El Santander capta la mitad de clientes en España tras huir de la guerra de los depósitos
La entidad atrae a 100.000 usuarios en el último trimestre de 2023, pero alcanza 15 millones de particulares y empresas
El Santander ha sido una de las pocas entidades que ha evitado entrar en la guerra de los depósitos en la recta final de año, a diferencia de otros grandes competidores, como Caixabank, BBVA, Unicaja o Kutxabank. Y la falta de una oferta selectiva o concreta ha pasado factura: con una mejora en los tipos de interés, ha reducido su captación de clientes.
En concreto, según los datos recabados por THE OBJECTIVE, en el último trimestre su filial en España ha ganado 100.000 clientes, frente al entorno de 200.000 que venía atrayendo en los trimestres anteriores. Por ello, ha bajado a la mitad el ritmo. Aun así, en el global del año pasado el crecimiento de usuarios totales del banco ha sido muy positivo, ya que ha elevado la base en unos 700.000, alcanzando así la cifra de 15 millones de particulares y pymes.
La entidad ha querido ser cauta en la retribución por el ahorro tradicional y ha obviado las presiones del Gobierno y el BCE para que el sector elevara sustancialmente las tasas a los ciudadanos para equiparar los intereses a lo que paga la industria en Europa. Estas peticiones insistentes han surtido efecto en buena parte de la banca, pero el Santander ha huido de ellas. Eso sí, su filial online —Openbank— sí ha entrado de lleno en la batalla y desembolsa algo más de un 3%.
Muchas de las entidades que han elevado los intereses lo han hecho con carácter defensivo, es decir, para evitar una fuga, con promociones que han ido en ascenso y que llegan en algunos casos al 3% para los mejores usuarios. Esta práctica ha impedido al Santander mantener el ritmo de captación de clientes.
La presidenta del Santander, Ana Botín, explicó el miércoles en la presentación de resultados que no han elevado los tipos porque no era necesario, ya que la demanda de créditos es baja y, por tanto, no tienen que captar dinero para prestar. Además, señaló que en el mercado hay otras alternativas para que los clientes logren rendimientos altos, como son los fondos de inversión, las Letras del Tesoro y los productos de Openbank, por ejemplo.
De acuerdo con los datos, el banco paga de media a empresas y familias un 1% por los depósitos en nuestro país. Un porcentaje que es incluso superior al de otros bancos que sí han entrado en la batalla, como Bankinter. Esto se debe a que el peso de las compañías es mayor y éstas logran una mayor rentabilidad por el dinero que los hogares.
Pese a esta ralentización, el Santander ha encadenado 28 meses de subida neta en ganancia de usuarios. Ya hasta septiembre los había aumentado en 1,3 millones. Y, lo que es igual de importante, aquellos que son activos —que operan de manera habitual y tienen contratados productos y servicios que generan ingresos adicionales— han experimentado un alza de 521.0000 en 2023, hasta los 8,4 millones. Según el consejero delegado del grupo, Héctor Grisi, el número de este tipo de clientes ha seguido escalando y en enero de 2024 suman otros 40.000.
Para el Santander el aumento del número de clientes es fundamental, porque son claves para el sostenimiento del negocio y de los resultados a través de la vinculación futura de los mismos. No solo en España, sino en todas las geografías y segmentos en las que está presente.
La entidad se marcó a principios del año pasado alcanzar los 200 millones de clientes en todo el mundo a finales de 2025. La menor captación en España y en otros mercados, al igual que una limpia de los usuarios que son completamente inactivos, ha llevado al conglomerado español a reducir en el último trimestre de 2023 el total de usuarios a nivel global hasta los 164,5 millones. Si bien, en el conjunto del ejercicio, la ganancia es de casi cinco millones de particulares y empresas.
Con el fin de alcanzar la meta, Botín admitió que para los dos años que restan, el Santander «tendrá que acelerar en la captación de clientes». Pero se mostró optimista debido a lo planes que tiene en marcha, que pasan por la puesta en marcha de plataformas únicas globales para los distintos segmentos, que permitirán no solo sinergias de costes sino mejoras en el servicio.
Gracias a ello, por ejemplo, lanzará próximamente en EEUU un producto de ahorro para que su financiera de consumo pueda impulsar el avance de la actividad. «Necesita más recursos minoristas para seguir creciendo», resaltó la presidenta del Santander.