Digi tardará al menos un año en poder utilizar el espectro móvil de Orange y MásMóvil
Requerirá de una autorización del Ministerio de Transformación Digital, donde seguramente se impongan condiciones
Digi no podrá tener en su poder el espectro sobrante de la fusión de Orange y MásMóvil al menos hasta entrado el año 2025 y, por tanto, hasta esa fecha no podrán comenzar a desplegar su red móvil propia. Las fuentes del sector consultadas por THE OBJECTIVE indican que el proceso de reordenación de frecuencias, posterior migración y puesta en marcha tardaría al menos un año a partir de que comience el ajuste técnico que fue aprobado esta semana por el Consejo de Ministros.
Mientras Orange y MásMóvil ultiman la firma de su integración societaria tras recibir la última autorización del Gobierno español, cierran los últimos flecos de su equipo directivo y acuden a la banca para activar el préstamo para pagar el dividendo a sus dos socios principales, también tendrán que activar la toma de control de las concesiones de espectro radioeléctrico que ostentan las fusionadas.
Un movimiento que deberá contar con la aprobación del Ministerio de Transformación Digital de José Luis Escrivá. Debido a que la fusión supera los límites de frecuencias a utilizar por un mismo operador o grupo empresarial, los llamados spectrum caps, la normativa indica que la nueva entidad tiene cinco meses a partir del cierre de la transacción para revertir esta situación.
Espectro para Digi
El acuerdo con la Comisión Europea -validado por el Gobierno esta semana- para garantizar la competitividad en el mercado español, indica que se deben traspasar 60 Mhz de este espectro sobrante a Digi a cambio de 120 millones de euros. Pero esta cesión no será automática ya que requiere también de una nueva autorización del Ejecutivo, con toda seguridad sujeta a compromisos de inversión como ya ha adelantado este diario.
Las fuentes del sector consultadas indican que no será fácil encajar el espectro de Orange con el de MásMóvil, en especial las frecuencias de Yoigo, lo que podría tardar más de los cinco meses impuestos en la legislación. La normativa permite pedir prórrogas para completar el encaje de espectro con garantías, algo que por el momento no se considera, pero que podría solicitarse si es que llegado agosto (fecha límite si consideramos que el proceso comienza en abril) no se ha logrado completar.
Incluso si el proceso de ajuste de espectro de Orange y MásMóvil se completa en plazo, pasarán algunas semanas más hasta que el Gobierno valide el traspaso del espectro excedente a Digi. Este diario ya ha publicado que el Ministerio de Transformación Digital analizará con lupa todas estas operaciones y, pese a que este movimiento ya se ha aprobado en Bruselas, impondrá sus propias condiciones como garantías de inversión y de uso del espectro en un plazo razonable de tiempo.
Acuerdo mayorista
Una vez que se tenga la autorización, que debería llegar entre septiembre y octubre si es que no hay prórroga, el traspaso oficial no se haría hasta finales de año, por lo que no podría completarse formalmente la integración en Digi hasta comienzos de 2025. Antes de esta fecha, la operadora no podrá poner en marcha su esperada red móvil. Los planes pasan por tener activa su red durante ese mismo año, aunque dependiendo de los retrasos en el traspaso esta fecha podría dilatarse.
Este diario ha publicado que estos 60 Mhz serán el punto de partida de la red móvil de Digi, pero no será suficiente para construir una red propia con cobertura en toda España. Estas frecuencias solo le permitirán cubrir grandes poblaciones y núcleos urbanos, pero para completarla deberán mantener un contrato mayorista con otro proveedor. En estos momentos tienen un contrato con Telefónica en vigor hasta 2026 con un pago anual de 300 millones de euros al año, pero fruto de los acuerdos de la fusión tienen una opción de tener a partir de 2027 un pacto similar con Orange en ventajosas condiciones.
La idea de Digi es mantener su acuerdo con Telefónica por los costes de migración y el riesgo de perder clientes que podría acarrear, pero no quieren hacerlo a cualquier precio. THE OBJECTIVE ha publicado que las dos compañías llevan meses negociando las nuevas condiciones de una renovación donde la operadora rumana quiere rebajar el precio actual, pero todavía no se llega un acuerdo definitivo, lo que mantiene abierta la puerta de una eventual migración a Orange.
Red móvil de Digi
Desde el punto de vista de la cesión del espectro, el objetivo de Digi es tener los 60 Mhz a su disposición una vez que ya se confirme el nuevo contrato, ya sea con Telefónica y Orange. Con estos dos procesos resueltos, ya estarían en condiciones de comenzar a construir su nueva red móvil, materializando el proyecto en el que están trabajando desde que la Comisión Europea diera el plácet a la joint venture.
Respecto a la autorización del ministerio de Escrivá, se considera de que el plazo de cinco meses que debe pasar hasta que se reordene el espectro puede frenar del acuerdo de Digi con Macquarie (dueño de Onivia) para adquirir parte de su red fija, en total seis millones (su red total tiene 8,5 millones) de hogares por 600 millones de euros, según ha publicado recientemente Cinco Días.
Venta de la fibra
En el Gobierno no ven con buenos ojos operaciones de venta de activos estratégicos a fondos de inversión y menos con una autorización administrativa de por medio. No la bloquearán, pero estéticamente preferirían que se anunciara después de que se conceda el uso de las frecuencias.
El problema es que todos estos movimientos están relacionados. El ministerio de Escrivá quiere que Digi comprometa inversiones que la operadora ya ha hecho públicas: 2.000 millones en siete años principalmente en la compra de este espectro, despliegue de redes y equipos de telefonía móvil. Pero será difícil que lleve a cabo este plan sin los ingresos que obtenga por la venta de la gran mayoría de su red fija.