Cómo elegir la solución más eficaz contra la acumulación de grasas en el abdomen
Terminar con la tripa puede ser una tarea difícil pero los tratamientos estéticos son la ayuda ideal a las dietas y el deporte
Una de las mayores preocupaciones estéticas es la grasa acumulada en la zona del abdomen. Puede llegar a ser todo un quebradero de cabeza ya que, en algunas ocasiones, la suma de alimentación saludable y ejercicio no resulta efectiva por completo. En los últimos días del verano, y con los excesos que van ligados a las vacaciones, volvemos a ser conscientes del problema.
La grasa del abdomen es un problema que preocupa tanto a hombres como a mujeres pero no se puede generalizar. Existen distintos tipos de casos y, por tanto, las soluciones tienen que adoptarse de manera personalizada. El abdomen con grasa localizada es el más popular, seguido por la tripa con flacidez. También nos podemos encontrar con la típica barriguita con hipotonía muscular o la aparición de celulitis.
«Además del tipo de alimentación, en el aspecto, forma y definición del abdomen influyen otros muchos factores: el envejecimiento corporal, la genética, las alteraciones hormonales, salud intestinal, postura, alteraciones de espalda, estilo de vida, embarazos o tonificación muscular», comentan las Dras. Mar Mira y Sofía Ruiz del Cueto.
Lo primero que tenemos que hacer para ponerle solución y conseguir el abdomen que queremos es saber identificar cuál es nuestro caso. Después, podremos diseñar un plan de ataque para lo que nos será de gran ayuda confiar en profesionales que seleccionaran y combinarán los mejores tratamientos para tonificar y reducir el volumen de la tripa. Para ayudarte en la tarea, las expertas hablan para THE OBJECTIVE para explicarnos detalladamente en qué consisten los cuatro tipos de abdomen y cuál es la solución más efectiva para cada uno de ellos.
Abdomen con grasa localizada
Como comentábamos al inicio, se trata de una de las tripas más frecuentes. Se puede identificar muy fácilmente porque «el abdomen con grasa localizada es globuloso en la zona frontal y aumenta el contorno corporal en los flancos laterales», indican las expertas de la Clínica Mira + Cueto. Para entendernos, es ese tipo de barriga a la que comúnmente llamamos flotador.
Las causas que favorecen la aparición de este tipo de abdomen son varias. Una de la que más influyen es una mala alimentación, desequilibrada y con muchas calorías. Son dietas en las que se abusan de los hidratos de carbono, los productos ultraprocesados y las grasas, tanto en las comidas como en las cenas. También influye mucho el estrés que será responsable de aumentar la producción de cortisol. En el caso de las mujeres, una tercera causa la encontramos en la menopausia. En este periodo disminuyen las hormonas femeninas y predominan las masculinas, de ahí que la grasa se redistribuya y se acumule en el abdomen y los flancos laterales.
Ante este panorama, las expertas recomiendan un plan que combine tres técnicas que ofrecen espectaculares resultados. Se arranca con infiltraciones con lipolíticos cuya finalidad va a ser eliminar la grasa. «Actúa como un detergente y elimina todo aquello que considera tóxico para dejar la tripa limpia y plana», explican. Se recomiendan tres sesiones separadas entre sí entre dos y tres meses. El precio por sesión es de 120€.
Podemos continuar con Body Prime. Es un tratamiento con radiofrecuencia combinada con ultrasonidos que, además de reducir la grasa, tonifica la piel. En este caso, lo que se recomienda es llevar a cabo unas seis sesiones cada una o dos semanas. El coste es de 210€ por sesión.
Por último, es necesario un coaching nutricional que ajustará nuestra dieta a los cambios que puedan estar asociados a la edad o a los cambios hormonales. El precio de contratar los servicios de estos expertos ronda los 95€.
Abdomen con celulitis
Cuando la celulitis hace su acto de presencia en el abdomen suele aparecer por debajo de la zona del ombligo. «Aparecen irregularidades en el aspecto de la piel en forma de nódulos dando el aspecto conocido como piel de naranja», señala la Dra. Mar Mira.
La celulitis en la tripa puede aparecer también por distintas causas. La genética, cambios hormonales o alteraciones circulatorias son algunos de los factores que no podemos prevenir. Sin embargo, existen otros como fumar, tomar alcohol, hacer poco ejercicio o seguir una alimentación basada en alimentos proinflamatorios en los que todos podemos trabajar para adelantarnos al problema.
