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¿Pensando en dejar a tu pareja por falta de sexo o coitos insatisfactorios? No eres el único

El sexo no lo es todo en una relación, pero sí es muy importante. De hecho, puede determinar si una pareja dura o si los miembros son felices

¿Pensando en dejar a tu pareja por falta de sexo o coitos insatisfactorios? No eres el único

El sexo no lo es todo en una relación, pero sí es muy importante. De hecho, hay muchas personas que se plantean seriamente dejar a su pareja por insatisfacción en el terreno carnal.

En concreto, según una encuesta de We-Vibe, realizada a 22.315 hombres y mujeres de 15 países, el 41,4% de las mujeres y el 40,9% de los hombres han terminado y/o pensarían terminar una relación si esta no es sexualmente satisfactoria.

Quizá estés pensando lo mismo y por esto estás leyendo estas líneas. O puede que estés preocupado por el inminente final de tu matrimonio debido a la falta de relaciones íntimas. Sea como fuere, hoy abordaremos el tema de la importancia (o no) del sexo en las relaciones de larga duración.

El 41,4% de las mujeres y el 40,9% de los hombres han terminado y/o pensarían terminar una relación si esta no es sexualmente satisfactoria

¿Realmente el sexo es tan importante en una relación?

El sexo, como sabemos, no siempre es necesario, pero puede ser una parte importante de una relación sana y satisfactoria. Su importancia puede variar de un individuo a otro. Algunas personas pueden sentir que tener una conexión sexual con su pareja es absolutamente vital mientras que otros pueden sentir que otros tipos de intimidad y conexión son más importantes. 

A pesar de que hay diferentes gustos, las razones por las que intimar podría ser importante en una pareja son poderosas, sobre todo porque las investigaciones realizadas hasta la fecha sugieren que mantener relaciones sexuales frecuentes puede desempeñar un papel importante en el bienestar general de la pareja, ya que está relacionado con sentir más afecto. Y cuando las parejas experimentan más afecto, también es más probable que tengan relaciones sexuales con más frecuencia.

Es decir, me siento querido y tengo sexo, y porque tengo sexo me siento más querido. Pero si no hay sexo, esa dinámica se rompe (en la mayoría de los casos). A todo esto se suma que intimar de forma regular libera oxitocina, que aumenta la sensación de unión y mejora la intimidad emocional con la pareja. Como resultado, las relaciones íntimas se asocian con una tasa de divorcio más baja.

Sexo

Más beneficios de tener más sexo con la pareja

Además de lo mencionado, gozar de sexo satisfactorio proporciona otros beneficios:

  • Más autoestima : el sexo puede aumentar la autoestima y reducir los sentimientos de inseguridad, lo que lleva a percepciones más positivas de nosotros mismos.
  • Tasas más altas de felicidad: según un estudio de 2015 realizado en China, tener más sexo y de mejor calidad aumenta la felicidad.
  • Más vínculos: durante las relaciones sexuales se liberan sustancias químicas del cerebro, incluidas las endorfinas, que disminuyen la irritabilidad y los sentimientos de depresión. También aumenta la oxitocina, que ayuda a fomentar una sensación de calma y satisfacción.
  • Alivio del estrés: el estrés crónico puede contribuir a una menor frecuencia sexual. Sin embargo, intimar puede ser una técnica efectiva de manejo del estrés, ya que reduce hormonas como el cortisol y la adrenalina (epinefrina), con efectos que duran hasta bien entrado el día siguiente.
  • Mejora de la calidad del sueño: los orgasmos desencadenan la liberación de la hormona prolactina, que ayuda a conciliar el sueño.
  • Mejor condición física. Según la American Heart Association, la actividad sexual es equivalente a realizar actividades físicas moderadas, como caminar a paso ligero o subir dos tramos de escaleras. Asimismo, intimar suele tensar y tonificar los músculos abdominales y pélvicos. 
  • Pérdida de peso: relacionado con lo anterior, tener relaciones sexuales durante 30 minutos quema un promedio de 200 calorías, y las sustancias químicas cerebrales que se liberan pueden calmar los antojos de alimentos y calóricos.
  • Mejor sistema inmunológico: el sexo regular puede incluso reducir la probabilidad de contraer un resfriado o gripe.
  • Una mejor función cerebral: los estudios preliminares en ratas hallaron que mantener relaciones sexuales frecuentes se asocian con una mejor función cognitiva y con el crecimiento de nuevas células cerebrales. Desde entonces, se han observado beneficios similares en estudios con humanos. De hecho, un estudio de 2018 vinculó el sexo frecuente con un mejor rendimiento de la memoria en adultos mayores de 50 años.

