mayoritario es que el voto CERA en Madrid arrojará un «empate entre PP y PSOE» que «no cambiará nada». Pero también hay fuentes de Exteriores más pesimistas por el factor diferencial entre el voto exterior en Madrid y otras comunidades como Cantabria, Galicia o Asturias. Es la diferencia entre «emigrantes y expatriados», ya que Madrid registra un «alto nivel de cargos directivos de empresas en condiciones de expatriados», cuyo voto está más vinculado a la derecha que a la izquierda, y que, contrasta con la altísima emigración de las zonas pobres de las regiones del norte de España.
Pese a todo, el PSOE explica que «históricamente, el CERA no perjudica al PSOE» y la reforma del voto rogado no ha supuesto un cambio en los niveles de participación. «Nos dará pero, en ningún caso, nos quitará», anticipan estas fuentes señalando a los territorios en los que el PSOE sí podría hacerse con un representante más gracias al voto exterior.
Tarragona y Las Palmas, al PSOE
Del mapa de posibilidades, fuentes socialistas señalan que la mayor probabilidad de arañar un representante más es Tarragona, donde al PSOE le faltan 1.298 para quitarle el último escaño a Junts. Un escenario posible, puesto que en las generales de 2019, aún con el sistema de votos rogados, se emitieron 1.626 votos en una provincia en el que el 23-J ha arrojado la victoria del PSC por un 28,9% de los votos frente al 19,6 de Junts.
El segundo posible escaño para el PSOE estaría en Las Palmas de Gran Canaria, donde el último diputado del PP estaría a 6.950 votos de acabar siendo para el PSOE. Un escenario probable teniendo en cuenta el resultado electoral el 23-J en la capital canaria, donde los socialistas ganaron las elecciones con un 33,17% frente al 25% del PP, y tras la victoria de la ex ministra de Sanidad, Carolina Darias, en las municipales del 28-M.
Girona y Cantabria, al PP
Otras fuentes socialistas apuntan también a que incluso hay opciones en Málaga, donde la distancia entre el PP y el PSOE para el último escaño es de apenas 3.047 votos, pero la aplastante victoria del PP con un 38,34% del voto frente al 30,28% del PSOE permite menos optimismos. En el lado del PP, tendrían dos posibles parlamentarios en liza: uno en Girona, a 363 votos de Junts; y en Cantabria, a 428 votos de Vox.
Esto podría alterar la aritmética parlamentaria para la investidura del nuevo gobierno. En el mejor de los casos para ambos, PP ganaría dos (138) y el PSOE otros dos (124). Pero esto no supondría un giro brusco o cambio de escenario ya que el PSOE seguiría necesitando la abstención del partido de Carles Puigdemont y teniendo un margen respecto a los votos en contra a su investidura. En caso de que se produjera en estos momentos, la correlación de fuerzas que arrojaría el panel de votaciones del Congreso en la segunda votación de investidura sería de 172 votos a favor de Pedro Sánchez (PSOE, Sumar, ERC, EH Bildu, PNV, BNG ) y 171 en contra (PP, Vox, UPN y CC).