derechos de las mujeres

Los derechos que le quedan por conquistar a la mujer saudí ahora que puede conducir

Los derechos que le quedan por conquistar a la mujer saudí ahora que puede conducir

Las mujeres saudíes ya pueden conducir. La novedad, aplaudida en todo el mundo –el país de Oriente Medio era el único en que las mujeres tenían prohibido ponerse al volante–, entraba en vigor este domingo. El país anunció por primera vez sus planes de levantar la prohibición de conducir a las mujeres en el pasado mes de septiembre, después de que el rey Salmán, el padre del príncipe heredero, emitiera un real decreto que permitía al gobierno emitir licencias de conducir a «hombres y mujeres por igual». Desde hace unos días, no solo pueden ostentar un carnet de conducir, sino que pueden poner la llave en el contacto, arrancar, y circular sin que ninguna autoridad policial les castigue. Lo que no está asegurado es que ese castigo no venga por parte de una sociedad profundamente machista.

Las tetas de Marisol

Las tetas de Marisol

Ha cerrado ‘Interviú’ y han vuelto las tetas de Marisol. Al verla en la portada le he dicho: “¿Qué hace una chica tan limpia como tú en un país tan turbio como este?”. Sí, era limpieza, turbadora limpieza, lo que percibí aquel septiembre de 1976.

Escuchar a las mujeres

Escuchar a las mujeres

Soy un hombre de veinticuatro años soltero al que le han pedido que escriba sobre gestación subrogada. Mi horizonte para experimentar lo más cercano a un embarazo está lejos, o eso creo hoy. Y cuando tenga un hijo, no podré saber lo que es llevarlo en mi interior durante nueve meses. Creo que con honestidad, trabajo y rigor uno es capaz de formarse una opinión de muchas cosas. No me suele gustar limitar los debates solo a la experiencia o la identidad (muchas veces esas identidades son construcciones artificiales); hay gente que cree que hay determinados temas en los que solo es aceptable hablar desde la experiencia, y los demás han de callar. Creo en la capacidad de meterse en la piel del otro. Pero hay cosas que no solo no viviré nunca, sino que nunca podré acercarme a comprender realmente, y una de ellas es ser mujer y estar embarazada. No es lo mismo intentar comprender el sufrimiento de un negro víctima de racismo que comprender física y psicológicamente lo que supone un embarazo. Como escribe Beatriz Gimeno en El País, “las mujeres ponen su cuerpo, pero mucho más que el cuerpo. El esfuerzo, los riesgos, la salud, las sensaciones, el insomnio, la pesadez, los cambios hormonales, físicos y psicológicos”.

Mercado de vientres

Mercado de vientres

En nuestro imaginario colectivo, la ley del mercado es la ley de la selva, la competencia salvaje que alumbra la supervivencia de los más fuertes. Sin embargo, nada más lejos de la realidad. El mercado es un ecosistema delicado que permite que se den intercambios mutuamente beneficiosos entre individuos libres y razonablemente iguales, mediante el mecanismo de los precios.

La mutilación genital femenina, prohibida en los países de la Unión Pan-Africana

La mutilación genital femenina, prohibida en los países de la Unión Pan-Africana

El acuerdo, adoptado este fin de semana, es el resultado de extensas conversaciones entre el Grupo de Trabajo para la Mujer del Parlamento y los representantes del UNFPA celebradas a finales de julio en Johannesburgo, Sudáfrica. El presidente del Parlamento, Roger Dang, en su intervención apeló a la colaboración de los hombres para acabar con este drama practicado a 200 millones de niñas y adolescentes y que supone una «flagrante violación de los derechos humanos».
La mutilación genital femenina todavía se practica en 26 de los 46 países de África, siendo Somalia, donde se realiza en un 98 por ciento de casos. Se trata de una acción agresiva que causa numerosas infecciones y enfermedades, según informaciones de la ONU. Desde organismos internacionales y asociaciones se exige desde hace años el fin de esta aberrante operación. Con la decisión del Parlamento de la UA se da un paso esencial para su erradicación en gran parte del continente africano.

Clérigos de Pakistán proponen legalizar las palizas disciplinarias contras las mujeres

Clérigos de Pakistán proponen legalizar las palizas disciplinarias contras las mujeres

Por ejemplo, cuando una mujer no acceda a tener relaciones sexuales con su marido se niegue a cumplir sus órdenes, no se vista como él imponga. Los golpes podrían darse si la mujer interactúa con extraños, si habla alto o si usa métodos anticonceptivos sin consultar a su marido. Estos supuestos llegan a la misma higiene personal de las mujeres, ya que serían legítimas las palizas por no bañarse después del coito o durante la menstruación. Para todos estos casos, el Consejo propone legalizar el castigo con “golpes ligeros”. La propuesta del Consejo esgrime que los golpes son una buena medida disciplinaria y su líder, Maulana Muhammad Khan Sherani, ha detallado la forma «adecuada» de golpear a las mujeres: “Golpear en áreas donde la piel no es ni demasiado gruesa ni demasiado fina. No usar zapatos o una escoba para golpearla en la cabeza. No golpearla en la nariz o en los ojos. No romper ningún hueso o dejarle marcas”.

La revolución por los sueldos equitativos en Hollywood

La revolución por los sueldos equitativos en Hollywood

Wright es la última en apuntarse a reclamar un sueldo equitativo al de los hombres. Patricia Arquette lo hizo al recoger el Oscar por Boyhood en 2015, Jennifer Lawrence la apoyó y detrás de ellas otras muchas como Meryl Streep -que la aplaudió y animó con fervor en la ceremonia- o Emma Watson. Todas ellas han llevado la bandera de la eliminación de la brecha salarial en su sector. A pesar de que algunos críticos aleguen que ellas ya ganan mucho dinero, esta denuncia es importante porque es mediática, porque los pasos que den las superestrellas pueden extrapolarse a la sociedad. En España, actualmente, las mujeres cobran un 18,8% menos de media que los hombres por hacer el mismo trabajo.

Publicidad
Publicidad
Publicidad
MyTO

Crea tu cuenta en The Objective

Mostrar contraseña
Mostrar contraseña

Recupera tu contraseña

Ingresa el correo electrónico con el que te registraste en The Objective

L M M J V S D