Entre muchos otros…

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Entonces, ¿cada cuánto hay que hacerlo?

Ahora que sabemos que tener relaciones íntimas es bueno, tanto para nosotros como para la pareja, ¿cuánta cantidad es la necesaria? Según dos estudios, ‘lo normal’ es hacerlo una vez a la semana.

Así lo determinó un estudio realizado por YouGov, que detalló que más de una quinta parte de los españoles mantenía relaciones sexuales una vez a la semana, mientras que el porcentaje de aquellos que practicaban sexo todos los días era de un 2%. En cuanto a la periodicidad de las relaciones sexuales por género, el porcentaje de hombres que tenía sexo una vez a la semana se elevó hasta el 24%, un valor que representaba una diferencia de seis puntos porcentuales con respecto al de las mujeres.

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El estudio Ulises, por su parte, elaborado por la empresa My Word, analizó los hábitos sexuales de los españoles y llegó a las mismas conclusiones: que en nuestro país lo hacemos una vez a la semana. La mayoría de los encuestados dijo que prefería tener relaciones en pareja (74%), pues consideraban que el sexo es mejor cuando existen vínculos de afecto.

Esta encuesta también descubrió que los más activos sexualmente oscilaban entre los 35 y los 44 años. De hecho, en esta franja de edad el 29% aseguraba tener sexo entre tres y cuatro veces por semana.

¿Y si mi pareja y yo lo hacemos menos pero estamos satisfechos?

La satisfacción sexual depende principalmente de dos cosas para la mayoría de las parejas: de la calidad del sexo y de la frecuencia con la que lo tienen.

La cantidad de sexo es un término relativo, ya que varía de una pareja a otra. «El sexo engloba muchas cosas, como el sexo oral, la estimulación de los genitales, los besos y las caricias. Para algunos, la estimulación genital puede contar como sexo, mientras que para otros puede no contar como un acto sexual. También varía según la edad de la persona y la relación. Normalmente, la frecuencia sexual de una pareja tiende a ser mayor en las primeras etapas, mientras que disminuye gradualmente con el tiempo. Sin embargo, cuando se habla de cantidad, la frecuencia del sexo que conduce a la satisfacción varía de una pareja a otra», detalla con acierto el sexólogo Satinder Singh.

La mayoría de los estudios revelan que las mujeres se inclinan más por la calidad del sexo y los hombres prefieren la cantidad

En cuanto a la calidad del sexo, significa esencialmente la gratificación y satisfacción que uno experimenta durante y después de las relaciones sexuales. «La calidad del sexo está relacionada con sentimientos de bienestar y mayores niveles de amor por la pareja. La comunicación juega un papel importante en este sentido, como decidir las posiciones sexuales que conducirían a una mayor satisfacción. Tener compromisos como salirse de lo habitual y experimentar de acuerdo con los deseos de la pareja también puede ayudar a mejorar la calidad del sexo», apunta el experto.

Así, pues, ¿qué es mejor? ¿Calidad o cantidad? «La mayoría de los estudios revelan que las mujeres se inclinan más por la calidad del sexo y los hombres prefieren la cantidad», asegura el sexólogo, que apunta que «en realidad, todo depende únicamente de los miembros de la pareja y de sus preferencias».

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Así que, ya sabes, si quieres hacerlo más, no dudes en hablarlo con tu pareja, pues razones hay de sobra. Lo normal es tener sexo una vez a la semana, pero si lo hacéis menos y estáis contentos con esa frecuencia, todo bien, ya que cada pareja tiene sus normas y reglas.

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