Ábalos contradice a Koldo sobre el 'Delcygate': su asesor reveló que descargaron 12 maletas
El exministro afirma haber leído el sumario a pesar de no estar investigado ni personado en el ‘caso Koldo’
Un bulo. El exministro de Transporte José Luis Ábalos aseguró este lunes en la comisión de investigación del Senado que «no existieron» las maletas del Delcygate y que «no existiendo es muy difícil hablar de contenidos». El exdirigente socialista sostiene que la vicepresidenta de Venezuela y sus acompañantes solo llevaban equipaje personal, una versión que contradice la de Koldo García, que le acompañó al aeropuerto de Barajas aquella madrugada del 20 de enero de 2020. Su asesor reveló hace dos semanas en la misma sala que vio cómo descargaban «seis maletas grandes y seis pequeñas». El diputado, ahora en el Grupo Mixto, también reconoció haber leído el sumario del caso Koldo, aunque no especificó cómo accedió a él.
«Es uno de los bulos mejor instalados en en este país. No existieron las maletas. Y no existiendo es muy difícil hablar de contenidos (…) solo llevaban un equipaje personal en el caso de la vicepresidenta (Delcy Rodríguez) y de quienes le acompañaban que, igual que entró, salió al avión de Doha», explicó Ábalos después de que el senador Pelayo Gordillo (Vox) le preguntara por «el trasiego» de las maletas. Los atestados policiales y la declaración jurada de un agente de seguridad rebaten su teoría, ya que apuntan a unos 40 bultos que se bajaron del jet privado y no regresaron al vuelo comercial que horas más tarde tomó Rodríguez en la terminal 4 de Barajas.
Ábalos afirmó este lunes en el Senado que el relato que ha transcendido «escapa a toda lógica racional». En su opinión, el avión que se ha podido ver es de un tamaño reducido en el que no caben 40 maletas. «En un alarde de imaginación, las vamos a llenar. ¿De qué las llenamos? ¿De oro, cocaína, dólares? Metámosle peso. Y ahora, intente despegar. Y cruce todo el charco. En otro alarde, esas 4o maletas son introducidas en un vehículo (…) todos tenemos coche o nuestros papás. Sabemos cuántas maletas caben».
El asesor de Ábalos
Hace dos semanas, Koldo García narró a los miembros de la comisión de investigación que vio con sus propios ojos cómo se descargaron «seis maletas grandes y seis pequeñas que luego se volvieron a subir al avión» que llevó a la número dos de Nicolás Maduro hasta Doha, que era su destino final. «Si llegan a contener oro hubieran tenido que transportarse con un tráiler o con cuatro camiones», insistió el asesor de Ábalos.
Los investigadores del caso Koldo le califican como uno de los cerebros de la trama que se benefició de nueve contratos públicos a dedo por 53 millones de euros al inicio de la pandemia. El exministro reveló que se trasladó aquella noche al aeropuerto de Barajas en un coche conducido por su asesor y que su misión era diplomática: evitar que Delcy Rodríguez descendiera del avión. Califica su gestión de «exitosa», ya que la dirigente no pisó suelo español tras la prohibición de ingresar en territorio europeo que recae desde 2017 sobre los miembros del régimen venezolano.
«De lo que pasó esa noche no quiero hablar ni muerto, pero sí puedo decir que Ábalos hizo lo que tenía que hacer para salvar a muchas empresas españolas en Venezuela y no se quedó ninguna maleta ni hizo nada ilegal», subrayó Koldo en la comisión de investigación del Senado el pasado 22 de abril. Es la persona que mejor conoce los detalles de lo que ocurrió esa madrugada, ya que fue la persona a la que el exministro encargó velar por sus intereses.
