Jornada de Champions como abrebocas, 3 golas por parte y parte. Un Barça que cada fin de semana se consolida más y un Real Madrid que en Champions parece imbatible, pero en Liga no tanto.
Cuando acabe el partido y su resaca pase, los efectos se desvanecerán. Acabaré volviendo a la realidad, la agotadora realidad. Una que no controlo.
Ni el mejor guionista hubiera podido escribir la película del clásico del domingo. Hubo de todo. Bueno, muy bueno, malo, muy malo y espantoso. Hubo risas, muchas. Y llantos, también.
Con su gran gol, el abnegado fajador chileno Alexis Sánchez por fin se sacudió la fama de negado frente al arco