El ejercicio infalible que te permitirá dejar de roncar, según el doctor Fernando Montero
Los ronquidos se producen cuando los músculos de la garganta se relajan demasiado durante el sueño
Persona dormida. | Shane Unsplash
El hecho de roncar constituye un problema que afecta a millones de personas en todo el mundo. No solo es molesto para quienes duermen cerca de alguien que ronca, sino que también puede ser una señal de problemas de salud más serios, como la apnea del sueño. Afortunadamente, existen soluciones para mitigar o incluso eliminar los ronquidos, y una de las más efectivas es realizar ejercicios específicos para fortalecer los músculos de la garganta.
El ronquido es un problema común, pero no es algo con lo que tengas que vivir para siempre. Incorporar algunos ejercicios en tu rutina diaria puede marcar una gran diferencia en la calidad de tu sueño y en la de quienes te rodean. Si eres constante y combinas este ejercicio con otros cambios en tu estilo de vida, estarás en el camino indicado para llegar a dejar de roncar y disfrutar de noches de sueño más tranquilas con un descanso más profundo y reparador.
Los ronquidos
Antes de entrar en detalles sobre el ejercicio, es importante entender porque roncamos. Los ronquidos se producen cuando los músculos de la garganta se relajan demasiado durante el sueño, lo que provoca que las vías respiratorias se estrechen o incluso se bloqueen parcialmente. Al inhalar, el aire pasa a través de esta abertura estrecha, lo que genera vibraciones en los tejidos blandos de la garganta. Estas vibraciones son las que producen el sonido característico del ronquido.
Varios factores pueden contribuir a que los músculos de la garganta se relajen en exceso, como el consumo de alcohol, el sobrepeso, el fumar, el dormir de espaldas y la edad avanzada. Además, algunas personas son más propensas a roncar debido a la anatomía de su garganta, lengua y paladar.
La importancia de los músculos de la garganta
Para reducir los ronquidos, es crucial fortalecer los músculos de la garganta. Al tonificar estos músculos, se reduce la posibilidad de que se colapsen o se relajen en exceso durante el sueño. Existen diversos remedios naturales como el aceite de oliva o el romero, aunque sus efectos son más lentos. También hay ejercicios de acupuntura que son beneficiosos para combatir este problema.
Sin embargo, el ejercicio que realmente puede ayudarte a lograr tu objetivo de olvidarte de los ronquidos es el recomendado por el doctor Fernando Montero, que cuenta con un postgrado en medicina por la Universidad de Harvard, y está destinado a fortalecer los músculos de la garganta y la lengua.
Según el doctor Montero el fortalecimiento de la lengua y los músculos circundantes puede tener un impacto significativo en la reducción de los ronquidos. Este ejercicio es sencillo, se puede realizar en cualquier lugar y no requiere equipo especializado. Lo mejor de todo es que, con constancia, puede ofrecer resultados sorprendentes.
El ejercicio infalible
El ejercicio que muchos expertos consideran infalible para reducir los ronquidos se centra en la posición y el fortalecimiento de la lengua. Para realizarlo tendrás que sentarte adoptando una postura cómoda y relajada. Asegúrate de mantener la cabeza erguida y los hombros relajados. Coloca la punta de la lengua contra el paladar, justo detrás de los dientes frontales superiores. Y asegúrate de que toda la lengua esté en contacto con el paladar.
Una vez que estás en posición, comienza a realizar el ejercicio. Para ello, sin despegar la lengua del paladar, deslízala lentamente hacia la parte posterior de la boca. Mantén esta posición durante unos segundos. A continuación, relaja la lengua y repite el movimiento entre cinco y diez veces. A medida que adquieras más práctica, puedes aumentar el número de repeticiones. Este ejercicio ayuda a fortalecer la lengua y los músculos del paladar blando, lo que puede reducir la probabilidad de que las vías respiratorias se obstruyan durante el sueño.
Otros ejercicios
Además del ejercicio de la lengua, existen otros ejercicios que pueden complementar tu rutina y ayudar a reducir los ronquidos. Algunos de ellos consisten en: repetir la vocal «A» en voz alta durante tres minutos seguidos, intentando que la garganta vibre. Este ejercicio ayuda a tonificar los músculos de la parte posterior de la garganta.
Otro ejercicio se basa en tapar el orificio de una de las fosas nasales con un dedo e inhalar aire profundamente por la otra. Luego, se cambia de lado. Este ejercicio fortalece los músculos de las fosas nasales y puede mejorar la respiración. Otra opción se basa en imitar el movimiento de masticar con la boca cerrada durante uno o dos minutos. Esto fortalece los músculos de la mandíbula y la garganta.
La importancia de la constancia
Como en cualquier rutina de ejercicios, la clave del éxito es la constancia. Aunque los ejercicios para dejar de roncar son simples y pueden realizarse en cualquier momento del día, es fundamental practicarlos regularmente para obtener resultados. Lo ideal es hacer estos ejercicios unas tres veces al día. Al igual que con cualquier otra forma de ejercicio, los músculos necesitan tiempo para fortalecerse y adaptarse.
Además, es importante recordar que estos ejercicios no solucionarán el problema al instante. Los cambios pueden ser graduales, pero con perseverancia, muchas personas han notado una notable reducción en sus ronquidos e incluso la eliminación completa de los mismos.
Cómo reducir los ronquidos
Aunque los ejercicios de la lengua y la garganta son altamente efectivos, también es beneficios adoptar otros cambios en el estilo de vida que pueden contribuir a reducir los ronquidos. El exceso de peso, especialmente alrededor del cuello, puede aumentar la presión sobre las vías respiratorias y contribuir a los ronquidos. También, el consumo de alcohol relaja los músculos de la garganta, lo que puede aumentar la probabilidad de roncar. Además, dormir boca arriba puede hacer que la lengua caiga hacia atrás y obstruya las vías respiratorias.
