La extraña reflexión de Sara Carbonero sobre el peor mes de su vida: la borra poco después
La periodista ha compartido una reflexión sobre uno de los meses que tiene marcado en rojo en el calendario
Gtres
Mayo de 2019 será un mes que Sara Carbonero nunca olvidará, pues marcaron un antes y un después en su vida y también en la de Iker Casillas, su marido por aquel entonces. Vivían felices en Oporto, donde comenzaron una nueva etapa tras la despedida del portero madrileño del Real Madrid y su posterior fichaje por el primer equipo de la ciudad portuguesa. Tenían una vida tranquila, el futbolista militaba en las filas del Porto y la comunicadora cumplía con su agenda profesional en la que los proyectos publicitarios cobraron importancia. Y, mientras, compaginaban sus trabajos con su vida familiar.
Pero llegó el 1 de mayo de ese año y todo cambió. La periodista se encontraba en Cádiz trabajando e Iker acudió a su entrenamiento diario. Minutos después de comenzar se sintió mal y terminó en el hospital tras sufrir un infarto de miocardio. Fueron horas angustiosas como la propia expareja relató después en el documental Colgar las alas. Solo 20 días después Sara recibió un jarro de agua fría cuando se le detectó un tumor de ovario.
Sara Carbonero, ejemplo de resiliencia
Solo el paso del tiempo cura las heridas. Y aunque han sido contadas las veces que la toledana ha hablado sobre su enfermedad, poco a poco, y según ha mostrado en sus redes sociales, ha aprendido a vivir con lo que ha pasado. Lo dejó claro cuando, el día de su cumpleaños el pasado 3 de febrero, dejó en shock a sus seguidores al publicar una fotografía en la que mostraba sus cicatrices.
Su reflexión sobre el mes de mayo, que borra poco después: ¿por qué?
Haciendo gala a su buen hacer con la pluma, Sara reflexionaba hace unos días sobre el mes de mayo dedicándole unas sentidas palabras ‘de reconciliación’, pero, curiosamente, lo borró poco después, sin razón aparente. «Siempre serás el mes de las flores, el de la explosión de la primavera, el del color. Es el del olor a rosa, a lirio, el de buscar esmeraldas. El mes de los días largos, los campos engalanados, el viento en la cara como único peine», empezaba.
En sus versos recuerda los malos momentos, pero mira al futuro con esperanza: «Serás además, desde hace un tiempo, el mes del pellizco en el pecho y el zarandeo, sí, pero también el de los nuevos comienzos, la resiliencia y la fuerza que todos llevamos dentro (…) Siempre serás el mes del renacer y el agradecimiento».
Para ella ahora es el mes «de las ofrendas y las promesas, el que sabe a cerezas y a fresas, el mes de las ferias, las verbenas, las madrugadas con amigos, los atardeceres rojos. El mes que suena a boleros y rondallas», escribe. Utiliza la palabra para ‘plantarle cara’ con decisión: «Mayo. Ya no dueles. Vamos a por ti».
Tres años después, la periodista se bebe la vida
No ha sido fácil llegar hasta donde está. Su imagen es la de una mujer calmada, discreta y muy querida no solo por sus allegados, sino también por los más de tres millones de seguidores que atesora en Instagram. Por eso quiso compartir con ellos lo que le estaba ocurriendo cuando obtuvo el fatídico diagnóstico cuando el padre de sus hijos aún se recuperaba.
«La vida nos ha vuelto a sorprender. Esta vez me ha tocado a mí, esa dichosa palabra de seis letras que todavía me cuesta escribir. Hace unos días en una revisión, los médicos me vieron un tumor maligno del que ya he sido operada. Todo ha salido muy bien, afortunadamente lo hemos pillado muy a tiempo, pero todavía me quedan unos meses de lucha mientras sigo el tratamiento correspondiente», comenzaba escribiendo. «Estoy tranquila y con la confianza de que todo va a salir bien. Sé que el camino será duro, pero también que tendrá un final feliz. Cuento con el apoyo de mi familia y amigos y con un gran equipo médico».
En estos años su vida ha dado un giro de 180 grados. Es una mujer separada, mantiene una excelente relación con Iker Casillas y ambos están volcados en sus dos hijos. Sara Carbonero dejó su trabajo en televisión cuando la familia se mudó a Oporto y ahora triunfa en Radio Marca con su programa, Que siga el baile.
El éxito también la persigue en los negocios. La firma de ropa que fundó con su amiga, la también periodista Isabel Jiménez, sigue captando adeptas. Y parece que en el amor tampoco se puede quejar. Después de una discretísima historia con el cantaor Kiki Morente, ahora todo apunta a que Sara Carbonero sale con el músico Nacho Taboada. Independientemente de si su corazón sonríe, la periodista ejerce de ‘disfrutona’ sacándole el máximo partido a cada minuto del día.
