Podemos tacha de 'guerra sucia' de Sumar el ataque de Verstrynge tras la salida de su hija
El padre de Lilith Verstrynge dice que «no estaba malita» cuando salió de Podemos, como sugirieron Belarra y Montero
La exidirigente de Podemos Lilith Verstrynge. | Agencias
¿Por qué ahora, en plena campaña de las elecciones europeas? La pregunta sobrevuela el partido morado cuando se trata de dar respuesta a las declaraciones Jorge Verstrynge sobre la salida de Podemos de su hija, Lilith, el pasado enero. En una entrevista en un podcast, Verstrynge, uno de los principales inspiradores de Podemos, dijo que la decisión de su hija Lilith de salir de la política en el pasado mes de enero no se debió a razones de salud, tal y como sugirieron Irene Montero y Ione Belarra, sino a una cuestión de oportunidad política. «Cuando ella se fue, hubo dos o tres que dijeron que estaba muy malita. No estaba malita, se fue porque no lo veía y punto», afirmó. Estas declaraciones, que dejan a Montero y Belarra como artífices de una mentira, se deben enmarcar, según Podemos, en un ataque de Sumar para las europeas.
Las declaraciones de Verstrynge llegan en un momento de máxima tensión en Podemos. El partido morado se juega su presente y su futuro en unos reñidos comicios europeos, que se celebrarán el próximo 9 de junio. Y en pleno arranque de la campaña electoral, quien fue un amigo personal de Pablo Iglesias e inspirador de Podemos, ha decidido cargar contra la formación. «Me da pena por ella», ha confesado su padre en el podcast Canal de Coronel, de Pedro Baños, para luego asegurar que Verstrynge dejó el partido porque «era insostenible personalmente: entró por unas ideas y eso ya no se cumplía, hizo lo mismo que yo». Según su padre, Lilith Verstrynge no dejó la formación morada y su escaño por una cuestión de salud, sino por entender que el proyecto político estaba caduco.
En Podemos creen que las declaraciones de Verstrynge son el primer acto de una «guerra sucia» de Sumar, que prevén continuará de aquí al próximo 9 de junio. Fuentes de Podemos explicaron en conversación con este diario el pasado fin de semana que se esperaban declaraciones de este tipo. Los morados señalan a Sumar y Yolanda Díaz como mandatarios de estos ataques, que creen perdurarán a lo largo de las próximas semanas. También Podemos podría desplegar algo contra Díaz y dirigentes de Sumar, avisan.
Al menos un diputado
Las elecciones europeas son el último banco de prueba de un choque entre Podemos y Sumar que deberá decidir el futuro de ambas formaciones. Los morados necesitan sacar al menos un escaño europeo, con su candidata Irene Montero que aspira a recuperar brillo político después de la exclusión de las listas electorales del 23-J. Yolanda Díaz, por su parte, sabe que otro pinchazo, después del fracaso en Galicia, País Vasco y Cataluña, sería definitivo para su proyección como lideresa de un espacio llamado a sustituir a Podemos «de aquí a los próximos años», según el enfoque de sus valedores.
Sumar está sufriendo una sangría electoral y demoscópica que busca frenar subiendo el tono de sus declaraciones y propuestas. Díaz dejó caer dos propuestas legislativas del PSOE la semana pasada y ha entrado al choque diplomático con Israel, para intentar convencer a sus votantes de que no se queden en casa. En Sumar temen sobre todo que el electorado de Izquierda Unida, que cuantifican en alrededor de un millón de votos, esté decepcionado con la línea defendida hasta ahora. La necesidad de reactivar a esos votantes, y sobre todo a evitar que se decanten por Podemos, es una prioridad de la campaña electoral de Yolanda Díaz.
La vicepresidenta ha puesto su cara en los carteles electorales de la candidata Estrella Galán. Si Sumar no alcanza al menos cuatro diputados en las europeas, se puede abrir un cisma con Izquierda Unida, que criticó duramente el orden de la lista electoral. La semana pasada, por ejemplo, la candidata Estrella Galán anunció que entrará en el grupo parlamentario europeo de la Izquierda Unitaria. Lo hizo después de que este diario contara las dudas sobre su posible integración en el grupo de los Verdes, al que según todo pronóstico se unirán el número dos y tres de la lista de Sumar. Ese anunció respondió a «presiones internas» tras la publicación de este periódico, afirman fuentes del espacio político de Díaz.
Traslado a París
Todas estas tensiones estarían detrás de las palabras de Verstrynge, según comentan en Podemos, porque solo pueden «hacer daño» a la candidatura de Montero. Este diario ya publicó en exclusiva que la salida de Lilith Verstrynge de la cúpula morada (era diputada y secretaria de Organización) no se debió a razones de salud, sino a un choque interno con Montero.
La dirección morada acusó a Verstrynge de mantener una relación íntima con un miembro del núcleo directivo de Sumar, y le pidieron explicaciones. Esa desavenencia desembocó en la salida de la dirigente, que se ha mudado a París. Incluso en dicha publicación, las fuentes consultadas apuntaban a un consejo recibido por parte de su padre: «Detrás de Lilith está su padre, y ambos veían que esto (Podemos) hacía aguas por todas partes», explicaron.
La campaña de las europeas puede, por lo tanto, convertirse en una batería de fuego cruzado entre Sumar y Podemos para convencer al electorado de izquierda que no se decantará por el PSOE. Podemos había enfocado su arranque con un perfil bajo, evitando ataques directos a Díaz para acercarse a sus votantes sin incendiar los ánimos. Ahora, después de las declaraciones de Verstrynge, que dejan a Montero y Belarra como artífices de un engaño («ahora lo fundamental es que te cuides y que estés bien», escribió Belarra cuando Lilith Verstrynge anunció en las redes su salida de la política), no se puede excluir una respuesta de los morados. El 9 de junio es una fecha clave y ambas formaciones se juegan su futuro, por lo que puede crecer la tentación de golpes bajos de un bando u otro.
