Eliminar la 'golden visa' como propone Errejón apenas afectaría a 136 viviendas de extranjeros
Las oficinas consulares apenas expidieron 136 visados por inversiones en inmuebles en 2022, según datos facilitados por Exteriores
La demanda de vivienda por parte de extranjeros ha tenido un papel protagonista durante 2022. Se trata de un sector que ha recuperado su dinamismo una vez que las restricciones de movilidad geográfica a causa de la covid han ido finalizando, con especial protagonismo de los ciudadanos europeos.
Al margen de este tipo de compraventas, desde 2013 la inversión en inmuebles tenía otro atractivo para los extranjeros no comunitarios. El Gobierno de Mariano Rajoy, dentro de su ley de apoyo a los emprendedores y su internacionalización, aprobó las llamadas ‘golden visa’ o visados dorados. Es decir, los no comunitarios pueden conseguir el visado de residencia haciendo una inversión inmobiliaria igual o superior a los 500.000 euros o realizando una aportación significativa de capital en deuda, fondos, acciones o depósitos.
En el punto de mira
Estos son unos visados que están en el punto de mira en algunos países. El pasado 1 de enero Justin Trudeau, el primer ministro de Canadá, aprobó una ley a través de la cual se prohíbe a los extranjeros la compra de un inmueble en el país. El objetivo de esta medida es detener el aumento de precios de la vivienda. En España, con un mercado inmobiliario también cada vez más tensionado, ha sido Más País el que ha propuesto una medida similar.
Mas País-Verdes Equo registró hace unos días una proposición de ley en el Congreso para eliminar los permisos de residencia a los extranjeros no comunitarios que compren una vivienda por valor de 500.000 euros.
Sin embargo, el año pasado, las oficinas consulares apenas expidieron 136 visados por inversiones en inmuebles, según datos facilitados por el Ministerio de Asuntos Exteriores a THE OBJECTIVE. Esta cifra supone un desplome del 72% con respecto al año 2021, cuando España expidió 497 visados de este tipo, según estos mismos datos. El hundimiento de estas concesiones es aún más pronunciado al compararlo con las cifras previas a la pandemia, ya que en 2019 se expidieron 681 visados de este tipo, un 80% más del dato de 2022.
A pesar de estos datos reducidos, el líder de Más País, Íñigo Errejón considera que estos permisos fomentan la «especulación» de los precios de la vivienda en España. Además, sostiene que estos permisos no benefician a la economía nacional y «expulsan a la población local», generando un efecto en cadena «muy negativo» sobre el mercado de la vivienda. «Hay que acabar con este favoritismo», enfatizó, concretamente, el antiguo dirigente de Podemos desde el Congreso.
Una cantidad residual
La demanda extranjera de vivienda ha mantenido su protagonismo durante el cuarto trimestre del año, aunque con un descenso en el porcentaje de compras de vivienda por extranjeros con respecto al máximo histórico del trimestre precedente, según los datos del Colegio de Registradores. Concretamente, el 14,71% de las compras de vivienda han correspondido a extranjeros. De todas estas compras, las ‘golden visa’ suponen una cantidad más que residual, según los datos de Exteriores.
De ellos, los mayores porcentajes durante el cuarto trimestre se han registrado por parte de británicos (10,87%), alemanes (9,23%), franceses (6,44%), rumanos (5,10%), belgas (4,91%), italianos (4,85%), marroquíes (4,82%) y holandeses (4,64%). Todas estas nacionalidades han ganado peso relativo con respecto al trimestre precedente. Es decir, ciudadanos la mayoría comunitarios que no hacen uso de la ‘golden visa’. Por su parte, el precio medio de la vivienda adquirida por los marroquíes es de 640 euros el metro cuadrado.
171.146 euros, importe medio de vivienda
«La medida no tiene sentido, esta medida no va a provocar que baje el precio de la vivienda porque estos compradores no compran un tipo de vivienda normal, sino viviendas mas especiales, que no son las que habitualmente adquieren los ciudadanos españoles», asegura Laura Martínez, portavoz de iAhorro a THE OBJECTIVE.
Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), las viviendas en España suelen tener 83 metros cuadrados de media, con un precio medio de los inmuebles es de 171.146 euros. Esto significa que el hecho de que los extranjeros dejen de comprar viviendas de 500.000 euros no va a tener un impacto general en las viviendas con precio medio. «Este tipo de producto es absorbido por el cliente internacional, ya que el nacional no demanda propiedades con un precio medio tan alto», añade.
Además, al obtener el permiso de residencia, «si estos ciudadanos viven la mitad del año más un día en España, tienen que hacer la declaración de la renta aquí y es dinero que se queda en España. Son personas de poder adquisitivo muy elevado», añade Martínez.
Demanda de lujo
«Los extranjeros compran vivienda porque quieren invertir en España por distintos motivos, pero para la obtención de visado no es significativo para nada», destaca Iñaki Unsain, personal shopper inmobiliario en Barcelona. Unsain explica, en conversación con este diario, que una medida como la propuesta por Errejón no produciría una reducción en los precios al ser algo residual. «Lo que sí que puede ocurrir, y esto es lo mas grave, es que estos anuncios creen incertidumbre y miedo al capital extranjero», añade.
En el último año, tal y como hemos publicado en este diario, las inmobiliarias de lujo asentadas en nuestro país han cerrado con cifras récord gracias fundamentalmente a los extranjeros. Es el caso de la inmobiliaria especializada en este segmento Lucas Fox, que tiene claro que «el mercado español del Real Estate seguirá siendo muy atractivo para los extranjeros, que son nuestro principal target». En su opinión, los compradores extranjeros desempeñarán un papel protagonista este año 2023, en el que la compra para obtener la residencia seguirá siendo residual.