Así ha regresado la infanta Cristina de Abu Dabi: sola, triste y con su alianza de casada

Las imágenes de la infanta Cristina después del anuncio de su ruptura eran las más buscadas del momento. Desde que salió a la luz el reportaje de Iñaki Urdangarin paseando de la mano con otra mujer que no era la suya, encontrar a la hija mediana del rey emérito era todo un reto.

Después de que el 19 de enero emitieran un comunicado conjunto anunciando la interrupción de su vida matrimonial, surgieron las especulaciones sobre cuál sería el siguiente paso de la hermana del rey Felipe VI. La posibilidad de un viaje a Emiratos Árabes para encontrarse con su padre se daba por hecho, aunque las fechas no estaban claras.

Ha sido la revista ¡Hola! la que publica este miércoles las primeras imágenes de la infanta tras anunciar su ruptura matrimonial. Unas fotografías tomadas el domingo 6 de febrero pasadas las 13:00 horas en el aeropuerto de Zúrich, donde hizo escala para coger un vuelo de regreso a Ginebra.

En las instantáneas se la ve con semblante triste a pesar de la mascarilla, con ropa casual, junto a su pequeño equipaje y con gafas de lectura, muy pendiente del teléfono. Pero quizá lo que más llama la atención es que doña Cristina todavía luce su alianza de casada. Han sido casi 25 años de matrimonio, superando momentos complicados como los que trajo consigo el caso Nóos. Y aunque parece que Urdangarin está de nuevo ilusionado junto a Ainhoa Armentia, la infanta aún no ha dado el paso de pasar página.

La infanta Cristina se reencuentra con su padre

Abu Dabi, y más en concreto la isla de Nurai donde reside el rey emérito, fue el escenario del reencuentro entre padre e hija. Fue una reunión a tres -con la infanta Elena de testigo-, según cuenta Pilar Eyre en Lecturas, durante la que también hubo un momento para hablar de la ruptura del matrimonio de los exduques de Palma de una manera más ‘institucional’.

Pero los primeros momentos fueron los más familiares. No hubo casi palabras, solo un largo abrazo entre un padre que ha vivido el escándalo en la distancia, y una hija que nunca imaginó que viviría esto. Ella confiaba en un cambio de vida ya que todos estaban a la espera de que Iñaki recobrara la libertad definitiva. Y lo que se ha encontrado ha sido que su matrimonio ha dado al traste y su todavía marido ya ha rehecho su vida con una compañera de trabajo.

Hace casi dos semanas que Carlos Herrera pudo reunirse con el emérito, aprovechando su estancia en Abu Dabi. Él mismo contó cómo había sido la conversación que mantuvieron. No hablaron claramente sobre la situación sentimental de la infanta, pero el locutor sí que dio su opinión a sus oyentes: «Los padres cuando ven sufrir a los hijos lo pasan mal y no creo que sea una excepción».

Don Juan Carlos está preocupado por sus nietos

En la reunión no hubo reproches, aunque don Juan Carlos se mantuvo firme en cuanto a los tres puntos que más le preocupan: sus nietos, resolver el tema económico del exmatrimonio y estar al tanto de los movimientos de Urdangarin.

En lo que respecta a sus nietos –Juan Valentín, Pablo Nicolás, Miguel e Irene–, el que peor lo está pasando es Juan, el primogénito, tal y como te contamos en THE OBJECTIVE. El joven lo pasó mal cuando se destapó el caso Nóos, llegando incluso a sufrir bullying en el colegio, lo que provocó que tuviera que ponerse en manos de profesionales.

Además, le transmitió a su hija su descontento con la redacción del comunicado en el que anunciaron la separación, y con la intervención del abogado de su exyerno, Mario Pascual Vives. El letrado respondió a los medios de comunicación tras hacerse oficial la ruptura del matrimonio, quitándole importancia y dejando caer que doña Cristina perdonaría al padre de sus cuatro hijos.

Iñaki Urdangarin, mileurista y con ofertas de trabajo sobre la mesa

La parte económica es quizá la menos llamativa. Cristina e Iñaki se casaron el 4 de octubre de 1997 en régimen de separación de bienes. Y aunque el exjugador de balonmano ahora vive con el sueldo de 900 euros que le pagan en el despacho de abogados en el que trabaja, quien fuera su suegro lo tiene claro: «A ese, ni un duro», dice Eyre que ha manifestado don Juan Carlos.

Pero al rey emérito parece que le quita el sueño cuáles serán los próximos pasos de Urdangarin. El vitoriano continúa con el tercer grado y está a la espera de conseguir la libertad total -algo que podría llegar en unas semanas-. A partir de ahí podría darle un giro a su actual vida laboral con la intención de dejar de ser mileurista y abandonar de nuevo el nido, ya que en estos momentos reside con su madre, Claire Liebaert.

Ofertas no le faltan. Los rumores hablan de la posibilidad de que Iñaki Urdangarin escriba sus memorias por el módico precio de medio millón de euros. La Razón afirmó hace unos días que los proyectos que le han llegado son para ejercer de comentarista deportivo en televisión. A este respecto no se ha filtrado cantidad alguna por la que volvería a estar ligado al mundo deportivo, aunque sea desde la barrera.