Los detenidos, todos de nacionalidad española salvo uno de nacionalidad marroquí, formaban parte de una estructura perfectamente organizada que, «siguiendo los dictados de la organización terrorista DAESH y asumiendo completamente su ideario, actuaban a través de distintos canales de Internet confluyendo en la página de Facebook denominada ‘Islam en Español». Según las autoridades, los detenidos eran los administradores de las páginas en Alemania y Bélgica, a través de las cuales trataban de captar adeptos a la causa entre jóvenes musulmanes y, mayoritariamente, del Magreb.
En la página web, abierta con el reclamo de ser una vía para divulgar contenido religioso, «se incluían mensajes y comentarios de carácter radical en la que se ensalzaban a los combatientes yihadistas «mártires», las acciones llevadas a cabo por el DAESH y la importancia de la Yihad individual».