Ocho restaurantes en la nieve: conceptos gastro, con vistas y a pie de pista
Ocho establecimientos de montaña para ‘aparcar’ por un rato los esquíes sin dejar de disfrutar de la nieve
Si bien ésta está siendo bastante irregular hasta el momento, cada temporada de nieve son muchos los restaurantes que abren sus puertas con las primeras nevadas y la llegada de los primeros aficionados. Porque el escenario idílico que muestran los destinos de esquí es incomparable y por eso mucha la oferta culinaria que se congrega en torno a las pistas o a pie de pistas los más afortunados.
Es el caso de los pop-up (locales de ‘quita y pon’) que determinadas marcas habilitan durante la temporada para dar absoluto protagonismo a sus productos en un ambiente distendido, animado, a un público receptivo. Pero también son varios los restaurantes de referencia imprescindible en las distintas estaciones de esquí del país, lugares que en algunos casos permanecen abiertos durante todo el año si bien estos meses de invierno son su mejor temporada… cuando la nieve aparece en tiempo y forma, esto es, con la cantidad necesaria.
Hacemos un recorrido por algunas de esas pistas a través de ocho de los locales con encanto –por distintas razones– ubicados en el mejor lugar de esas estaciones de esquí. Lugares muy apetecibles, en un escenario insuperable, para comer o cenar una vez te quitas los esquíes pero sin abandonar la nieve.
Beso Sierra Nevada
Beso Beach nacía en Formentera hace doce años como un chiringuito de playa de lo más cool y el concepto se ha extendido a distintas zonas de costa culminando en las montañas de la granadina Sierra Nevada. Porque Beso tiene su más reciente localización en el lujoso hotel The Mountains (spa al aire libre incluido) con vistas sobre el valle. Se trata de un pop-up invernal con muy buen ambiente, música en directo y una oferta culinaria vasco-mediterránea en la que destacan populares guisos para reponer energías después de esquiar con platos de cuchara y elaboraciones a la parrilla como principales. Está situado a pie de pistas y a pocos minutos del telesilla.
Cinco Jotas Grill Baqueira
Otra dirección gourmet de temporada con el producto ibérico como absoluto protagonista…claramente deducible del nombre. En su caso se localiza en el leridano Valle de Arán, en la afamadísima estación de Baqueira Beret, un emplazamiento en el que confluyen establecimientos de toda índole. Pero lo dicho, este Cinco Jotas es otro pop-up de temporada a 1800 metros de altura, enclavado en la nieve y donde el jamón ibérico de bellota de Jabugo es la estrella. A partir de aquí, en la cocina manda la tradición y en el local unas impresionantes vistas panorámicas a las montañas que no dejan indiferente a nadie.
El Bosque (Cerler)
Aquí te tienen que subir pero El Bosque, a 2.100 metros de altitud, es de los restaurantes más apetecibles y solicitados por quien sube al Pirineo Aragonés. En el Valle de Benasque (Huesca), rodeada de imponentes picos en un paraje único y mágico, este restaurante es una cabaña de piedra en mitad de la nieve, acogedora, rodeada de pinos y a la que se accede mediante una máquina pisa nieves preparada para transportar a los clientes. Porque aquí se puede comer y cenar, y es ese momento nocturno el más impresionante por lo que allí arriba te rodea y la cantidad de estrellas que se pueden contemplar. Dentro, recomendable cocina casera en la que sus pizzas, también de elaboración propia, son de lo más exitosas.
Restaurante Lobo (La Pinilla)
Ideal para los días de invierno porque en esta casa la leña y las brasas son las protagonistas. En la estación segoviana de La Pinilla, en la Sierra de Ayllón, a unos 1.500 metros de altura, es una muy pequeña pista pero donde los aficionados a la nieve pueden ir a matar el gusanillo. Y una vez se ‘bajen’ de sus esquíes, en Lobo tienen una oferta para el nivel de implicación que a uno le apetezca porque la propuesta gastro es bien amplia. En la mesa, productos de temporada, de proveedores locales, y en el apartado carnívoro, su fuerte, carnes de distintos tipos, razas y maduraciones, para las que emplean diversidad de carbones y maderas en el momento de prepararlas. También vistas ‘maravillantes’ por el paisaje natural que acompaña desde cualquier rincón del establecimiento.
Restaurante Hotel Maribel (Sierra Nevada)
También en la pista granadina, un hotel de ensueño, con una localización ídem y un elegante Lounge Bar para pasar las horas sin prisas, sólo mirando, disfrutando. A más de 2.200 metros de altitud, desde las pistas de Sierra Nevada al interior de este lujoso chalet alpino sin desplazarse un palmo, porque está enclavado sobre las mismas; de hecho tiene acceso directo a dos pistas, Maribel y Águila. Abren a partir de las siete de la tarde y sólo ofrecen servicio de cena. La propuesta culinaria, producto de temporada y platos alpinos.
Möet Chandon Winter Lounge (Baqueira)
De nuevo en la pista leridana, el toque glamuroso vuelve cada temporada de esquí a la terraza Moët & Chandon Winter Lounge. En su caso a 1.800 metros, y un espacio pensado para compartir al atardecer en un entorno completamente nevado.
Por cierto, como plus VIP la posibilidad de reservar una cabaña de madera para disfrutar del champagne en la mayor privacidad. Aunque sin necesidad de llegar a esto, en su animada terraza un DJ ameniza las tardes mientras tomas unas burbujas con un picoteo informal. Sin duda, uno de los place to be de Baqueira donde al caer la noche se puede contratar una cena privada, con un menú cerrado y por supuesto champagne.
Casa Vero Los Ibones (Astún)
En la estación invernal de Astún es la bodega Viñas del Vero (DO Somontano) la que regresa a la nieve cada temporada. Su propuesta de après ski en el Pirineo Aragonés, a más de 2.000 metros de altitud, se llama Casa Vero Los Ibones, una terraza en la que da a conocer sus vinos en compañía de sencillas opciones sólidas y unas impresionantes vistas panorámicas. La ubicación, un enclave privilegiado en el extremo norte del Valle del Aragón, junto a la divisoria francesa y rodeado de altas cumbres. Ah, para el día 10 de febrero tienen programada una jornada de música en directo para amenizar la visita de todo el que se acerque a esta Casa.
El Chalet Suizo (Sierra Nevada)
También de temporada, abría por primera vez hace poco más de un año a más de 2.500 metros de altitud en las pistas de Sierra Nevada. Un original restaurante dedicado a la gastronomía típica suiza en una también tradicional casa de madera de montaña como las del país alpino, y con una terraza exterior donde las vistas a las montañas resultan impresionantes. Por supuesto, en la propuesta no falta un amplio repertorio de quesos suizos pues ésta es una iniciativa de Quesos de Suiza.
Los locales referidos no responden a interés comercial alguno sino exclusivamente a un criterio profesional.