Premios Goya: ¿por qué triunfó 'La sociedad de la nieve'?
«El cine español está, obviamente, muy politizado. Pero los miembros de la Academia no son veinte mil especies de abejas y no funcionan en modo colmena»
Acompañenme en esta triste historia.
Mi hija y yo decidimos ir a los Goya y nos lo planteamos muy en serio.
Queríamos ir GUAPAS, radiantes, glamorosas. El sistema más fácil hubiera sido llamar a algún amigo diseñador y pedirle que nos prestara un modelo, que es lo que hace la mayoría de la gente sensata en estos casos. Pero ni yo soy una persona sensata ni tengo una talla adecuada para entrar en la mayoría de los modelos de los diseñadores de pro. Y mi hija hizo dos trajes.
- Vestido 1.
Con una tela blanca brillante. Fruncido. Hecho a medida. Se supone que no debes llevar blanco cuando estás gorda pero yo ya he dicho que no soy una persona sensata. Me sentaba como un guante , lo juro ( teniendo en cuenta que tampoco es que yo sea una sílfide ni un bellezón).El traje es muy complicado de confeccionar para que quede bien porque se tiene que ajustar muy claramente a tu cuerpo. Es un esfuerzo laboroso que requiere mucha pericia.0Lleva muchas horas cortarlo y coserlo.
- Vestido 2
Hecho a base de latas de bebida energética. Hay que ir haciendo cuadrados de latas con un cúter , luego perforando agujeros y ensamblando los los unos a los otros a partir de un patrón. Es un trabajo complicadísimo, de amanuense que requiere muchas horas y también mucha pericia.
Hay que tener en cuenta que mi hija estudia en la Escuela Superior de Patronaje por las mañanas y que trabaja en una galería de arte por las tardes. De forma que esto lo iba haciendo por las noches. La pobre casi no durmió en dos semanas.
Cuando llegamos a Valladolid hubo que ensamblar el vestido de chapas. En el hotel. Labor harto complicada, porque te dejas las manos en el intento, ya que las latas tienen aristas cortantes. Y porque hay que montarlo sobre el cuerpo de la modelo. Si no lo has vivido, no te puedo explicar lo increíblemente laborioso y estresante que es.
El resultado es que cuando por fin llegamos a la gala las dos estábamos agotadas. En lugar de irnos a lucir el traje después de la ceremonia nos fuimos al hotel. Nadie apreció nuestro modelerío así que les dejo fotos.
Moraleja: Bendito el que poco espera, porque nunca será decepcionado. Pasemos a otro tema.
¿Por qué triunfo a ‘La sociedad de la nieve’?
En primer lugar porque la película es muy buena. Y como persona que SÍ que la ha visto, les recomiendo que la vean en cine y no en Netflix. Yo la he visto tanto en una pantalla grande como en una pequeña y la diferencia es abisal. En pantalla grande el espectador realmente vive como si fuera en carne propia en el momento del accidente. Y las impresionantes tomas de la montaña nevada pierden muchísimo en una pantalla de televisor.
En segundo lugar, por el carácter de Bayona. Creo que los que vieron la gala de televisión ya se dieron cuenta que se trata de un personaje excepcional. Adorado por su equipo, sensible y tierno. No es soberbio, se lleva bien con todo el mundo,q se dedica a trabajar y no insultar a nadie y nunca ha tenido enfrentamientos ni polémicas con nadie en este mundillo. Tampoco se ha destacado por apoyar causas de ningún tipo.Perdidas o no. De hecho, ayer muchísima gente se sorprendió al descubrir que era gay, porque, al contrario que otros famosos hombres homosexuales en este medio, no se ha dedicado nunca a hablar sobre su vida privada, ni hacer manifestaciones que hicieran creer en ningún momento que pretendía rentabilizar o colectivizar su situación.
Por último, y esto es lo importante, por mucho que mucha gente crea que el cine español está muy politizado -y lo está- no lo está tanto como parece. El cine español está altamente subvencionado y es deficitario. Y sabemos muy bien que determinadas películas se subvencionan dependiendo de la carga política que llevan. Es más fácil que te subvencionen «Te estoy llamando locamente» o «Veinte mil especies de abejas» en un momento en que al Gobierno español le interesaba promocionar la causa trans (porque la subvención se pidió hace unos años), que que te subvención en una historia sobre Pelayo y la Reconquista.
También es cierto que los periodistas españoles suelen estar muy posicionados y que uno ya sabe cuál es su posición política dependiendo del medio en el que trabajen.
Por eso, los Premios Feroz, otorgados por la crítica, suelen estar mucho más alineados con las causas que en ese momento se está en promocionando desde el ideario político de moda. Porque los otorga una crítica especializada, que a su vez come gracias a un medio que suele estar subvencionado por un entorno político.
Sin embargo, los premios Goya los premian los profesionales. Se contabilizan los votos de los miembros de la Academia . Los miembros de la Academia no son precisamente de derechas pero tampoco pertenecen a la neoizquierda . En su mayoría (estoy generalizando, y por supuesto que hay excepciones) son más bien votantes . Y los votantes del PSOE de toda la vida poco se identifican ideológicamente con las posturas del PSOE actual.
Por ejemplo, sospecho que no se premió a «Veinte mil especies de abejas» porque creo que a estas alturas demasiada gente conoce el último informe de la Asociación Americana de Pediatría que ha sido realmente demoledor con los tratamientos de bloqueo hormonal y hormonación cruzada. Bien, puede ser, que haya gente que no tenga ni idea del contenido del informe en cuestión, pero sí que le suena el runrún de que esterilizar a niños es un experimento digno de Mengele.
Tampoco creo que en un momento en el que la ley de amnistía está tan discutida se cree el caldo de cultivo adecuado para que los votantes sean favorables a premiar cine catalán. Y lo cierto es que una cosa no tendría en principio nada que ver con la otra. Ni David Trueba ni Elena Martínez tienen nada que ver con la situación política española. Pero los seres humanos tendemos a usar heurísticos. Utilizamos atajos de pensamiento. Y nos guiamos por sesgos cognitivos.
En este caso, por ejemplo, se ha dado , creo, el efecto marco. Esto quiere decir que a menudo tendemos a interpretar la información dependiendo del contexto en el que se presente. De forma que si una película catalana se presenta en un contexto conflictivo respecto a Cataluña es más probable que instintivamente no la premiemos
Ayer en la gala se había corrido el rumor -no sé si infundado o no – de que Carlos Vermut estaba preparando una demanda contra el diario El País. Como ya expliqué en otro artículo, no todo el cine español unánimemente considera ahora que Carlos Vermut sea un violador. Vuelvo a repetir que podría serlo o no serlo. Pero que llama mucho la atención que se publique un artículo tan virulento sin que exista una denuncia penal previa. Quizá por eso esa gala que pretendía ser tan reivindicativa no tuvo tanta protesta en los discursos como se esperaba. Y quizá por eso no demasiadas personas se abanicaban con el pai-pai que nos habían dado a la llegada y en el que se leía claramente el lema «se acabó».
En cualquier caso mi impresión absolutamente subjetiva es que Bayona resultó premiado porque cierto sector de la academia está ya un poco harto del extremismo ideológico que están adoptando los miembros más visibles pero no precisamente las más antiguos. Y que una propuesta como la de Bayona, que enfatiza el valor de la cooperación frente a la polarización, podía constituir el mensaje más certero en estos tiempos revueltos.