Aunque vivamos en el futuro, lo viejo es obstinado. El botón como imagen del cataclismo nuclear ha regresado con fuerza. Trump ha advertido a Kim Jong-un que el suyo es más grande y que se ande con ojo.
En la foto, por supuesto de la agencia oficial de Corea del Norte, Kim Jong-un se descojona junto a su sonriente asesor. Este tipo peligroso siempre se ríe, pero lo suyo carece de gracia alguna. Ahora quiere conquistar el espacio y llegar a la luna para plantificar ahí la bandera de Corea del Norte. Sigue ciscándose en las sanciones internacionales, y tensando al máximo la cuerda con Occidente y con sus países vecinos. Es lo suyo, y no hay que tomarle a broma.
Still affected, as are a great part of Europeans, by the wave of terrorist violence that threatens to establish in old Europe, I have decided not to put more words to the horror taken place in Paris. In search of kinder news, I meet again with him: this smiling, well-fed man who takes pictures in Technicolor, and is none only but Kim Jong-un.
Lo cierto es que todos estos premios no son sino propaganda barata de los estados para demonizar al contrario. Cada país tiene su premio y cada premio tiene un nombre más rimbombante, metafísico y absolutamente inane fuera del contexto de la lucha a muerte entre los estados.
Que este sátrapa, tan criminal y más caprichoso que sus antecesores, reciba un premio de allende sus fronteras es un hecho extraordinario. Incluso quienes lo protegen o se benefician de él como China no gustan de aparecer como amigos de uno de los regímenes del mundo más despreciados por brutal, despótico e inhumano.
Qué horror ir por el mundo rodeado de gente que escribe todo lo que dices. Porque todos, incluido Kim Jong Un, decimos tonterías de vez en cuando.
Sí, que gane «Podemos», que se independice Cataluña y que se proscriba el Cristianismo. Empiezo a pensar que es la única forma de que España despierte de una pesadilla que empezó en 1898.
Si no fuera porque cada cierto tiempo hay informes que alertan del potencial militar de Corea del Norte y de su peligro, fotos como la de Kim Jong-un en el submarino más parecerían de una película de rechifla que de un tipo con capacidad para desestabilizar una zona del mundo.
El lechón oriental apuntaba maneras desde crío. La foto lo muestra uniformado como un piloto de la Fuerza Aérea de su país. Se empieza permitiendo que un niño maneje un avión y se le acaba tolerando que estrelle una nación.