Los atestados policiales que obran en poder de THE OBJECTIVE afirman que la vicepresidenta venezolana partió el 19 de enero de 10.12 horas desde el aeropuerto de Maiquetía de Caracas en un Falcon 900LX junto al ministro de Turismo, Félix Plasencia, y otros cuatro acompañantes. Aterrizan en la terminal de vuelos privados de Madrid en la T-1 a las 00.12 horas de la madrugada del día 20. En cuanto llega el avión, el comisario de la Policía Nacional en Barajas acude a la pista. Cuando llega, se encuentra con Ábalos y su asesor.
Deportar a Delcy Rodríguez
El comisario informa a Ábalos de que una de las pasajeras no puede entrar en España y debe volver de inmediato a su país de origen en aplicación de la legislación comunitaria. Según testigos presenciales, el exministro habla con los agentes para evitar la deportación de Delcy Rodríguez. El exdirigente socialista pide subir al avión, algo que hace a las 00.25 horas sin atravesar ningún control de seguridad, según revela Álvaro Nieto en su libro Conexión Caracas-Moncloa.
Una vez en la aeronave, el exministro se sienta junto a la vicepresidenta venezolana, que le enseña unos papeles. Todos salen del avión en torno a las 1.30 horas para trasladarse a la sala VIP de la terminal, donde Ábalos permanece con Delcy Rodríguez otros 45 minutos. Abandona el aeropuerto a las 2.15 horas y deja a Koldo García controlando la situación. Es justo en ese momento cuando los operarios de Barajas habrían comenzado a descargar maletas del avión, por lo que el antiguo número tres del PSOE no habría presenciado la escena.
En una declaración jurada a la que ha tenido acceso este diario, un guarda de seguridad presente en la noche de los hechos asegura que hubo movimiento de valijas: «El personal de Sky Vallet (compañía que operaba el vuelo de la vicepresidenta venezolana) traslada dos carros con maletas al exterior de la zona pública para ponerlos en los vehículos sin pasar ningún control de aduanas».
Ábalos reprochó este lunes al senador de Vox que se pusiera «en cuestión» a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, quienes «tienen que velar porque no entre nada». Además, le advirtió de que la justicia archivó el caso de forma definitiva en la primavera de 2021 al considerar que no quedó probado que Delcy Rodríguez había entrado en suelo español y que nadie ha pedido perdón. «Solo me queda el tribunal de Dios», reprochó.
Sin embargo, la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo, que fue la que en última instancia abordó el asunto, no dijo exactamente eso. En su auto de sobreseimiento acreditó todas las informaciones periodísticas publicadas y la posible infracción por parte del Gobierno de la norma europea que impedía el acceso a Rodríguez a suelo comunitario. No obstante, el Supremo dio carpetazo al asunto al entender que no se había cometido ningún delito y que debía ser la Unión Europea quien valorase si había que castigar a España por haber incumplido una resolución del Consejo de Ministros comunitario. Pese a ello, la UE nunca reprochó al Gobierno este asunto. Las imágenes de las cámaras de seguridad del aeropuerto, bajo custodia de un juzgado, podrían arrojar luz sobre el encuentro.
«Una misión diplomática»
El exministro calificó su labor como una «misión diplomática exitosa» ya que evitó que Delcy Rodríguez pisara suelo español. Una operación de la que, asegura, tuvo conocimiento el presidente del Gobierno. Explicó que se trasladó al aeropuerto de Barajas después de que le llamara la entonces ministra de Exteriores, Arantxa González Laya, que se encontraba fuera de nuestro país, porque tenía relación con el ministro de Turismo, que «sí bajó del avión porque sobre él no recaía sanción».
Aquella noche también estuvo en contacto con el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska. Ábalos insiste en que siguió en todo momento las indicaciones del comisario de la Policía Nacional en Barajas, donde se encontró con Víctor de Aldama, al que los investigadores del caso Koldo califican como uno de los cerebros de la trama. El exministro no ha explicado qué hacía el empresario esa noche en el aeropuerto y si su presencia estaba relacionada con la deuda de 200 millones que mantenía Venezuela con Air Europa y que se prestó a recuperar.