El Gobierno echa a cuatro inmigrantes de un cuartel de Alcalá de Henares tras una reyerta
El Ministerio de Elma Saiz subraya que es un incidente puntual, pero el ayuntamiento pide más policías
Margarita Robles y el delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín, en el cuartel General Arteaga de Carabanchel. | Delegación del Gobierno
El Ministerio de Migraciones y Seguridad Social ha echado a cuatro inmigrantes acogidos en el acuartelamiento militar Primo de Rivera de Alcalá de Henares (Madrid) tras una reyerta entre varios de ellos el pasado viernes, según supo THE OBJECTIVE de fuentes municipales y confirmó un portavoz del departamento que dirige Elma Saiz.
«El Ministerio ha tenido constancia de un incidente puntual que ha involucrado a cuatro residentes del Centro pero que tuvo lugar fuera de él. Ni mucho menos se puede decir que los 1.100 residentes sean protagonistas de incidentes. En este caso en concreto, enseguida intervinieron las autoridades y se restauró la normalidad», señala el citado portavoz sobre esta expulsión, la primera de la que se tiene conocimiento desde que este cuartel castrense acoge a subsaharianos y magrebíes trasladados a la Península desde las Islas Canarias.
El departamento de Saiz subraya a este periódico que la situación en la zona del acuartelamiento militar gestionado por un Centro de Acogida, Emergencia y Derivación (CAED) y en los alrededores «es de calma y convivencia». En este sentido, se puntualiza que el mencionado «altercado» no ha tenido repercusión en la vida interna de la base Primo de Rivera en la que están alojados ese grupo de 1.100 extranjeros, una cifra que se acerca a los 1.260 del máximo de capacidad.
Los inmigrantes expulsados quedan en una situación aún más irregular que la que tenían, pues la Policía Nacional solo les puede llevar a un Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) con una orden judicial. La reyerta multitudinaria se produjo en un parque infantil de Alcalá de Henares y dejó nueve heridos, uno de ellos de gravedad pues requirió su ingreso hospitalario y se encuentra en coma. Desde el consistorio, dirigido por Judith Piquet (PP), se pedirán explicaciones sobre este hecho en la segunda reunión con Delegación del Gobierno y la Policía Nacional y Local que se celebrará este miércoles.
El ayuntamiento pedirá al Ejecutivo un aumento de la dotación policial en el municipio «ante la creciente alarma» que transmiten los vecinos en correos electrónicos o mediante cartas ante la presencia en sus calles de este colectivo, que puede moverse libremente pues no están detenidos.
El CAED deja salir cada día a los inmigrantes por tandas, a razón de doscientos en doscientos con intervalos de dos o tres horas. Varios ciudadanos han denunciando que algunos de ellos hurgan en las basuras en busca de alimentos u otros objetos, y que han tenido actitudes amenazantes con otros jóvenes en las calles del municipio. La Policía local ha investigado un caso de supuestos tocamientos a una joven, pero en las pesquisas iniciales no se pudo determinar quién fue el presunto autor.
Piquet también reclamará a Delegación del Gobierno que muestre el plan de seguridad al que el Ministerio de Migraciones se comprometió cuando decidió ubicar a una parte de los inmigrantes llegados a Canarias en una parte de esta instalación militar muy próxima a Alcalá de Henares, así como un plan de convivencia específico para este municipio.
Una de las quejas del consistorio es que el departamento de Saiz les indicó inicialmente que solo llegarían subsaharianos. Sin embargo, también hay un grupo de unos 200 marroquíes alojados en el cuartel Primo de Rivera. La propia alcaldesa, quien también ostenta el cargo de presidenta de la Federación Madrileña de Municipios, tachó este domingo en una entrevista en Europa Press de «fracaso absoluto» las políticas de migración de Pedro Sánchez ante la reyerta entre dos grupos de migrantes marroquíes y subsaharianos de este viernes.
«El único plan que tiene el Ministerio es traer a 1.260 personas al acuartelamiento de Primo de Rivera. No hay coordinación, no hay organización», protestó la primera edil de Alcalá de Henares ante el «descontrol» que, a su juicio, se está produciendo con este colectivo.
«Conviene decir que el Ministerio mantiene reuniones periódicas, además de una línea contacto permanente, con la Policía local, nacional y con la Concejalía de Seguridad del Ayuntamiento de Alcalá de Henares. También se les envía diariamente una nota informativa con las cuestiones más relevantes», puntualiza el portavoz del Ministerio de Migraciones y Seguridad Social.
«Esperan a que se vayan por sus propios medios»
Las fuentes municipales replican que no es cierta esa información. «Eso de que tienen reuniones periódicas con nosotros es mentira. Solo vienen a las juntas de seguridad a las que les convocamos», subrayan antes de advertir de que la estrategia del Ejecutivo es esperar a que los propios inmigrantes se marchan del cuartel por iniciativa propia para volver a llenar el CAED con nuevas remesas de inmigrantes traídos en avión desde Canarias. «Los traen y esperan a que se vayan por sus propios medios», resumen desde el equipo de Piquet.
El Ministerio de Defensa procedió entre octubre y noviembre a unas obras para separar la zona en la que se alojarán los subsaharianos del resto de la base que utiliza el Ejército de Tierra. Recientemente, el Ejército ha destinado 300.000 euros, según El Confidencial Digital, a la seguridad de los dos cuarteles con inmigrantes ubicados en la región de Madrid -el otro es el General Arteaga de Carabanchel-. Con ese dinero se contratarán vigilantes privados y medios tecnológicos.
