España gasta en salarios públicos un 45% más que Alemania y un 15% más que la Eurozona
En la actualidad hay seis asalariados privados por cada funcionario público, cuando hace seis años era de siete a uno
España se sitúa entre los países de la Eurozona que más gastan en salarios de sus empleados públicos. Concretamente, un 15% más que la media y hasta un 45% más si nos comparamos con el gasto público que destinan a esta partida países como Alemania. En comparación al PIB, España gasta 21.000 millones de euros más que la media de la Eurozona y 49.000 más que Alemania.
Así lo recoge un informe elaborado por el Instituto Juan de Mariana, al que ha tenido acceso THE OBJECTIVE, titulado Las sombras del mercado laboral español. Paro privado, maquillaje estadístico y exclusión laboral. Un trabajo dirigido por Manuel Llamas en que se pone de manifiesto cómo la tasa de paro real alcanza ya el 15,8%, frente a la cifra oficial del 11,8%.
El estudio de la fundación liberal también se detiene en el peso del empleo público sobre el total de ocupados, observando el crecimiento de esta cuota, con todo lo que esto supone en términos del gasto soportado por familias y empresas. Y es aquí donde demuestran que, en efecto, la relación entre asalariados públicos y ocupados privados (autónomos y trabajadores por cuenta ajena) muestra una tendencia muy clara, tanto que, si en junio de 2017 había casi 7 ocupados en el sector privado por cada empleado público, a cierre de 2023 encontramos que esta relación es ahora de 6 a 1, una cifra muy cerca del máximo registrado en plena pandemia.
El excesivo crecimiento del empleo público no es un fenómeno súbito -apunta este think tank-, «sino una tendencia anterior incluso a la crisis del coronavirus». «De hecho -señala- desde julio de 2017 hasta febrero de 2020, el número de trabajadores de las Administraciones creció un 7,1%, casi duplicando el aumento del 3,7% registrado en el ámbito privado y, ahondando en esta línea, también el primer año de la pandemia (marzo de 2020 a febrero de 2021) se saldó con un repunte del empleo público del 11,7%,
frente al desplome del 4,2% en la ocupación privada.
49.000 millones de ahorro
Desde ese momento, hasta mayo de 2023, el empleo público ha seguido aumentando, acumulando un incremento del 2,1%. Por lo tanto, superada la urgencia sanitaria, lo cierto es que, en vez de amortizar las plazas públicas creadas en la pandemia, tales empleos se han llegado a consolidar y, es más -añade el estudio-, «también desde el segundo trimestre de 2023, el empleo público ha crecido sistemáticamente más deprisa que el privado».
Con este preámbulo, el informe recalca que España gasta más en salarios públicos que la media de la Eurozona. Una tendencia, además, creciente, que vienen mostrando los desembolsos, lo que en términos comparados se puede verificar observando el gasto en remuneraciones de empleados público, que en España ya alcanza el 11,3% del PIB. Y, esto supone 1,5 puntos más que el promedio observado en los países de la Eurozona (9,8% del PIB).
Así, entre los países que gastan más que España -explica la Llamas a este diario-, «figuran los escandinavos, así como Francia y Bélgica. Por el contrario -señala-, los socios de la UE que asumen menores erogaciones -salida de recursos financieros- en salarios públicos «figuran Portugal, Grecia, Austria o República Checa, entre otros. Además -afirma-, hay un grupo de países avanzados que gastan mucho menos por este concepto, como es el caso de Italia (9,4% del PIB), Holanda (8,2%), Alemania (7,9%) o Irlanda (5,9%).
Con los datos de 2023 sobre la mesa, la Fundación Juan de Mariana determina que, «si España dedicase a sueldos públicos una cantidad homologable a la observada en la Eurozona, el gasto público sería inferior por un monto cercano a los 21.000 millones de euros anuales. Y de igual modo -subraya-, si el gasto español en salarios públicos fuese, como proporción del PIB, el mismo que el de Alemania, el ahorro sería de 49.000 millones de euros por ejercicio».
El desmesurado gasto público
Por otro lado, si comparamos la evolución de estos desembolsos a lo largo de la última década, esta fundación llega a una serie de conclusiones y, es que si tomamos como referencia el gasto en nóminas públicas, medido siempre como proporción del PIB, se puede ver que, «entre los 27 países de la UE, un total de 11 socios lo han reducido entre 2014 y 2023, frente a otros 14 restantes que lo incrementaron. Pero -indica- España se encuentra en el segundo grupo, con un incremento de una décima, de modo que el problema viene de lejos». Eso sí -destaca también-, «seis países que en 2014 gastaban menos que España en salarios públicos presentan en 2023 unos desembolsos aún más bajos en comparación. Es el caso de Irlanda, Italia, Holanda, Austria, Polonia y Hungría. Asimismo -puntualiza-, tres países que en 2014 gastaban proporcionalmente más que España han reducido el gasto de tal manera que ahora figuran por debajo de nuestro país, como ha ocurrido en Portugal, Grecia y Malta».
Acotando el análisis al periodo de gobierno de Pedro Sánchez (del tercer trimestre de 2018 al mismo periodo de 2023, último dato disponible), la Fundación Juan de Mariana encuentra que el gasto en nóminas públicas del conjunto de Administraciones Públicas creció un 27,3%, porcentaje que se sitúa casi un 25% por encima de la media de la Eurozona, donde el repunte fue del 22,1%.
Lo cierto es que el excesivo y creciente peso del empleo público, señala Llamas, «es una de las razones que explican el mal comportamiento de la economía española en relación con la UE-27, reflejado en los resultados del Indicador de Gestión Económica del Instituto Juan de Mariana, y que sitúa a España como el país con peores resultados durante el periodo 2019-2023, en base a variables como el PIB, los salarios, la deuda, el empleo o la presión fiscal». Además, y en términos agregados, el gasto público aumentó entre 2018 y 2023 de menos del 42 a más del 47% del PIB entre 2018 y 2023. Durante este periodo, la posición de España en el ranking mundial de PIB per cápita cayó del puesto 32 al número 37.
Por último, y de cada uno de los cinco años analizados en este trabajo, nuestro país se ha visto superado por otro, hasta terminar por debajo de Chipre, Eslovenia, República Checa, Israel y Aruba. Por eso -colige Llamas y, en línea con los estudios de eficiencia del gasto público del Instituto de Estudios Económicos y las recomendaciones de la Airef-, «los partidarios de seguir aumentando el gasto ignoran la cruda realidad de una economía que cada vez presenta peores resultados, como consecuencia directa de la continua expansión de los dispendios públicos».