Claves para mantener una convivencia sana durante la cuarentena
Te dejamos 10 consejos para lidiar lo mejor posible con la convivencia durante el estado de alarma
Coronavirus[contexto id=»460724″], esa palabra pronunciada al comienzo del año por unos pocos –o unos cuantos, pero estaban lejos–, se ha convertido en el constante tema de conversación en una gran parte del mundo.
Sin embargo, el virus no ha inundado exclusivamente nuestras conversaciones, sino que se ha colado de lleno en nuestras vidas y, sin duda, en nuestros hogares.
La situación que estamos viviendo ha obligado al mundo entero a adoptar medidas extraordinarias. España, el tercer país con mayor número de contagios y con un estado de alarma declarado, se ha posicionado en el ojo del huracán. Esta crisis sanitaria pone patas arriba nuestro país y desafía la convivencia de nuestras casas.
Combinar el teletrabajo y las tareas del hogar con todos los miembros encerrados pone a prueba la coexistencia familiar. Sin embargo, también nos plantea una oportunidad para mejorar la comunicación y las relaciones de nuestros hogares.
Para intentar lidiar lo mejor posible con el aislamiento domiciliario, hemos contactado con Patricia López Recio, psicóloga del centro de psicología Psicontigo.
De acuerdo con las recomendaciones de los expertos del centro, te dejamos algunos consejos que pueden hacer estos días más amenos y la vuelta a la normalidad más sencilla.
1. Elige las batallas a pelear
Debemos tener claro que siempre vamos a encontrar motivos por los cuales discutir. Habrá muchas cosas que no nos gusten de las personas con las que convivimos y ahora más que nunca vamos a estar más irascibles.
Por eso, debemos ser más flexibles y tener en cuenta que hay ciertos aspectos por los que merece la pena discutir y otros muchos que no. Elijamos bien los motivos de las discusiones y demos relevancia a lo realmente importante.
2. Cede
Ceder es esencial a la hora de mantener una buena convivencia durante el estado de alarma. Nos servirá para evitar conflictos y discusiones con el resto de personas que vivamos.
3. Tiempo de retirada
No hay mal que por bien no venga. Es el mejor momento para dedicar tiempo a nosotros mismos. Si lo pensamos bien, es una oportunidad única para destinar tiempo a hacer lo que más nos gusta: leer, meditar, ver esa serie que dejamos de lado por falta de tiempo, hacer ese curso online que teníamos pendiente…
Son muchas las alternativas que tenemos para hacer frente a este momento y la mejor de todas es la realización de actividades que nos motiven y nos den energía positiva.
Este tiempo de retirada con nosotros mismos formará parte de nuestro cuidado personal y nos oxigenará.
4. Comunicación
Sin convertirnos en una máquina de quejas, debemos comunicar las cosas que nos molestan. Este consejo nos permitirá expresar a las personas con las que vivamos las conductas, hábitos o manías que nos parecen trascendentes y que nos molestan. Permitirá que el otro sea conocedor de ello y facilitará la posibilidad de cambio.
5. Agradecimiento
Sé agradecido y da las gracias. Es algo que nunca sobra y en estos momentos menos todavía. Nuestros compañeros de convivencia serán conscientes de que agradecemos los esfuerzos que realizan durante estos días.
Además, el agradecimiento es clave para que las cosas que funcionan sigan haciéndolo, te darás cuenta de lo que aprecias y a la persona con la que convives le gustará, lo valorará y podrá seguir haciéndolo.
6. Activación
Nuestra falta de contacto con la calle va a hacer que aumente la ansiedad. La importancia de mantenerse activo es clave a la hora de estar saludables, evitar el contagio del COVID-19 y asegurar la convivencia.
Debemos buscar un rato en casa para poder dedicarlo al ejercicio físico. No necesitamos un gimnasio, ni un espacio abierto. Con una esterilla y ropa de deporte será suficiente. Sentadillas, flexiones, abdominales o incluso una bici estática harán que no caigamos en la falta de actividad y nos proporcionarán la energía que nos hace falta.
7. Evitar la sobrecarga informativa
Durante el aislamiento domiciliario nos enfrentamos a una sobrecarga informativa que puede generarnos gran ansiedad.
Para cuidarnos, debemos alternar los momentos en los que vemos y leemos noticias sobre el coronavirus con momentos de pura desconexión en los que la televisión está apagada y dedicamos nuestro tiempo a la realización de actividades que nos mantengan alejados de pensar en la pandemia.
8. Novedad
En estos momentos de falta de refuerzo, una novedad va a tener mucho impacto emocional en nuestro día a día.
Este octavo consejo se basa en cambiar pequeñas acciones y hábitos que muestren una novedad todos los días y nos alejen de la monotonía y el aburrimiento.
9. Alimentación
Es muy fácil caer en la dejadez y comenzar a picar entre horas. Para evitar que el estado de alarma nos haga comer sin control debemos mantener horarios y la rutina habitual. Acostarse y levantarse a la misma hora o establecer horarios de alimentación que vayamos a cumplir, son la mejor manera de cerciorarse de llevar una alimentación equilibrada y saludable.
Establecer un horario para las tres comidas del día va a ser el pilar fundamental para regular todo nuestro día. Nos va a dar un orden que agradeceremos a lo largo de este periodo y cuando todo vuelva a la normalidad.
10. Desconexión de la tecnología
El estado de alarma por el coronavirus puede ser también una gran oportunidad para desconectar de pantallas y móviles y aprovechar para hacer actividades en familia que fortalezcan nuestros vínculos.