Donald Trump ha cambiado su discurso tras ser acusado de negar la crisis sanitaria en Estados Unidos, defendiendo ahora el uso de mascarillas como un gesto «patriótico» en vísperas de que la Casa Blanca retome las conferencias de prensa sobre la COVID-19[contexto id=»460724″].
Por qué te lo contamos: Trump ha rechazado el uso de la mascarilla en anteriores ocasiones desestimando, así, la gravedad de la pandemia, que deja en Estados Unidos 140.000 muertos. Las criticas contra el mandatario han arreciado ante un importante rebrote de los casos en los poblados estados del sur y oeste del país, en particular Florida.
Tras desestimar la gravedad de la pandemia -que deja en estados Unidos 140.000 muertos- y apostar a una «desaparición» del virus, las criticas contra el mandatario han arreciado ante un importante rebrote de los casos en los poblados estados del sur y oeste del país, en particular Florida.
Este aumento del contagio en estados clave para llegar a la Casa Blanca, como Texas o Florida, obligó al mandatario a un replantear su discurso y a recomendar el uso de la mascarilla, algo que no había hecho hasta el momento. «Estamos unidos en nuestro esfuerzo para vencer el invisible virus de China y muchas personas dicen que es patriótico usar una mascarilla cuando no puede haber distanciamiento social», ha escrito en su cuenta de Twitter junto con una foto en blanco y negro en la que aparece con una mascarilla con el sello presidencial. «¡No hay nadie más patriótico que yo, su presidente favorito!», sentencia. Trump usó por primera vez mascarilla en público el 11 de julio.
Esta actitud de solapado rechazo al babrijo atizó y politizó el debate sobre sobre su porte, algo que deben decidir los gobiernos locales. De esta forma, el domingo Trump invocó la «libertad» individual para no defender la obligatoriedad de su uso a nivel nacional. Además, anunció que va a retomar el martes las ruedas de prensa regulares para informar sobre el coronavirus, que junto al equipo de crisis de la Casa Blanca sostuvo durante los primeros meses de la pandemia, desde marzo hasta fines de abril.
Cuando quedan poco más de 100 días para las elecciones, las críticas contra la política de Trump para combatir el coronavirus han comprometido sus aspiraciones de reelección, con las encuestas otorgando ventaja a su rival demócrata Joe Biden.