¿Cuál es el mejor momento del día para tener sexo? Haz caso a tus hormonas
Tu reloj biológico también tiene mucho que decir para facilitar tu relaciones sexuales, aunque no te guste saber la hora
Desde que el mundo es mundo nos hemos preocupado mucho (a veces en exceso) por la salud sexual. Caballo de batalla de las parejas durante siglos, otro de los dilemas es saber cuándo es el mejor momento para mantener relaciones sexuales. Sin embargo, a pesar de lo conveniente es tener sexo al menos una vez a la semana, también existen mejores momentos para hacerlo.
No se trata tampoco de convertir nuestra relación en una ópera rock como si fuera el famoso Cruz de Navajas de Mecano, donde María se moja las ganas en el café y Mario busca cama pero de otra variedad. Ir a la par en una relación es una buena señal para mantener una buena salud sexual, sobre todo cuando hay que tener en cuenta que son las hormonas las que van a mandar en estos cambios.
Nos pese o no, son nuestras hormonas las que en la mayor parte de ocasiones van a decidir por nosotros, y no el libre albedrío con el que pretendemos funcionar a diario. Ellas son las que nos dicen cuando tenemos hambre, ellas son las que nos invitan a irnos a la cama porque nos notan cansados e incluso ellas son las que nos estimulan a la hora de hacer deporte en según que momentos del día.
Hacer el amor o practicar sexo en cierta medida pueden parecer también un tipo de deporte, así que también es conveniente que prestéis atención a este reportaje en THE OBJECTIVE en el que os contábamos cuál es el mejor momento del día para hacer deporte y que veáis por dónde van los tiros para que nos entreguemos a las artes amatorias.
Cuál es el mejor momento del día para tener sexo
Si caemos en topicazos, es posible que fanfarroneamos un poquito y digamos que el mejor momento de tener sexo en el día es cualquier momento o que estamos capacitados para enfrentarnos a esta situación sin importar la hora. Por desgracia, no es así y nuestro cuerpo realmente tiene un mejor momento del día para que el sexo sea, cuanto menos, satisfactorio.
Podríamos pensar que nuestro cerebro y nuestros hormonas están deseando que llegue la última hora de la noche, ya sin preocupaciones, para que nos dediquemos a amar. No faltaría razón a aquellos que piensen que al no tener ninguna otra obligación o tarea después de cenar, además abrigados por el calor de la noche, podríamos tener tiempo de sobra para dedicarnos a mantener relaciones sexuales.
Evidentemente, la teoría así lo avala al final del día no tenemos nada más que hacer (salvo andar con el móvil, un rato de conversación o poner un poco la tele) que dedicarnos al amor. Por desgracia, lo más habitual es que a última hora del día estemos bajo mínimos en cuanto a hormonas y en el momento de más cansancio del día. Queramos o no, vamos a estar hablando de un día largo y cargado de actividad que, generalmente lo único que vamos a evitar, es seguir manteniendo esa actividad.
A eso le podemos sumar el cansancio muscular, un cierto agarrotamiento físico o directamente estar en unos picos de estrés elevados por afrontar el próximo día. Por este motivo, aunque lo más habitual en el mundo sea mantener relaciones sexuales por la noche, generalmente va a ser el momento menos indicado para hacerlo.
Desde que amanece, apetece
Todo lo contrario que pase a primera hora del día (suponiendo que no se nos peguen las sábanas o que nos cueste especialmente levantarnos). Si valoramos uno o uno de los puntos por los cuales mantener relaciones sexuales será mejor a primera hora del día, veremos que tiene bastante sentido. Al final, estamos hablando de un momento en el que estamos realmente descansados (habremos dormido toda la noche) y donde ciertas hormonas como el cortisol o la testosterona empiezan a fluir de manera abundante para despabilarnos.
También el sexo matutino está vinculado un momento del día en el que la presión arterial es más comedida, y en ese mismo sentido también los niveles de estrés son menores, por lo que nos vendría bien secretar un montón de oxitocina y serotonina a costa de este ejercicio saludable según antes de salir de casa.
Pensemos también en ciertos movimientos musculares o articulares que suelen hacerse mientras se practica el sexo, por ejemplo la funcionalidad y ligereza que tenemos en el suelo pélvico a primera hora del día en contraprestación a lo que sería la última hora de la tarde.
Esta es la razón por la que se aconseja aguantar un rato para ir despertando nuestro cuerpo progresivamente y practicar el sexo alrededor de 45 minutos después de habernos despertado. Aunque hay ciertos estudios que avalan a las 7:30 de la mañana como la mejor hora del día para mantener relaciones sexuales. Si no podemos por la razón que sea, tengamos en cuenta que por la noche también es conveniente aprovecharse de ciertas virtudes que secretarían esta serotonina que nos facilitará conciliar el sueño.
Por cierto, no todos son buenas noticias a la hora de hacer el amor a primera hora del día. También tiene sus pequeñas contrapartidas, en este caso es lógico pensar que a primera hora del día tengamos menos ganas de practicar sexo porque la excitación es menor ya que el cuerpo también está despertándose. Por ese motivo, es bastante habitual que la libido a primera hora del día no sea tan intensa como a media tarde o por la noche.
En ese supuesto, también debemos tener claro que no todas las actividades sexuales son iguales en función de la edad o de la condición física, e incluso del momento sentimental que estemos atravesando con nuestra pareja. Por todos estos motivos, damos por supuesto que no todo el mundo puede realizar o tener sexo a primera hora del día, así que se trataría de intentar buscar los horarios que más se adapten a nuestro estilo de vida, pero aprovechando esos pequeños detalles orgánicos que nos van a aportar algo más de vigor sexual.