Alimentos que alivian las náuseas por embarazo

Las náuseas y los vómitos son algo común durante el embarazo. Es más, el cálculo es que casi 7 de cada 10 embarazadas las padecen durante el primer trimestre de gestación. El nombre que suelen recibir es el de náuseas matutinas, pero la realidad es que pueden ocurrir en cualquier momento del día. Además, también pueden ir y venir durante los diferentes trimestres, sin limitarse sólo al primero.

Su origen no está del todo claro, pero la teoría es que los cambios hormonales que tienen lugar durante esa primera etapa del embarazo están muy relacionados con las náuseas. Aparte de esto hay que tener en cuenta el hecho de no dormir bien o la sensación de cansancio. Ambas son muy comunes durante el primer trimestre del embarazo y acentúan el primer síntoma.

En este contexto, conocer formas de lidiar con las náuseas es algo que puede ayudar a sobrellevarlas mucho mejor. La nutricionista y doctora en Ciencias de la Educación y el Deporte Sonia Ruiz, del Centro Médico Teknon y de la Clínica Mi Tres Torres, explica a Saber Vivir TVE algunas claves para hacerlo.

La hidratación y los alimentos son clave para regular las náuseas

Una de las principales formas de evitar este molesto síntoma es mantener una hidratación correcta. Tomar un litro y medio de agua, repartido a lo largo del día y en pequeños sorbos, ayudará con las náuseas. Otro factor fundamental es cuándo comer y qué incluir en los platos.

Hay que intentar evitar los alimentos con un alto contenido en grasa, así como las técnicas de cocción como los rebozados o los fritos. Estos harán las digestiones más lentas y favorecerán la aparición de náuseas. Por otra parte, es bueno comer cinco veces al día, pero en pequeñas cantidades. Hay que masticar bien los alimentos, cenar temprano y no olvidar nunca el desayuno. Además de esto, existen una serie de alimentos que pueden ayudar a reducir estos síntomas:

Manzana

Ingerirla fresca puede que no sea muy bueno para el estómago, pero asada la tolerará mucho mejor. Es posible añadir un poco de canela, lo que no sólo le dará más sabor sino que también ayudará a disminuir las náuseas.

Los frutos secos son buenos para las náuseas

Este tipo de comida es perfecta para llevarla en el bolso y comer si las náuseas aparecen en un momento no previsto. Da igual el tipo: almendras, cacahuetes, avellanas… Un puñadito servirá para reducir la sensación de malestar gracias a su contenido en vitamina B6 (piridoxina).

Cereales integrales

Los arroces y las pastas en su versión integral, aliñadas con un poco de aceite de oliva y con hierbas aromáticas, son alimentos fáciles de digerir y ayudan a asentar el estómago. Otra opción para combatir las náuseas es la patata cocida.

Pan tostado

Otro truco muy útil es tomar un poco de pan tostado antes de salir de la cama. Esto ayuda a absorber el exceso de ácido gástrico que se produce durante la noche, evitando las náuseas matutinas. Igual que con todas las comidas, es importante masticarlo y comerlo despacio.

Semillas de calabaza

Es una gran fuente de zinc, igual que el plátano o el germen de trigo. Este mineral es antioxidante y antiemético, por lo que reduce las náuseas y combate el vómito. Una forma de comerlas es añadiendo un puñado a las ensaladas o incluso en las cremas de verduras.

Infusión de menta

Esta planta cuenta con propiedades medicinales como combatir la sintomatología de las náuseas, los espasmos intestinales y el mal aliento. Hay que tener en cuenta, no obstante, que no hay que tomar más de dos tazas al día y que siempre hay que consultar con el médico antes de tomar plantas medicinales durante la gestación.

Zumo de limón casero

Una de las propiedades de este fruto ácido es que neutraliza los ácidos del estómago. Para prepararlo hay que exprimir medio limón y añadirlo a un vaso de agua.

Una de las propiedades del jengibre es aliviar las náuseas

La Organización Mundial de la Salud señala los beneficios del jengibre durante el embarazo como forma de prevención y alivio de las náuseas y vómitos. Es posible tomarlo en infusión o directamente la raíz, rallada o cortada en trocitos, como complemento a los platos.

No es aconsejable superar los dos gramos de consumo al día durante el primer trimestre de embarazo; en el último es mejor no tomarlo. También ayuda a mejorar la digestión y tiene un gran poder antiemético pero, como en todos los casos, es necesario consultar con el médico antes de tomarlo.

Plátano

Además de ser muy rico en zinc también tiene mucho contenido de potasio, lo que ayuda a evitar la retención de líquido. Esto llevará a sentirse más ligera.

Germen de trigo

Como la carencia de zinc favorece la aparición de náuseas, el germen de trigo es otra buena opción para conseguir este mineral. Una opción para comerlo es añadir una cucharadita a un yogur y tomarlo como tentempié.

Los cubitos de hielo ayudan con las náuseas

Hay embarazadas a las que el chupar un cubito de hielo les ayuda a calmar las ganas de vomitar. Al hacerlos, además, es posible agregar un poco de zumo de limón y potenciar así su efecto contra las náuseas.

Garbanzos

Estas legumbres son una fuente de fibra que ayuda a regular el tránsito intestinal, lo que es clave para el bienestar digestivo. Además, contienen también mucho zinc, por lo que es aconsejable incluirlos en los menús diarios de forma habitual.

Agua mineral con gas baja en sodio

Es importante comprobar que sea baja en sodio, ya que algunas variedades tienen niveles muy elevados de este mineral. Es desaconsejable, sobre todo, si la embarazada tiene la tensión alta o padece retención de líquidos. Beberla en pequeños sorbos ayudará a combatir las náuseas.

Las uvas pasas son un gran aliado frente a las náuseas

Son ricas en vitamina B6, igual que algunos frutos secos. Por ello, son perfectos para reducir las náuseas y son muy fáciles de comer: añadiéndolas a los platos o incluso tomando unas pocas solas cuando empiece a aparecer el síntoma.