Es una lástima
«Es una lástima que los momentos tan difíciles que vivimos los estemos sufriendo liderados por el peor presidente y Gobierno de la historia democrática de España»
Alejandra Svriz.
Es una lástima que en vez de poder escribir que el próximo domingo el constitucionalismo —PSC, PP y Vox— estaría en Cataluña al borde de lograr la mayoría absoluta, no podamos decirlo por el abandono que hizo el PSOE de la Carta Magna. El resultado de los tres partidos suma eso. Y hay que decir que el culpable de que el PSOE no esté en la Constitución no es Pedro Sánchez. El culpable de ese despropósito, y de muchos más, fue José Luis Rodríguez Zapatero. Zapatero fue el que hundió Cataluña con aquel compromiso de que aceptaría todo lo que, en la reforma inconstitucional del Estatut, aprobara el Parlament. Una promesa que hizo quien sabía que no iba a ganar las elecciones de 2004. 192 muertos y más de 2.000 heridos después llegó a la presidencia del Gobierno para ser el autor de la Ley de la Memoria Histórica, de la claudicación del Estado ante ETA, de la multiplicación por infinito del déficit público y de la recuperación de las lamentables «dos Españas».
El germen de toda la estulticia sanchista es Zapatero. Zapatero hundió España por querer que su abuelo ganara la guerra que perdimos todos. Su odio de origen, su rencor profundo, su cursi superficialidad y su banalidad impostada la pagamos todos. La vergonzosa impunidad de la que gozan nuestros expresidentes hace que Zapatero se crezca en todo su mal. Su odio aumenta a la par que su idiocia. Un cóctel explosivo para que, como estratega político de Sánchez, siga ejecutando su hoja de ruta que no es otra que mantener el poder total en connivencia con los independentistas minando la unidad de España.
«Rajoy mantuvo todas las leyes del zapaterismo lo que permite que ahora Sánchez pueda continuar el desastre»
Zapatero tiene toda la suerte que por él no tiene España. Su proyecto demencial fue rechazado por las urnas con una abrumadora mayoría absoluta en favor de Mariano Rajoy. Toda una lástima que el relevo de ZP fuera ese pusilánime cobarde, sometido por los papeles y cuentas capturados por Rubalcaba, que no hizo nada de lo que tenía que afrontar. Mantuvo todas las leyes del zapaterismo lo que permite que ahora Pedro Sánchez pueda continuar el desastre.
Que no se olvide nunca que a Mariano Rajoy Brey y Soraya Sáenz de Santa María les hicieron un referéndum ilegal en sus narices, les declararon la independencia exprés de Cataluña y aplicaron el artículo 155 de la Constitución más contraproducente, inútil y cobarde de la historia. Para Rajoy, mire usted, gobernar era muy difícil y como dijo en el juicio del procés «no sabía nada porque él estaba en lo importante». Eso que nunca nos explicó qué era y que le ha llevado a ser un cómplice necesario —involuntario o no— de todo el desastre que está pasando España.
Es una lástima que después de Zapatero y Rajoy llegara a la presidencia del Gobierno el megalómano narcisista de Pedro Sánchez. Un personaje sin una sola idea propia que no sea el poder por el poder. Es una lástima que los momentos tan difíciles que nos está tocando vivir los estemos sufriendo liderados por el peor presidente y Gobierno de la historia democrática de España. El primer presidente que su derrota en las urnas la tapó con sus cambalaches en el Congreso para seguir en el poder. La pandemia, con todo lo dramático de la misma, podía haber sido una oportunidad para la modernización y el relanzamiento de España con la ingente cantidad de fondos disponibles por parte de la UE. Es una lástima que todo eso se haya desperdiciado por los catastróficos gobiernos de Sánchez.
«Con Sánchez no hay verdad ni mentira. Es con él o contra él»
Es una lástima que a lo único que se dedique el presidente del Gobierno es a la ocupación y destrucción de las instituciones democráticas creadas por los españoles después de la dictadura. Y que a eso le llamen regeneración. Con Sánchez no hay verdad ni mentira. Es con él o contra él. Y todo lo que no sea a su favor lo conviertan, con la complicidad de medios afines al autócrata, en bulo o fake.
Es una lástima que el presidente del Gobierno se haya gastado más de mil millones de euros en comprar un puesto en el Consejo de Administración de Telefónica para Carlos Ocaña Orbis, su colega de libro sobre la tesis doctoral fake, por el que recibirá de honorarios cientos de miles de euros pudiendo llegar, en función de todos los puestos que atesore, a los 600.000 que cobra Javier de Paz metido en Telefónica por Zapatero. Es una lástima que Pedro Sánchez haya convertido a Televisión Española en un ente público propio de la época de la dictadura, que utiliza en beneficio propio saltándose todas las normas como el repugnante autócrata en el que se ha convertido.
Es una lástima que alrededor de Sánchez se encuentre la peor representación de la mediocridad española. El presidente del Constitucional o Tezanos que ha convertido al CIS en la oficina de propaganda, en un flagrante delito de financiación ilegal del PSOE, que lejos de estudiar la realidad sociológica española, a través de encuestas dirigidas, interfiere en la realidad con el objetivo de crear posicionamiento y opinión a favor de Sánchez y su Gobierno. Es mucho más que una lástima que Óscar Puente sea algo.
«Menos mal que la democracia mantiene, a pesar de Sánchez, un músculo suficiente para defenderse de los desmanes»
Es una lástima que un personaje tan mediocre como Álvaro García Ortiz sea el Fiscal General del Estado para utilizar la institución al servicio de Sánchez y para la inadmisible promoción y nombramientos impropios de colegas y amiguetes. Menos mal que son muy malos, por burdos, y la democracia mantiene, a pesar de Sánchez y sus camaradas, un músculo suficiente para defenderse de los desmanes organizados. Es una gran noticia que el TSJM investigue, en contra del criterio de la Fiscalía, a los fiscales de Madrid por la revelación de secretos de la pareja de Ayuso. Es todavía mejor que el Tribunal Supremo haya anulado el ascenso de Dolores Delgado, señora de Garzón, como fiscal de Memoria Democrática.
Todos sabemos que Baltasar Garzón hace negocio y profesionalizado el trapicheo sectario con la Memoria Histórica. Que después de muchos años de rollo con Lola —compartieron sábado noche en la cacería celebración por el inicio del caso Gürtel— se han casado. Y que dadas las circunstancias incurre en la prohibición recogida en el artículo 58,1 del Estatuto Orgánico del Ministerio Fiscal, que dice que no podrán ejercer sus cargos en las Fiscalías aquellos que «su cónyuge, o persona a quien se halle ligado de forma estable por análoga relación de afectividad, ejerza una actividad industrial o mercantil que obstaculice el imparcial desempeño de su función a juicio del Consejo Fiscal». Haber nombrado en estas circunstancias a Dolores Delgado inhabilita a García Ortiz para continuar en ese puesto en el que nunca tuvo que estar. Es una lástima que en TVE, de cuerpo presente, lejos de pedir su cese o dimisión, le haya brindado una entrevista masaje con Xabier Fortes, el comisario político.
Es una lástima para España y los españoles que Pedro Sánchez y su banda sean como son.