Si los consejos llegan demasiado tarde, es hora de confiar en la medicina estética. Se puede recurrir a un drenaje linfático manual que active la circulación y sirva para drenar el cúmulo de toxinas. A un precio por sesión de 75 euros, para lograr un resultado perfecto pueden llegar a hacer falta hasta diez sesiones semanales.
La mesoterapia también es una buena opción. Es un tratamiento drenante, anticelulítico y lipolítico al que podemos recurrir para acabar con los cúmulos de celulitis. Esta opción también requiere de llevar a cabo diez sesiones semanales. El precio de cada una de ellas es de 85€.
La Carboxiterapia es un tratamiento que sirve para activar la circulación y con el que lograremos mejorar la calidad y la elasticidad de la piel. El precio se encuentra en un término medio de 80 euros y las expertas también aconsejan diez sesiones semanales. Por último, también nos podemos apoyar en el recurso del coaching nutricional para cambiar nuestros hábitos alimenticios y abrazar una dieta equilibrada que nos ayude a conseguir más rápido el abdomen que deseamos.
Abdomen con flacidez
La pérdida de colágeno debido al envejecimiento va produciendo un adelgazamiento de la piel que termina perdiendo su elasticidad. Debido a este proceso natural aparece la flacidez y la zona del abdomen es una de las áreas corporales propensas a sufrirla. «El abdomen suele tener una piel fina, atrófica, que va formando pliegues en la zona supraumbilical dando como resultado el famoso ombligo triste y caído», señala la Dra. Mar Mira.
Además de la edad, los causantes de la aparición de este tipo de tripa puede ser una alimentación basada en un exceso de azúcares y falta de proteínas o la falta de práctica de ejercicio. No es recomendable tampoco una exposición solar excesiva ya que favorece que se activen las metaloproteínas que desestructuran el colágeno. También influye mucho los cambios bruscos de peso que se pueden producir al desarrollar una dieta o después de un embarazo. En la mujer, también afecta los cambios hormonales vividos durante la menopausia.
Para las tripas con flacidez, podemos recomendar un tratamiento de radiofrecuencia que sirve para estimular la producción de colágeno. Lo ideal sería llevar a cabo seis sesiones cada tres semanas. Cada una de ellas tienen un coste de 120 euros.
Otra solución que se puede combinar son los hilos tensores corporales con Ácido Hialurónico. Colocados estratégicamente estimularán el colágeno alrededor del abdomen logrando compactar la piel y terminar con la flacidez. Si optas por esta alternativa, el coste es de 300 euros y sería suficiente una o dos sesiones al año. De manera anual también podemos recurrir a los ultrasonidos de Ultherapy que tienen el mismo objetivo de generar colágeno y tensar la zona al máximo. Su precio ronda los 665 euros.
Abdomen con hipotonía muscular
Tras esta nomenclatura tan profesional se esconden esas tripas que tienden a abombarse. «Suele producirse bajo la zona del ombligo y se debe a una pérdida en la tensión muscular», señala la experta. Suelen ser un abdomen blanco donde existe una falta de firmeza y tonificación.
Las causas también son variadas, como una mala educación o un estilo de vida sedentario, pero suele ser un caso muy común durante el postparto. Después del embarazo se suele tener un abdomen más flácido por la distensión que ha sufrido la piel y, en ocasiones, se produce una separación de los músculos abdominales que son los que provocan esa hipotonía muscular.
Para este tipo de abdomen, la expertas recomiendan un tratamiento de electroestimulación que endurezca la zona y tonifique el área de la barriga. Este tipo de sesiones cuestan 55 euros y sería recomendable llevar a cabo una decena con una periodicidad semanal entre ellas. Si nos fijamos en la dieta, debemos de aumentar la ingesta de proteínas para favorecer la creación y fijación de la masa muscular. También ayudará la práctica de ejercicio físico donde destacamos los abdominales hipopresivos. Además de fortalecer el abdomen, son muy recomendables para mejorar la salud postural, respiratoria, vascular y metabólica.
Si una de las zonas críticas de tu silueta es el abdomen, aprende a identificar cuál es tu caso para saber cuál es la mejor solución para terminar con el problema.