Marlaska se confiesa ante el presidente del CGPJ: «La amnistía me produce una dicotomía»
THE OBJECTIVE desvela que el ministro del Interior compartió almuerzo con Vicente Guilarte y que hablaron de la amnistía
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, mantuvo este jueves 2 de noviembre un almuerzo privado con el presidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Vicente Guilarte, en los bajos de La Tavernetta, un restaurante italiano de Madrid cercano a la sede del Tribunal Supremo. La escena, inmortalizada en exclusiva por THE OBJECTIVE, tiene si cabe más importancia por el momento elegido: apenas 30 minutos antes de que el presidente del Consejo convocara un pleno sobre la amnistía que, tras la petición de ocho vocales del órgano de gobierno de los jueces, se celebrará finalmente el próximo lunes.
Pero al carácter noticiable del encuentro y a la importancia del momento, entre las 15 y las 16.30 horas de este jueves 2 de noviembre, se suma el contenido de la conversación entre ambos. Según indican fuentes presenciales, el ministro del Interior en funciones, juez de carrera, confesó durante la charla con Guilarte sus dudas en relación a la aprobación de la futura ley de amnistía, que se ha pactado entre el PSOE y ERC y se sigue negociando con Junts a cambio de su apoyo a la investidura.
La «dicotomía» de la amnistía
Dudas que el propio Marlaska admitió a Guilarte en relación a la proposición de ley que está previsto que presenten PSOE, Sumar y sus aliados parlamentarios en los próximos días. «Yo te reconozco que la amnistía me produce un poco de dicotomía», confesó el titular de Interior, quien se refirió al contenido concreto de una parte de la norma con la que dijo no estar «muy conforme». Como si Guilarte conociera el contenido de la futura ley, asentía mientras se refería a detalles concretos del articulado sobre los que dijo: «Yo esto no lo veo muy claro…».
La conversación se produjo en un clima de confianza, ya que ambos «son amigos desde hace años». Un extremo que confirman fuentes del Consejo a este diario, pero al que se refirieron también Marlaska y Guilarte durante su almuerzo frente a Las Salesas. Según ha podido saber THE OBJECTIVE, Guilarte y Marlaska comentaron divertidos la sorpresa del ministro de Exteriores, José Manuel Albares, al asistir al afectuoso saludo entre ambos en el juramento de la Princesa de Asturias el pasado martes 31 en el Congreso, cuando se emplazaron para la comida que celebraron dos días después, en las inmediaciones del Supremo. «Este no sabe la buena relación que tenemos desde hace años y se quedó sorprendido», rieron ambos.
Marlaska y Guilarte, «amigos desde hace años»
Las fuentes jurídicas consultadas hablan del «vínculo personal» que une al ministro del Interior y al presidente del Poder Judicial. Una relación de amistad que trabaron hace años, cuando coincidieron como vocales del CGPJ entre 2013 y 2018. Desde entonces, mantienen una relación estrecha, conocida por miembros del órgano consultados por este periódico. De hecho, el emplazamiento para verse y almorzar juntos se produjo también el pasado 12 de octubre, en el día de la Hispanidad, a la vista de algunos de sus compañeros en los fastos conmemorativos de la fiesta nacional. Al saludarse, dijeron que «llevaban mucho tiempo sin verse y que tenían que comer juntos».
Algo que volvieron a recordarse al encontrarse en el Congreso el pasado martes, esta vez con éxito. En la comida que mantuvieron ambos el jueves, Marlaska también compartió confidencias con Guilarte sobre el estado de las negociaciones con Junts y aseguró que «el pacto está cerrado desde hace semanas», a falta sólo de concretar los últimos flecos de la puesta en escena.
THE OBJECTIVE se ha puesto en contacto con los equipos de los dos comensales de este encuentro. Fuentes próximas al ministro del Interior niegan que el ministro se haya expresado «en esos términos», en referencia a la palabra «dicotomía», que «no suele utilizar». En el equipo del presidente del CGPJ se limitan a decir que el almuerzo forma parte de su agenda privada: «No tenemos nada que comentar».