Los fondos irrumpen en las fincas rústicas y provocan el mejor dato en ventas en 15 años
La compraventa de fincas rústicas ha marcado un nuevo máximo con 13.926 propiedades en noviembre, el mejor dato desde 2008
El interés por la tierra se fortalece en tiempos de incertidumbre. Con la inflación todavía en niveles altos, los mercados financieros revueltos por la guerra, los inversores y pequeños ahorradores buscan cobijo para sus ahorros. Y lo encuentran en la compra de fincas rústicas, que no solo ha recuperado ya los niveles prepandemia sino que arroja el mejor balance de los últimos quince años, según los últimos datos pertenecientes a la Encuesta de Transmisiones de Derechos de la Propiedad (ETDP).
Concretamente la compraventa de fincas rústicas ha marcado un nuevo máximo con 13.926 propiedades en noviembre, el mejor dato desde 2008. Esta cifra supone un aumento del 20,19% respecto a octubre de 2022 y la mejor cifra para este periodo desde hace quince años.
Tras los seis primeros meses de 2022 encadenando récord históricos, la demanda comenzó a resentirse en verano. «Los datos ya no eran récord tanto por la sequía como los tipos de interés. También la inestabilidad política empezó a afectar a las compras en el campo que comenzaron a ralentizarse», explica Regino Coca, fundador y CEO de Cocampo en declaraciones a THE OBJECTIVE.
«La sorpresa que nos hemos llevado es que en el mes de noviembre -último mes del que hay datos-, sin ninguna explicación muy clara, hubo un repunte del 20% y nos hemos vuelto a colocar en una cifra histórica», resalta.
Además, el sector ha superado ya los datos prepandémicos en un 28,23% (en noviembre de 2019 se vendieron 10.860 propiedades). «Hay muchos inversores que buscan valores refugio y el campo ha sido el patito feo del inmobiliario hasta ahora», señala Coca. «Siempre que ha habido una guerra o inestabilidad la gente quería campo porque mantiene el valor de manera constante», apunta.
Fuerte interés de los fondos
El 93,2% de los propietarios de las fincas rústicas en España son personas físicas, de acuerdo al Instituto Nacional de Estadística (INE). Las sociedades mercantiles apenas representan el 2,6% de las explotaciones y el 11,5% de la superficie agraria. Sin embargo, poco a poco el sector va captando el interés de los fondos de inversión, que fueron grandes protagonistas en el sector el año pasado.
España es la séptima potencia agroalimentaria a nivel mundial. «Los fondos tanto nacionales como internacionales han mirado a España porque tenemos un campo muy rico y productivo, especialmente en la parte agrícola», apunta el experto. Además, el cambio de hábitos en el consumo se dirige hacia una demanda cada vez mayor de producto agrícola y ecológico, lo que potencia el atractivo.
«Los fondos están invirtiendo en agricultura, también fruto del cambio de hábitos de consumo donde cada vez se consume menos carne y se buscan mas alimentos veganos, ecológicos», añade Coca. Todo este tipo de especialización fomenta que el agricultor tenga que desarrollar nuevos cultivos o producirlos de forma diferente y «por eso crece el interés por el sector».
Principalmente, los fondos buscan en España cultivos superintensivos. «Básicamente leñosos, olivar, almendro, pistacho, también los cítricos y el aguacate», resalta el CEO de Cocampo. Entre las operaciones protagonizadas por fondos destacan la compra de 300 hectáreas para la producción de almendras, pistachos y olivas en Murcia por parte de la gestora SLM Partners.
La operación se realizó a través del fondo Silva Europe Fund, de 250 millones de euros. Por su parte, en junio el líder europeo de cítricos Citri&Co y la firma internacional PSP Investments formaron una alianza estratégica para adquirir y gestionar tierras por cerca de 150 millones de euros.
Empiezan a afectar los tipos
Sin embargo, 2023 no ha empezado como acabó 2022 y al igual que en otras inversiones, los tipos de interés también están empezando a pasar factura. Los fondos se han visto afectados por el encarecimiento de la financiación y «ya no van a invertir tan alegremente», señala el experto que cree que los fondos no van a protagonizar el primer trimestre del año.
Sí lo van a hacer, cree, los particulares. Hay un mundo intermedio entre los fondos de inversión puros y los particulares que es el de los family office que está apostando fuerte por el campo, según los expertos. Esta tendencia hacia la inversión en fincas rústicas no es exclusiva de España. Sin ir más lejos, Bill Gates es el mayor propietario de fincas agrícolas de Estados Unidos.
«Los gestores de patrimonio, los family office están super activos en el sector», destaca Coca. «Ellos tienen el patrimonio, no tienen problemas con los tipos de interés y están buscando valor refugio. Hay toda una tendencia de banca privada por apostar por el suelo rústico», asevera.