Trabajo investiga los contratos de la fundación denunciada por fraude con los fondos UE
El caso fue desvelado por THE OBJECTIVE al recoger la alerta lanzada por los trabajadores
La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, este miércoles en el Pleno del Congreso, con el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños. | EP
El Ministerio de Trabajo, a través de la Dirección Especial de Trabajo y Seguridad Social, está investigando los contratos de los trabajadores que denunciaron a la Fundación Social Desarrollo Responsable (Munus) y a la empresa Pánico Escénico S.L. en noviembre de 2023 por presuntas irregularidades en su trabajo, según ha podido saber THE OBJECTIVE. El caso fue desvelado por este periódico al recoger la alerta lanzada por los trabajadores que llevaron sus quejas ante este departamento ministerial. La citada fundación y la empresa recibieron dos subvenciones de fondos europeos por importes de 1.599.998,40 euros y otra de 1.199.998, 80 euros, respectivamente, a través del Servicio Público de Empleo (SEPE) para la realización del programa TándEM.
La satisfacción de este grupo de trabajadores al recibir las citaciones del Ministerio de Trabajo ha sido «inmensa», al ver cómo sus denuncias empiezan a ser investigadas, después de sufrir incluso «extorsiones» por parte de la empresa para que se retractaran de sus denuncias. Muchos meses de presiones desde que decidieron alzar la voz a través de un comunicado publicado en este periódico se ven ahora recompensados con las citaciones que están recibiendo por parte de la Inspección de Trabajo.
Algunos de los receptores de un oficio de la Administración se personarán la semana que viene en las dependencias de Trabajo con la documentación que les han solicitado: «Contratos de trabajo vigentes en el año 2023, recibos de pago de salario (nómina) año 2023; en su caso, contratos mercantiles de obra o servicio y facturas por trabajos realizados; en su caso, facturas expedidas por servicios realizados durante el año 2023; en su caso, parte de alta y justificante de pago de cuotas al Régimen Especial de Trabajadores Autónomos año 2023; y declaración de IRPF (modelo 100) presentado en la Agencia Tributaria correspondiente al año 2023».
Al margen de esta citación del Ministerio de Trabajo, algunos de los denunciantes tienen que acudir a un acto de conciliación con la empresa para que se retracten tanto de las denuncias recogidas por este periódico en varias informaciones como las que expusieron en su denuncia ante el Ministerio de Trabajo. THE OBJECTIVE ha podido saber que no habrá ninguna rectificación porque mantienen la veracidad del contenido de todas sus quejas.
Los denunciantes, en conversación con este periódico, alertaron en su día sobre la falta de control del departamento ministerial que dirige Yolanda Díaz en cuanto a la gestión del dinero y la ejecución del proyecto. «Paralizaron durante dos meses el dinero de la primera fase para ver qué pasaba con él, que voló. Investigaron y dijeron que todo bien», insistió. Además, aseguraron que los responsables de la fundación, que subcontrató a Pánico Escénico, sabían cuándo venían los inspectores de trabajo: «Cada vez que había una visita de un inspector de SEPE, Alberto Herreros o alguien me avisaba de qué día y a qué hora exacta se presentaría. Algo que me llamaba la atención, pues yo creía que debería ser sin aviso previo. ¿Por qué lo sabían? Sabíamos de antemano cuándo nos haría el SEPE una inspección».
Este programa TándEM se desarrolla a través de dos iniciativas denominadas Espacios Vinculares 1 y 2, desarrollados en Madrid, Zamora y Ciudad Real, que ofrece la posibilidad a 105 jóvenes desempleados de formarse en alternancia con el empleo en especialidades como Animación Musical y Visual en vivo y directo, Asistente Técnico de Construcción y Montaje de Proyectos Escénicos y Habilidades de Interpretación para la actuación, entre otras especialidades.
El programa implica una primera parte de formación del alumnado durante tres meses y una segunda fase de alternancia con el empleo durante nueve, en la que fueron contratados con un sueldo de unos 900 euros. Uno de los problemas radica en que el pago se ha realizado con retraso en los alumnos; en el caso de los profesores, se le adeudan cantidades importantes.
Entre los incumplimientos denunciados ante el departamento que dirige Yolanda Díaz que ha provocado la investigación hay que destacar los siguientes:
Exceso de horas: «Nuestro contrato es de 24 horas semanales de trabajo y 16 horas semanales de formación, habitualmente nos exigen hacer 25 horas semanales, pero en ocasiones nos han obligado a realizar horas extra excediendo las horas semanales hasta en 11 horas, reitero obligatorias».
Falsificación de documentos bajo amenaza: «Nos han obligado a corregir y decorar el registro de horas para que parezca que se respeta lo tipificado en el contrato bajo amenaza de no cobrar».
Obligación de realizar tareas no pertenecientes a nuestro grupo profesional: «Cargar pesos pesados, manipular cableado, todo esto sin estar en nuestras labores y, por ello, no estando asegurados por esos accidentes».
Retrasos de pago de nóminas: «Hemos estado dos meses sin cobrar (agosto y septiembre), cobrando estos dos meses a día 14/10/2023. Al pedir la compensación por retraso del pago estipulada en nuestro convenio, nos responden que la empresa no es la responsable».
La Fundación Desarrollo Social negó las acusaciones de impagos, según aseguraron a THE OBJECTIVE, pero reconocieron «problemas de liquidez» de una empresa contratada como proveedor. El presidente de la Fundación, Alberto Herreros, calificó de falsas las afirmaciones de los trabajadores en un comunicado remitido a este periódico: «La Fundación no debe a día de hoy ninguna cantidad a ninguna persona física ni jurídica. En este sentido, adjuntamos certificados de estar al corriente de pagos en Seguridad Social y Hacienda de ayer mismo. La Fundación no es una empresa, sino una entidad sin ánimo de lucro, cuyo nombre es Fundación Desarrollo Social Responsable (marca Munus) que ha recibido unos fondos europeos para llevar a cabo una intervención con jóvenes menores de 29 años formándolos y contratándolos para llevar a cabo una trayectoria profesional en diferentes disciplinas durante 9 meses, nóminas en este caso que asume la Fundación precisamente con esos fondos europeos».
