Así se come en cada región: los madrileños prefieren charcutería y los vascos pescado
En función de las comunidades autónomas, el gasto y el peso de los productos frescos en la cesta de la compra varía considerablemente
La diversidad de España es una de las riquezas de las que goza nuestro país. Una diversidad que se aprecia en multitud de aspectos, también en la alimentación y en los hábitos de compra. En función de las comunidades autónomas, el gasto y el peso de los productos frescos en la cesta de la compra varía considerablemente.
Unas diferencias que se aprecian en el peso de las diferentes categorías de productos que llenan las cestas de los consumidores en cada región. No obstante, hay una cuestión común, las frutas y verduras son los productos perecederos que más presencia tienen en la compra de los consumidores españoles, según datos de la cuarta edición del Observatorio de frescos de ALDI elaborado junto a Kantar Worldpanel a los que ha tenido acceso THE OBJECTIVE.
Durante 2021, uno de cada tres euros invertidos en la cesta de la compra de frescos se destinó a esta categoría, según el informe. A la fruta y verdura le sigue de cerca la carne fresca, con un 25,4%, el pescado y marisco, que representan un 14,9%, y la charcutería, 14,8%. Sin embargo, estos datos de la media nacional contrastan con las preferencias en cada comunidad autónoma.
¿Qué se come en cada comunidad?
Por ejemplo, según este estudio, las Islas Canarias destacan como la región en la que más peso tiene la compra de frutas y hortalizas. Asciende hasta un 45,6% en comparación con la media nacional. Los canarios también consumen más huevos que la media con un 3,4% (2,7% media nacional).
Entre otras curiosidades, el País Vasco destaca como la región con un mayor peso del consumo de pescado fresco y marisco, con un 17,2%, dos puntos porcentuales por encima de la media española. En cambio, la Comunidad de Madrid despunta por su elevado consumo de charcutería, con un 16,2%, frente al 14,8% del total de España. Por su parte, Andalucía destaca curiosamente por su elevado consumo de pan fresco, un 7,9% respecto al 6,6 de la media nacional.
En relación a la segunda categoría con mayor peso en la cesta de la compra, la carne fresca, en el caso de Castilla y León, el porcentaje aumenta hasta el 28,8%. Por otro lado, el origen de los productos frescos también es otro factor que los consumidores de la Comunidad de Madrid tienen en cuenta. En este caso, ocho de cada 10 madrileños y madrileñas se fijan en la procedencia del producto para incorporarlo o no a su cesta de la compra.
Por su parte, Cataluña es de las regiones que más importancia da a la proximidad del producto. En concreto, un 37% considera la proximidad como un factor a tener en cuenta, una cifra que se sitúa seis puntos por encima de la media nacional.
Compra de frescos
La relación calidad-precio es el principal factor que motiva a los consumidores españoles a la compra de productos frescos en el supermercado, con un 57% de las preferencias, seguido de cerca de la conveniencia (56%) y, a más distancia, de la calidad (38%).
Cataluña ocupa el primer lugar como la región que más gasto destina a la compra de productos frescos, con un 17,7%. Le siguen Andalucía, con un 15,8%, y Madrid, con un 13,5%.
Para casi tres de cada cuatro españoles es fundamental que los productos frescos sean de temporada y un porcentaje similar de consumidores (73%) considera, además, que la oferta de productos de temporada que ofrecen los supermercados es suficiente.
El consumo de carne, a la baja
Dentro de este estudio, elaborado a través de una encuesta cuantitativa realizada por un panel externo a 3.254 consumidores y consumidoras, es destacable también la tendencia a la baja del consumo de carne que continúa desde 2018. El Observatorio constata que durante 2021 el consumo de carne fresca y pan fresco se vio reducido, principalmente por una caída del tamaño de la cesta y una menor frecuencia de compra.
Esta tendencia se venía produciendo desde 2018, aunque, en el caso de la carne, la compra experimentó un repunte en 2020, debido a las restricciones en la hostelería que implicaron un mayor consumo en el hogar, tal y como explican desde el sector.
Por otro lado, las polémicas declaraciones de hace unos meses del ministro de Consumo Alberto Garzón sobre el consumo de carne, tampoco han beneficiado al sector. Una industria que, tal y como hemos contado en THE OBJECTIVE está atravesando un periodo complicado por la subida del precio de la luz y también por el encarecimiento de piensos a causa de la guerra en Ucrania, el principal granero de Europa.
